La Jornada 7 de marzo de 1996

Carmelo Herrera, detenido; niega estar involucrado en el crimen de Lafragua

Ricardo Olayo Casi retador, Carmelo Herrera Gómez dijo a los reporteros que no creyeron en su versión: ``Tómalo como quieras. Cero comentarios''. Niega haber recibido dinero para asesinar a José Francisco Ruiz Massieu, como también negó ser parte de una banda dedicada al robo de autos, razón por la que fue detenido y enviado al Reclusorio Norte.

Seco, se quejó de que fue detenido desde el sábado y no se le había dado de comer. Rodeado por los reporteros, sin ninguna vigilancia de por medio, habló ante micrófonos y grabadoras. Herrera Gómez dijo que no tiene relación con el crimen de José Francisco Ruiz Massieu, asunto por el que fue sentenciado a tres años por encubrimiento.

Según las averiguaciones realizadas, recibió 50 mil pesos por victimar al dirigente priísta, pero nunca cumplió el pacto y se fugó con el dinero.

Ayer, Mario Croswell Arenas, coordinador de investigaciones de recuperación de robo de automóviles de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) lo presentó como integrante de una banda contra la cual hay acusaciones por robo de 25 automóviles, 11 que ya fueron recuperados serán entregados hoy a sus legítimos dueños.

Además también fueron detenidos otros tres sujetos que también se dedicaban a falsificar documentos, desde facturas hasta placas de circulación, pasando por verificaciones y tenencia, según dijo Croswell Arenas.

Herrera Gómez dijo directo a los reporteros que había asuntos sobre los que no tenía nada que decir. ``Sobre ese tema ya no?'', lanzaba y miraba de frente a su interlocutor. ``No conozco a nadie del caso (Ruiz Massieu)'', dijo una vez y ya no repitió. A Carmelo lo sentenciaron a tres años por encubrimiento, aunque sólo estuvo dos días en la cárcel.

``Porqué no mejor les digo que me detuvieron desde el sábado y que no me han dado de comer'', alcanzó a decir.

Con más de 1.80 metros de estatura y un peso de casi 100 kilogramos, durante varios minutos evadió preguntas, que a diferencia de otras ocasiones no fueron tan agresivas de parte de los reporteros.

Dijo que fue detenido en la delegación Magdalena Contreras, donde es encargado de un taller mecánico y que no tiene relación con los hechos.

La banda podría estar conformada por siete personas más que tenían funciones específicas. Según la declaración de los presuntos delincuentes, José Antonio Corona Pastrana es un sujeto dedicado a robar vehículos y quien se asoció con Carmelo Herrera, Marco Antonio Martínez Cardoso y Ricardo Mauricio Figueroa Arteaga, todos detenidos.

El pasado 1o. de marzo agentes judiciales detuvieron a tres personas en la venta de autos en la empresa Autos Bonilla SA, ubicada en la colonia Condesa. Al ser interrogados, indicaron que Corona Pastrana vendía los autos a muy bajo precio, sobre todo del modelo Jetta.

Al realizar las indagaciones como parte de seis averiguaciones previas abiertas, se logró ubicar a los cuatro detenidos. Según la PGJDF, los delincuentes robaban vehículos según las caraterísticas como los querían los clientes, muchos de ellos ubicados en tianguis o lotes de autos.

Ernesto Flores Flores, quien está prófugo, se dedicaba a falsificar documentación y uno de los consignados, Figueroa Arteaga, recogía las unidades para entregarlas a los compradores, quienes en muchos casos son de buena fe, no obstante serán investigados.

Los detenidos fueron consignados por asociación delictuosa, robo y fraude de acuerdo con la integración de cinco averiguaciones previas. Según Mario Croswell, estas acciones son los primeros resultados del trabajo que realiza la coordinación a su cargo.

Dijo que el fin es abatir la incidencia del delitos e informó que durante enero el número de vehículos robados fue de 189 al igual que en febrero, las cifras más altas que el promedio del año pasado.

Informó que ayer fueron entregadas 50 patrullas nuevas, con lo que suman 200 en toda la ciudad. De esas 50 tienen computadoras enlazadas vía satélite para verificar el número de placas de una unidad presuntamente robada.