Habría menos viajes en vehículos privados, planteará a la ARDF
Víctor Ballinas En el Programa General de Desarrollo Urbano del Distrito Federal que el gobierno capitalino propondrá a la Asamblea de Representantes para su aprobación, se recomienda que las vialidades primarias como el Anillo Periférico, viaducto Tlalpan, Circuito Interior, viaducto Miguel Alemán y la calzada Zaragoza, se conviertan en vías express de acceso controlado y de cuota.
Asimismo, el Departamento del Distrito Federal (DDF) recomienda que con objeto de fortalecer la vialidad oriente-poniente de la ciudad se realicen adecuaciones para que la avenida Chapultepec y su continuación por Fray Servando Teresa de Mier, adquieran características de viaducto confinado hacia la calzada Zaragoza, en el oriente, y a Constituyentes y Paseo de la Reforma, al poniente. Tendría, asimismo, conexiones hacia el norponiente a través de Mississippi y Thiers, para entroncar con viaducto Río San Joaquín.
Con estas decisiones, argumenta el DDF, se pretende inducir a un gran número de usuarios a reducir sus viajes en automóvil particular y utilizar el transporte público. Para ello es fundamental --se indica en el programa-- que el usuario cuente con una opción real de transporte público.
En este sentido, apunta, ``es indispensable contar con carriles exclusivos en aquellas vialidades donde se aplique el sistema de cuota para el sistema de transportación masiva''.
Una solución intermedia para elevar el nivel de eficiencia en la utilización de la infraestructura, agrega, se podrá lograr mediante la realización de vías express de pasaje en algunas vialidades primarias de acceso controlado, en la medida que proporcionan una accesibilidad a todas las áreas de la metrópoli.
Se establece que ``los costos que se impongan a los usuarios privados dependerán del tiempo de uso, de la ruta elegida y se aplicará preferentemente en horas pico y en días laborables. En la ciudad existen varias vialidades primarias que permiten la aplicación de esta medida como son: el Anillo Periférico, viaducto Tlalpan, Circuito Interior, viaducto Miguel Alemán y la calzada Zaragoza''.
Dicho programa, que estará sometido a consulta pública hasta el 15 de marzo --del cual La Jornada cuenta con una copia--, establece además que se deben terminar las obras con especificaciones de vías confinadas de alta velocidad, tanto en el Anillo Interior como en el Periférico.
Eso implica, advierte el estudio del DDF, la construcción de un número considerable de distribuidores viales en las intersecciones con las vías primarias del sistema reticular y ampliar la red digitalizada de semáforos.
Los lineamientos en relación al transporte y vialidad se sintetizan en tres líneas generales: primero, dar respuesta a la inminente regionalización de los problemas urbanos y la consecuente multipolarización de sus actividades económicas; segundo, el programa establece garantizar un uso más racional de la infraestructura e instalaciones del transporte, sobre todo en áreas congestionadas. La tercera línea de acción es la eficiencia de las empresas de transporte y su coordinación.
Se subraya en el programa que ``estos lineamientos suponen un desarrollo paralelo de los modos, lo que implica que el transporte público debe ser capaz de responder al incremento de la demanda inducida por las medidas aplicadas al transporte privado''.
La estructura vial de la ciudad, se detalla, responde a dos concepciones diferentes. Por una parte, la malla reticular heredada de las épocas Prehispánica y Colonial, fortalecida en los setentas por la realización de los ejes viales; y por la otra, los anillos concéntricos sobrepuestos a la retícula original, que causan múltiples conflictos en su intersección.
Sin embargo, advierte el DDF, ``es necesario, por una parte, continuar la estructura reticular más allá de los dos circuitos urbanos --Circuito Interior y Periférico-- para dar acceso a las nuevas áreas de crecimiento, tanto en los municipios metropolitanos como en la franja sur y poniente de las delegaciones, y a la vialidad Metro y megalopolitana, estableciendo carriles confinados para la circulación del transporte urbano de superficie.
En el documento, que el DDF sometió a consulta ciudadana en cinco sesiones --en la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi), para la zona centro; en la delegación Gustavo A. Madero, zona norte; Azcapotzalco, zona poniente; Iztacalco, zona oriente, y en Tlalpan, para la zona sur-- no se abordaron estas directrices del programa.
No obstante, sí se anunció en la consulta que es necesario construir dos anillos viales más. El Circuito del valle de México, que sería el tercero, tiene ya un avance considerable del lado poniente, pues ya están en operación los tramos de cuota La Venta-Chamapa y Chamapa-Lechería. Este tercer periférico ya está delineado en el norte y oriente, y por la vía López Portillo, que debe complementarse con una vialidad colindante a Ecatepec y Nezahualcóyotl.
Esa vialidad deberá conectarse con la propuesta del segmento sur, en el Distrito Federal, en un trazo paralelo inmediato a la línea de conservación ecológica para formar la autopista Chalco-Colegio Militar y su continuación Colegio Militar-La Venta.
El DDF establece en su propuesta que ''con la terminación de este circuito será posible canalizar los viajes de largo recorrido, a mayor velocidad, lo que disminuirá la congestión en las vías internas de la ciudad y consecuentemente sus efectos contaminantes''.
El circuito exterior regional será un libramiento que en el norte pasará por la autopista México-Querétaro a la altura de Huehuetoca, y en el oriente recibirá los flujos de los caminos provenientes del golfo de México, a través de las vías Tuxpan-Tulancingo-México y Ciudad Serdán-Ciudad Sahagún, llega a San Martín Texmelucan en la zona metropolitana de Puebla.
Prosigue hacia la autopista Oaxaca a través de la ruta Atlixco-Tetela de Volcán, y de ahí a Cuautla, Cuernava y Toluca. Ese circuito aprovecha la carretera existente a Tula y Pachuca, y como alternativa a ese último tramo se propone la comunicación Atlacomulco-Huehuetoca, con una distancia significativamente menor.