El flujo es el más alto desde 1946, asegura el subsecretario de Estado, Arturo Valenzuela
David Aponte, enviado, y La Jornada de Oriente, Puebla, Pue., 13 de marzo El tema migratorio ha sido utilizado en las campañas electorales y algunos sectores de la sociedad estadunidense rechazan los flujos, porque Estados Unidos vive el ``punto más álgido de migrantes indocumentados desde 1946'', dijo el subsecretario de Asuntos Interamericanos del Departamento de Estado, Arturo Valenzuela.
En la actualidad, agregó, cuatro millones de indocumentados residen ilegalmente en territorio estadunidense. El 40 por ciento proviene de México.
Por su parte, el secretario de Relaciones Exteriores, José Angel Gurría, indicó que nuestro país asigna particular importancia al combate a las redes de traficantes de migrantes indocumentados y de falsificadores de documentos oficiales. Por ello, dijo, debemos fortalecer la coordinación regional para poner un alto a esas actividades.
Durante el primer día de los trabajos de la primera Conferencia Regional de Migración, en la que participan diez países de América del Norte y Centroamérica, los delegados conocieron un proyecto de comunicado conjunto en el cual los gobiernos de la zona condenarán la violación a los derechos humanos de los migrantes y enfocarán su atención en la lucha contra los traficantes de seres humanos.
``Los gobiernos participantes acuerdan condenar las violaciones de los derechos humanos de los migrantes, independientemente de su condición migratoria, y luchar por la eliminación de dichas violaciones. Se prestará particular atención a las necesidades especiales de mujeres y niños, incluyendo su protección cuando sea apropiado'', señala el documento.
Por lo que toca a las mafias que trafican con personas, los gobiernos señalarán que con pleno respeto a la soberanía nacional y jurisdicción territorial, coordinarán esfuerzos para luchar contra esos grupos criminales. En ese sentido, también promoverán la adopción de normas jurídicas apropiadas en el plano local para tipificar penalmente ese ilícito y combatir las redes y conexiones de traficantes de migrantes en forma conjunta, según el documento que circuló en inglés y español.
En declaraciones a la prensa mexicana, el subsecretario de Asuntos Interamericanos del Departamento de Estado norteamericano, Arturo Valenzuela, manifestó que el tema migratorio se ha utilizado en las campañas electorales de su país y algunos sectores han rechazado los flujos, porque Estados Unidos vive el ``punto más álgido de migrantes indocumentados desde 1946''.
Sin embargo, el gobierno de Washington ha tomado las medidas necesarias para proteger los derechos humanos de los migrantes y sus familias. El hecho de tomar parte de la primera Conferencia Regional de Migración representa un avance significativo en el enfoque global del fenómeno, agregó.
Durante los trabajos, la subsecretaria adjunta para Población, Refugiados y Migración del Departamento de Estado, Phyllis Oakley, y la comisionada del Servicio de Inmigración y Naturalización de Estados Unidos, Doris Meissner, dijeron que la Conferencia representa un ``hecho histórico''. Ambas funcionarias comentaron que el gobierno estadunidense está preocupado por los nuevos flujos migratorios hacia el norte y por la expansión de las bandas de traficantes de seres humanos.
Por esos motivos, el Departamento de Justicia norteamericano ha tomado nuevas medidas de control migratorio en su frontera con México, explicaron. Más adelante, Meissner detalló a los representantes gubernamentales las nuevas medidas de control migratorio adoptadas por el gobierno de Washington.
En un hotel de esta ciudad, los delegados de Belice, Canadá, Costa Rica, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua y Panamá hicieron una exposición del fenómeno migratorio, desde su perspectiva, y analizaron los temas relacionados con las políticas migratorias locales, la administración de las fronteras, la protección de los derechos humanos, las redes de traficantes y la cooperación regional.
Durante la primera sesión, los representantes diplomáticos y funcionarios del área migratoria tuvieron aproximaciones relacionadas con el tratamiento global del tema, la defensa de los derechos humanos de los migrantes y el ataque frontal a las redes internacionales de traficantes de personas.
En su intervención, el canciller mexicano José Angel Gurría, señaló: ``México asigna particular importancia al combate a las redes de traficantes de migrantes indocumentados y de falsificadores de documentos oficiales. Estas organizaciones de delincuentes han proliferado en la región y obtienen sus ganancias lucrando con las carencias y el espíritu emprendedor de nuestros nacionales. Por ello, debemos fortalecer la coordinación regional para poner un alto a esas actividades''.
En la inauguración de la Conferencia, el funcionario indicó que el enfoque integral y de largo plazo del fenómeno migratorio permitirá reducir los ``riesgos, las estridencias, las fricciones y los abusos'' que producen algunas medidas coyunturales de control de la migración. En el esfuerzo, las naciones deben mantener respeto por la soberanía y los derechos humanos de los migrantes.
``México considera que la moderación y la tolerancia deben ser signos distintivos de las relaciones internacionales de fin de siglo. Esta es la visión del futuro. Por ello, rechazamos cualquier forma de maltrato o discriminación hacia los extranjeros en nuestro territorio y queremos contribuir con todas las naciones de la región a eliminar actitudes xenofóbicas donde quiera que éstas se presenten'', manifestó.
Gurría añadió que el derecho soberano de las naciones para hacer valer sus leyes migratorias y velar por el control de sus fronteras es compatible con el respeto sistemático de los derechos humanos.
Más tarde, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores habló ante unos 500 alumnos de la Universidad de las Américas, a quienes dijo que una de las misiones fundamentales del servicio exterior es la de velar por los intereses y derechos de los connacionales en el extranjero, sobre todo luchar contra los extremismos raciales. Por ello, recomendó a los consulados mexicanos en Estados Unidos redoblar su labor, particularmente en un año electoral.
Las delegados de las naciones participantes en la primera Conferencia Regional de Migración continuarán sus trabajos la mañana de este jueves, y por la tarde darán a conocer sus conclusiones a los medios de comunicación. De acuerdo con el anteproyecto de comunicado conjunto, las partes sostendrán una nueva Conferencia en la ciudad de Panamá, antes de que concluya 1996, para dar seguimiento a los acuerdos alcanzados en Puebla.