París, 15 de marzo Muerto Krzysztof Kieslowski, no resta sino descifrar la falsa etimología de su nombre: el beso es la llave del amor (kiss love's key). Pero lo increíble es cómo se le ocurren estupideces a uno, diez, quince, veinte pasos después de haber entrevisto, que no entrevistado, a Nathalie, en la boca del metro de Place d'Italie, ante la cual incliné la cabeza discretamente sin obtener siquiera un guiño, pensando, como iba, en la palabra ``defenestración'', que designa el acto de arrojar a alguien por la ventana y que proviene de no sé qué latín, pero que resulta clara y comprensible porque ventana en francés es fenetre y finestra en italiano, o lo que es lo mismo, aquello que en portugués se abre como janela (digamos yanela, para falar con propiedad), mientras en inglés se cierra como window, que proviene de wind, o sea viento, y es un término que plantea una muy antigua disyuntiva anglosajona, de la época en que los más remotos antepasados de Shakespeare apuntaban con el dedo a ese novedoso hueco en la pared que se tapaba con una tabla y después con un vidrio, pero sin saber cómo llamarlo, por lo cual sencillamente preguntaban a sus huéspedes: qué prefieres, wind or what? (viento o qué?), fórmula que en el transcurso de los siglos fue comprimida bajo la ley del menor esfuerzo, de modo que la opción or what? se convirtió en el sufijo ow?, lo que produjo en consecuencia la voz window? pero conservando el signo de interrogación, un hecho lingístico ratificado por las nuevas generaciones, pues los niños británicos, al referirse al tal hoyo cuadrado en la pared, solían decir y repetir hasta el cansancio window?, window?, lo que un buen día exasperó tanto al padre de una de aquellas criaturas que estalló al responder, no de mal, sino de pésimo talante: Yes, my son... It's a bloody window! Window!, y fue una afirmación tan rotunda y estentórea que el niño se echó a llorar y el signo de interrogación se apartó para siempre de la ventana inglesa, y en este punto fue cuando vi en la primera plana de los diarios franceses que había muerto Kieslowski y en sobrio desvarío me dije pero cómo se le ocurren estupideces a uno caminando por la avenida de los Gobelinos sin saber cómo ponerse en contacto con Nathalie.
El país único
``Figueroa, defenestrado'', avisa el tonto del pueblo a través del correo electrónico, pero eso es todo y no agrega ni explica más, porque el brevísimo mensaje está en una de las últimas líneas de un mail, que alguien en Barcelona envía a alguien en París para que deposite el recado en diversos buzones, en el entendido que hoy en día los buzones son los lugares donde vive la gente a la orilla de las autopistas de la información.
El nuevo diseño del mundo, según Internet, corresponde ya a la visión cómic del siglo XXI. Puesto que todo fluye a través de las redes cibernéticas, la velocidad suprime las distancias, las ciudades desaparecen como en la Edad Media y la gente que subsiste al margen de las nuevas tecnologías ya no cuenta, ya no existe, nadie la ve. Las universidades equivalen a los modernos monasterios, donde los monjes en vez de celdas ocupan solitarios cubículos. Las bolsas y los mercados accionarios vienen a ser los nuevos señoríos feudales y los noticieros de televisión que se transmiten mañana, tarde y noche son las nuevas horas canónigas.La galaxia de Internet se levanta sobre las ruinas de la galaxia de Gutenberg y representa la utopía excluyente del neoliberalismo, esto es, el retorno a las dimensiones demográficas del medievo en donde ya no caben las tres cuartas partes de la población mundial. Pero si en el futuro inminente la doctrina de la globalización concreta el ideal del pensamiento único, es decir, la abolición de los estados nacionales y la aparición de un solo país, achatado por los polos y ensanchado por el Ecuador, la resistencia de la especie humana tendrá a su vez que globalizarse para combatir, desde todas partes, contra el supremo gobierno del mundo.
