La Jornada 7 de marzo de 1996

Aprobada, la Helms-Burton; México lo deplora

Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 6 de marzo La Cámara de Representantes estadunidense aprobó hoy, como lo hizo la víspera el Senado, y envió al presidente Bill Clinton para su promulgación, una ley para endurecer drásticamente el embargo económico contra Cuba, cancelando así la posibilidad de cualquier negociación para mejorar en un futuro las relaciones entre ambos países.

Pese a la fuerte oposición de socios y aliados de Estados Unidos, la Cámara baja dio una abrumadora votación de 336 votos contra 86 a favor del Acta de Libertad y Solidaridad Democrática con Cuba, promovida por dos legisladores republicanos, el diputado Dan Burton y el senador Jesse Helms.

Clinton envió una carta a la Cámara de Representantes, en un intento por evitar dejar un flanco electoral abierto en su contra, en la que reiteró que transformará en ley la iniciativa aprobada por el Congreso, que había bloqueado hasta el derribo de dos avionetas civiles estadunidenses por Migs cubanos hace once días.

``Nadie en Cuba y nadie en el resto del mundo debe esperar que este embargo se levante mientras no haya democracia en Cuba'', dijo este miércoles el líder de la Cámara de Representantes, Newt Gingrich. ``No hay un futuro para la dictadura de (Fidel) Castro. No hay arreglos'', añadió.

Según varios expertos sobre las relaciones Estados Unidos-Cuba, la legislación conocida como Helms-Burton pone fin a la habilidad del presidente estadunidense para iniciar cualquier negociación con la isla. ``Mas vale cerrar ya la oficina sobre asuntos cubanos'', comentó a La Jornada un funcionario gubernamental opuesto a la medida. ``Ya no hay una política hacia Cuba. Si yo fuera Castro, no me molestaría en hablar con Estados Unidos''.

La ley estipula que no se podrá hacer levantar o modificar el embargo hasta que la situación en Cuba cumpla con un lista de 12 condiciones, que incluyen la liberación de presos políticos, el establecimiento de la democracia, fin a la interferencia de la señal de Radio y TV Martí, un poder judicial independiente, respeto de los derechos humanos y la libre expresión, organización de elecciones libres dentro de un periodo de un año, la garantía del derecho a la propiedad privada, y que tanto Fidel como Raúl Castro se retiren del poder.

``Están diciendo que sólo se dará un cambio de política como resultado de dos balas'', indicó un funcionario estadunidense que intentó detener este proyecto de ley, mientras trascendió que funcionarios del Departamento de Estado se encuentran particularmente molestos porque Clinton se prepara a firmar una ley que virtualmente elimina el papel del Ejecutivo en el diseño de la política exterior hacia Cuba.

La iniciativa Helms-Burton concede el poder exclusivo de manejar el tema del embargo al Congreso, al convertir en ley todas las órdenes ejecutivas que forman parte del embargo vigente. Como destacó hoy ante el pleno de la Cámara el diputado de origen cubano Lincoln Díaz-Balart, ``ningún presidente podrá modificar el embargo''. Esto, para los encargados de la política exterior, es alarmante, ya que el Ejecutivo cede su poder constitucional de ser el encargado de la política exterior.

Para la especialista en relaciones Estados Unidos-Cuba, Gillian Gunn Clissold, de la Universidad de Georgetown, esta provisión de hecho significa que Estados Unidos no puede responder a cualquier cambio positivo de La Habana. ``El mensaje que se envía a Cuba'', comentó Clissold a La Jornada, es:``no esperen ninguna reacción de Estados Unidos si se mejora la situación de los derechos humanos, no esperen ninguna recompensa por las reformas económicas''.

Añadió que la controvertida tercera sección de la legislación, la cual permite demandar ante la justicia federal a empresas e individuos extranjeros que inviertan en Cuba en propiedades supuestamente confiscadas a ciudadanos estadunidenses, podría perjudicar el comercio de Estados Unidos con sus socios, al tiempo que tenderá a congelar la inversión extranjera en la isla.

Clinton, quien se oponía especialmente a esa disposición, negoció su apoyo a cambio de dos cláusulas que le permiten suspender esa medida por un lapso de seis meses cuando lo considere necesario para el interés nacional.

Oposición internacional

México, Canadá, la Unión Europea y Rusia ya han manifestado su oposición al proyecto, y los tres primeros anunciaron que apelarán a los organismos y tribunales internacionales. Incluso Canadá elogió hoy la decisión de México de impugnar a su lado los efectos comerciales de la Helms-Burton, mientras Brasil, Chile y Costa Rica también criticaron el endurecimiento del embargo con sanciones a terceros países.

