En Mazatlán, signos de una nueva operación policiaco-militar

Víctor Guerra, Jorge Cornejo y Jesús Moreno, corresponsales Unos 300 integrantes del Ejército Mexicano mantienen ocupadas desde hoy instalaciones del recinto fiscal de Mazatlán, Sinaloa, mientras que 50 agentes del Instituto Nacional para el Combate a las Drogas (INCD) se posesionaron de un número no determinado de residencias de lujo, al parecer propiedad de los capos del narcotráfico Ramón y Benjamín Arellano Félix. De forma similar a la operación Alacrán, efectuada hace unos días en la ciudad de Tijuana, Baja California, los militares y los agentes antinarcóticos llegaron sorpresivamente a Mazatlán y en forma sigilosa tomaron posiciones en los lugares señalados.

Aunque las autoridades se mantienen herméticas al respecto y no se ha dado información oficial sobre las acciones, se supo que los militares estarían en busca de un gran cargamento de droga, que presumiblemente será transportado por barco y se encuentra en bodegas del recinto fiscal.

Los soldados llegaron en tren hasta las instalaciones portuarias, a bordo de cuatro carros de pasajeros, y nueve vagones más fueron utilizados para el traslado de equipo motorizado.

``Se trata de una operación sin precedentes'', observaron algunos trabajadores de la empresa Administración Portuaria Integral (API).

Los guardias que vigilan las instalaciones del recinto fiscal impidieron que los reporteros pudieran acercarse y sólo explicaron: ``Obedecemos órdenes del Ejército de no permitir la entrada a ninguna persona; ellos después les darán información oficial sobre los resultados de sus maniobras''.

Por otra parte, los 50 agentes del INCD procedentes de la ciudad de México llegaron desde ayer al hotel Camino Real, donde se hospedaron. La delegación de esa corporación para el área Sinaloa-Nayarit no negó que los agentes hayan venido a una misión especial, pero tampoco dieron precisiones sobre el caso.

Sin embargo, entre algunos de los agentes destacamentados en el puerto trascendió extraoficialmente que sus compañeros ya ocuparon al menos tres residencias de lujo, ubicadas en una zona exclusiva del puerto, supuestamente propiedad de los Arellano Félix.

Tanto en la sede militar como en la del INCD se dijo que si hay resultados de las acciones sólo se darán a conocer mediante boletines de prensa o alguna conferencia. ``Nosotros no acostumbramos decir lo que hacemos o haremos, sino hasta que se tienen resultados'', argumentaron.

Decomiso de enervantes

Agentes de la Policía Judicial Federal (PJF) comisionados en Baja California incautaron media tonelada de mariguana y cinco kilos de cocaína base en diversas operaciones realizadas en los municipios de Tecate y Ensenada, así como en el aeropuerto internacional de Tijuana. En estas acciones fueron detenidos ocho presuntos narcotraficantes.

Mientras, integrantes de la misma corporación confiscaron en San Luis Río Colorado, Sonora, más de media tonelada de mariguana que se encontraba oculta en un camión tipo torton que al parecer venía de Guadalajara, Jalisco.

A su vez, agentes de la Patrulla Fronteriza y de la agencia antinarcóticos de Estados Unidos (DEA) encontraron unos 250 kilogramos de cocaína que estaba abandonada en un lugar de la frontera de Nogales, Arizona, conocido como Las Mariposas. El hallazgo se suma al decomiso de 500 kilos de polvo blanco en la misma zona hace unas semanas.