Hay indicadores que apuntan en este sentido. A finales de febrero se llevó a cabo en Locarno, Suiza, una reunión preparatoria del primer Encuentro Europeo, que será, a su vez, la antesala del primer Encuentro Intercontinental por la Humanidad y contra el Neoliberalismo o Encuentro Intergaláctico, según Durito, que se efectuará en Chiapas entre los últimos días de julio y los primeros de agosto con la participación de representantes de América, Asia, Europa y Oceanía. Pero antes de ampliar esta información en una próxima entrega, permítaseme exponer por qué ha tenido tan entusiasta respuesta esta visionaria iniciativa de los zapatistas. Al menos por estos rumbos.
Hasta en la sopa
Danielle Mitterrand, viuda del penúltimo presidente de la sexta República francesa, acaba de publicar sus memorias de una larga vida política que transcurrió, dice, ``en todas las libertades''. Y en uno de los primeros capítulos de la obra, titulada precisamente ``En toutes libertés'', inserta una amplia cita del subcomandante Marcos a propósito de un tema que valdrá la pena retomar en otra ocasión.
En España, mientras tanto, Manuel Vázquez Montalbán entrega El Premio, su novela más reciente, y en ella aparece una mujer de 45 años, Carmela, que había salido hacia 1980 en Asesinato en el Comité Central como una joven militante del partido comunista. Ahora, tres quinquenios más tarde, Carmela forma parte de una organización contra el racismo y ``dirige un grupo sobre la ayuda a Chiapas'', actividades estas dos que Vázquez Montalbán define como ``militancias altruistas''.
No es un hecho gratuito. En todo el peninsular reino de Juan Carlos I, de 1994 a la fecha se han constituido más de 50 agrupaciones que se clasifican en plataformas, colectivos, núcleos y comités, de los cuales son los más activos y eficaces los de Barcelona, Bilbao y Madrid. Pero no se queda atrás el zapatismo en Francia, donde es más o menos semejante el número de organizaciones, grandes, pequeñas y unipersonales cuyos miembros, de manera para mí asombrosa, no hablan sino de México, no piensan sino en México y sin salir de París o de Toulouse, por decir algo, viven en México y en sus reuniones discuten el artículo equis o zeta de La Jornada que alguien bajó de Internet.
Así, por ejemplo, esta semana en todos los puestos de periódicos de Francia ha salido a la venta una edición especial de la popular revista humorística Charlie Hebdo, dedicada íntegramente a los zapatistas, que en una portada roja y encima de una caricatura del célebre dibujante Wolinski que retrata a Marcos en una postura típica, llama la atención de sus lectores con una cabeza inequívoca: ``Viva Chiapas: la locura de la lucha del EZLN''.Cuatro municipios?Una locura, en efecto, que se ha contagiado por estas tierras y que se manifiesta por igual desde la galaxia de Gutenberg, como lo prueban los casos arriba citados, pero que se extiende a través de la galaxia de Internet. Y no es casual que a la reunión preparatoria de Locarno hubiesen asistido los colectivos de Berlín, Hanover, Hamburgo, Barcelona, París, Ginebra, Lieja, Bruselas, Milán, Brescia y Amsterdam, entre otros, ni que uno de los temas del orden del día haya sido ``crear una comisión de enlace con los otros encuentros continentales'', a saber, el de Oceanía, que se realizará en Sidney; el de Asia, que será en Tokyo, y el de América, previsto para Semana Santa en La Realidad.
De los trabajos que convergerán tanto en Sidney como en Tokyo las noticias que circulan por los buzones de París dicen que avanzan con un grado de concurrencia que desborda los cálculos iniciales, pero lo que nadie sabe, de donde no llega ni siquiera una señal, es de Africa. Vistas de esta suerte las cosas, el movimiento zapatista de Asia, Europa, América y Oceanía puede estar en peligro de que un día no muy lejano el supremo gobierno de la Tierra pretenda minimizarlo arguyendo que se trata apenas de ``un conflicto en cuatro municipios'' del inmenso país único, esto es, en cuatro municipios del mundo.