Pero los promotores de la legislación recibieron con tranquilidad esas reacciones, y respondieron que ese es el propósito de la medida: ``estrangular'' a la inversión extranjera en Cuba. ``Nuestros aliados nos han insultado al no observar nuestro embargo'', consideró el republicano Porter Gross.

A su vez, Díaz Balart sostuvo que sólo los temores de que se aprobara la Helms-Burton habían provocado que el valor de la inversión extranjera en Cuba en 1995 se desplomara a la mitad de los niveles registrados en 1994.

La legislación aprobada hoy fue impulsada por una ola de furia generada por la acción cubana en contra de dos avionetas de Hermanos al Rescate, organización anticastrista con sede en Miami, ya que hasta ese momento la iniciativa estaba estancada.

Pero a partir del 24 de febrero, el propio Clinton, antes opuesto a secciones claves de la iniciativa, como el de las demandas contra empresas que inviertan en propiedades confiscadas, se convirtió en su promotor.

Además, la coyuntura política esta marcada por la proximidad de las elecciones primarias en el estado de Florida, el 12 de marzo, y los candidatos republicanos compitieron esta semana entre sí para ver quien se oponía con más pasión a Fidel Castro, por lo que el mandatario demócrata tenía que asegurarse de no mostrar debilidad en este punto.

Otros puntos de la ley

Una de las disposiciones que también provocó el rechazo internacional es la que niega visas de entrada a Estados Unidos a funcionarios y accionistas de empresas que comercien con propiedad confiscada en Cuba, así como a sus familiares.

La Helms-Burton también instruye al Departamento de Estado a buscar la internacionalización del embargo y a los representantes estadunidenses ante organismos financieros a oponerse al eventual ingreso de Cuba, y reclama la fiscalización de las importaciones de azúcar para certificar que no se ``triangulen'' productos cubanos desde terceros países.

Asimismo, condiciona su apoyo a los ex países socialistas a que sus tratos con Cuba sean estrictamente en términos de mercado, y retiene la ayuda estadunidense a cualquier país que apoye la finalización de instalaciones nucleares en la isla. También requiere que se reduzca la ayuda a Rusia en un monto igual al arrendamiento que Moscú paga a Cuba por el uso de una estación electrónica en la isla.

Retorno a los viejos tiempos

El intenso debate parlamentario sobre Cuba fue un resumen de la retórica estadunidense contra el gobierno cubano durante los últimos 36 años, y a veces parecía que la revolución acababa de triunfar y sorprender al superpoder.

Un diputado tras otro ocuparon el podio ante el pleno para condenar al castrismo y todo lo que representa. Dan Burton, coautor de la legislación aprobada, acusó al presidente cubano de lo peor. Después de recordar que había enviado a sus revolucionarios a todas partes --Africa, Centroamérica, Sudamérica, ``donde murió el Che Guevara''--, se indignó porque Castro aún cree que es ``un revolucionario comprometido''.

Burton, junto con varios más, repitió que Castro ``ha matado a miles, encarcelado a miles'', y aseveró que el embargo no va a perjudicar al pueblo cubano.

``Cuando Castro llegó al poder, Cuba disfrutaba del nivel más alto de vida del hemisferio, ahora tiene el mas bajo... no a causa del embargo... sino de sus políticas comunistas''. Insistió en que el líder cubano ``es un ser humano horrible'', tras recodar que según le habían contado, cuando Castro perdió en su juventud unas elecciones estudiantiles disparó contra su rival ganador.

El republicano pronosticó que esta ley resultará en la salida de Castro dentro de dos o tres años, y concluyó: ``Vete de aquí, Castro'', en el tono de otros promotores de la iniciativa, como Peter Deutsch, para quien ``tenemos a un imperio del mal a 90 millas de nuestras costas''.

Robert Menéndez, de Nueva Jersey, aseguró a su vez que esta legislación es un ``golpe a favor de la democracia'' y contra la ``dictadura cubana''.

Newt Gingrich recordó que en esa misma Cámara se habló hace 98 años de la opresión de España sobre Cuba y del deber de Estados Unidos de ayudar a liberarla. ``Igual como lo hicimos con España, tenemos que liberar a Cuba de Castro''.

Los opositores a la ley, encabezados por el diputado demócrata Lee Hamilton, insistieron en que esta legislación es un ``magno error'', al destacar el fracaso de la política del bloqueo de los últimos 35 años, la cuestión de la ``extraterritorialidad'' impuesta contra aliados y socios comerciales, el aislamiento ante la comunidad mundial en torno a esta política, la necesidad del diálogo para promover la democracia en Cuba.

Pero el veterano diputado de Florida, Sam Gibbons, fue quien mejor resumió el eco histórico de este debate: ``Si ustedes hubieran venido aquí hace 35 años, como yo lo hice, hubieran escuchado los mismos discursos de hoy... hubieran aprobado las mismas leyes de locura....''.

