Amado Carrillo, capo del cártel de Juárez, socio principal del colombiano Rodríguez Orejuela: DEA Afirma que es ``intocable'' en Mexico
Juan Manuel Venegas El informe de la Agencia Antinarcóticos de Estados Unidos sobre las organizaciones latinoamericanas de narcotraficantes indica que desde finales de 1994, Amado Carrillo Fuentes (El señor de los cielos y capo del cártel de Juárez) se convirtió ``en el principal socio del narcotraficante colombiano de Cali, Miguel Rodríguez Orejuela''.
Amado ``es el socio mexicano preferido'' de los cárteles sudamericanos e ``intocable en México'', dice el informe, y destaca que Carrillo cuenta con ``varias compañías de aviones, lo que le permite disponer de naves 722 que utiliza para trasladarse de Colombia a Ciudad Juárez directamente, o dentro del territorio mexicano'', aunque resalta que es un hombre con ``escaso y discreto movimiento en México''.
``Intocable'', dice el informe, porque aquí en México únicamente tiene pendiente una orden de aprehensión por portación de arma de fuego en 1990 el magistrado mexicano Gilberto Chávez Priego lo absolvió de los delitos contra la salud mientras en Miami y Dallas, es acusado y buscado por tráfico de heroína y cocaína.
Respecto a la acción de la justicia estadunidense contra los narcotraficantes mexicanos, el informe de la DEA indica que 70 miembros del cártel del Golfo han sido juzgados y sentenciados en Estados Unidos.
Desde 1995, agrega, la ``organización más activa en el tráfico de narcóticos es la que dirige Amado Carrillo Fuentes, quien ha sido el encargado de transportar los mayores cargamentos de droga que salen de Cali, Colombia, hacia México y Estados Unidos... la historia reciente del narcotráfico en América Latina indica que se convirtió en el principal socio de Miguel Rodríguez Orejuela''.
El señor de los cielos cuenta con ``varios ranchos en el norte de México, todos con pista de aterrizaje, por lo que sus desplazamientos aéreos están seguros'', afirma la DEA.
Esa seguridad precisa se complementa ``al ser propietario de varias compañías de aviación, que le permite utilizar aviones tipo 722 para trasladarse directamente de un lugar a otro''.
Para la DEA, el cártel de Cali, ``aunque siempre ha mantenido sus nexos con el cártel del Golfo de Juan García Abrego, desde finales de 1994 prefirió los brazos operativos de Amado Carrillo'', e incluso advierte que durante 1995, ``el 60 por ciento de la cocaína colombiana que cruzó a Estados Unidos se dio a través de la conexión Ciudad Juárez-El Paso'', controlada por El señor de los cielos.
Al respecto, cita que esta zona ``es considerada también como el punto de mayor afluencia de armas de contrabando, según informes de la Oficina federal de Alcohol, Tabaco y Armas de Estados Unidos (ATA), organismo que señala que los narcotraficantes son los principales beneficiarios de este ilícito''.
La DEA señala en su informe que ``a pesar de que en México, Amado Carrillo evadió la justicia y salió libre por decisión de un tribunal, sus operaciones han trascendido hasta convertirse en uno de los delincuentes más señalados y buscados en Miami, por tráfico de heroína y cocaína, y en Dallas, por contrabando de cocaína y armas''.
En cuanto a las conexiones de los cárteles colombianos y mexicanos, la DEA indica que García Abrego, ``durante muchos años fue el socio ideal de los narcotraficantes de Cali, y su organización en México se encargaba no sólo de transportar cocaína colombiana, sino que estableció una verdadera ruta para el contrabando en gran escala, desde Yucatán hasta el sur de Texas y Nueva York''.
Todo a partir de las conexiones con el cártel de Cali, de Miguel y Manuel Rodríguez Orejuela, agrega el informe de la DEA, y recuerda ``incluso las grandes cantidades de dinero en efectivo que fueron asegurados a operadores en México del cártel de Cali''.
Según la agencia, de 1989 a 1993, fueron decomisados ''53 millones de dólares que iban directo a bancos estadunidenses y que tenían relación con el tráfico de cocaína''. Estas grandes operaciones correspondían al cártel del Golfo, pero ``por lo menos desde finales de 1994 los colombianos prefirieron la sociedad con el cártel de Juárez, que además tiene diversas conexiones con las bandas estadunidenses que operan en el sur de Estados Unidos''.