Y aunque admitió que entonces votó a favor de esas leyes del bloqueo, llegó a la conclusión de que fue un error, y que el aislamiento de Cuba es contraproducente. ``Estas leyes nos dañarán más a nosotros que a Castro'', sentenció.


David Aponte El gobierno de México presentó ayer una nota diplomática al Departamento de Estado, en la cual lamenta profundamente la aprobación de la ley Helms-Burton en el Congreso de Estados Unidos, así como el hecho de que sus preocupaciones, compartidas por la Unión Europea y Canadá, no hayan sido tomadas en cuenta, según informó la cancillería mexicana.

En consecuencia, las autoridades de México harán valer los recursos legales que ofrece el Tratado de Libre Comercio (TLC) para ``impugnar'' los efectos de esa legislación en el comercio internacional, en colaboración con el gobierno canadiense. En el rechazo a la ley, el gobierno mexicano no ``está aislado'', dijo el canciller José Angel Gurría.

Durante una breve declaración a tres diarios de la ciudad de México, el embajador de Washington en nuestro país, James Jones, manifestó que la ley, también conocida como ``Acta para la libertad y la solidaridad democrática en Cuba'', planteará algunos ``desafíos'' a la Organización Mundial de Comercio y al TLC.

``Y la cuestión es saber manejar el asunto de esta ley. Quizá algunas empresas mexicanas resulten afectadas. Sin embargo, en lo general no habrá ningún daño en la posición de nuestro comercio. No afectará la relación comercial con México y Canadá'', agregó.

Al conocer la aprobación de la iniciativa Helms-Burton en la Cámara de Representantes, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) emitió un comunicado de prensa en cual expuso: ``El gobierno de México lamenta que las preocupaciones que había manifestado sobre esta ley, compartidas por los países de la Unión Europea y Canadá, no fueran tomadas en cuenta en la versión final que se aprobó.

``México considera que varios capítulos y secciones de la ley contravienen al Derecho Internacional y a compromisos adquiridos en los ámbitos hemisférico y bilateral. En su letra y en espíritu, la ley en cuestión es contraria a los principios contenidos en la Carta de las Naciones Unidas, y contiene disposiciones que podrían generar conflictos de carácter legal, violando el TLC y los objetivos de la Organización Mundial de Comercio.

``Al gobierno de México le preocupa que, ignorando el principio de respeto a la soberanía de los Estados, la ley referida pretenda aplicar normas internas de Estados Unidos más allá de sus fronteras y someter a la jurisdicción de una Corte de distrito de su país, controversias resultantes de una acción tomada por un gobierno extranjero.

``En consecuencia, México hará valer, conjuntamente con Canadá, los recursos legales que le ofrece el TLC para impugnar los efectos que sobre el comercio trilateral tendrá esta iniciativa''.

El canciller José Angel Gurría expresó que ``la posición es la misma que ha mantenido el gobierno de México siempre, desde que se empezó a discutir el tema de la ley Helms-Burton, y es el hecho de que no es aceptable que haya la aplicación extraterritorial de las leyes de un país en otro''.

Después de acompañar al secretario general de las Naciones Unidas, Boutros Ghali, a la inauguración del parque de las Naciones Unidas en la zona de Chapultepec, el jefe de la diplomacia mexicana dijo: ''(La ley) es una violación al Derecho Internacional, a los convenios comerciales, como el propio TLC en vigor, y además, como siempre hemos mencionado, no es una posición en la que México esté aislado. El gobierno canadiense, la Unión Europea, la Mancomunidad del Caribe, en todos los grupos de países, en lo individual o en forma regional, han estado manifestando su preocupación y rechazo''.

Cerca de las 13:00 horas de este miércoles, la cancillería mexicana envió una nueva nota diplomática al gobierno de Washington para expresar su profunda preocupación por la aprobación de la iniciativa Helms-Burton que pretende endurecer el embargo económico contra el país caribeño.

Con la nueva legislación, el gobierno de Washington posibilita demandas legales a empresas extranjeras que inviertan en propiedades expropiadas por las autoridades cubanas, y busca desalentar las inversiones extranjeras en la isla, al negar la entrada a territorio de Estados Unidos a empresarios y ejecutivos extranjeros que comercien con La Habana.

Por la tarde, integrantes del Movimiento de Solidaridad con Cuba realizaron un mitin frente a la embajada de Washington en nuestro país, para expresar su repudio hacia la legislación estadunidense. Con aviones de papel, banderas de Cuba y globos blancos, lanzaron consignas y rimas como ``Che, Che, Che Guevara, la Helms-Burton a la chingada''. Los manifestantes lanzaron también huevos contra el inmueble de la legación.