La Jornada 19 de marzo de 1996

Cardenas: la vía legislativa, cerrada ``para evitar que las trasnacionales se apoderen de los recursos naturales del país''

Rosa Elvira Vargas y Néstor Martínez Existen razones legales, técnicas y políticas para oponerse a la venta de los complejos petroquímicos, pero sobre todo es una cuestión de patriotismo y responsabilidad exigir un viraje en las políticas petroleras vigentes, expresó Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano ante decenas de miles de personas que se reunieron ayer en el Zócalo de la ciudad de México para recordar un aniversario más de la expropiación petrolera.

Allí, y con una donación en efectivo y la entrega para subasta de una moneda de 1938 que hizo doña Amalia Solórzano viuda de Cárdenas, se inició la colecta que impulsan el PRD y otras organizaciones sociales para constituir una empresa social que le compre al gobierno federal los complejos petroquímicos que pretende vender.


Amalia Solórzano viuda de Cárdenas, Cuauhtémoc
Cárdenas y Porfirio Muñoz Ledo montan guardia
en honor al general Lázaro Cárdenas del Río, en el
58 aniversario de la expropiación petrolera.
Foto: Raúl Ortega

``Guardemos en manos de mexicanos patriotas la industria petroquímica y guardemos para ella el papel conductor de un desarrollo económico independiente para México'', planteó Cárdenas, quien por la mañana, al hacer un guardia de honor ante la tumba de Lázaro Cárdenas, su padre, indicó que sólo la movilización y la organización cívicas podrán detener la privatización de la petroquímica secundaria mexicana y la entrega de la soberanía que conlleva.

En ese mismo acto dijo que ``no se ven otras vías'' para evitar que las transnacionales se apoderen poco a poco de los recursos naturales del país, y advirtió que actualmente ``la vía legislativa está cerrada para ese fin''.

Por la tarde, en el Zócalo de la ciudad de México, el ex candidato presidencial perredista aseguró que, a partir del 21 de febrero de 1995, a México lo gobierna desde Washington el Departamento del Tesoro de Estados Unidos. ``Eso fue lo que convino Ernesto Zedillo con William Clinton, para que lo rescatara con un paquete de honerosos créditos''.

Al referirse al manejo económico de la actual gestión, manifestó que los indicadores macroeconómicos muestran ``que el gobierno de Zedillo se excedió'' y que la consecuencia más grave del ajuste lo constituye el haber condenado al país a un crecimiento prácticamente nulo para los próximos años.

El gobierno, apuntó, confunde recesión con recuperación y considera como un ``éxito'' la caída de 7 por ciento en el PIB, y pretende mantener al país con una economía de crecimiento cero.

Luego, al referirse al problema de las carteras vencidas como un conflicto social que constituye uno de los mayores obstáculos para la reactivación de la economía, Cárdenas Solórzano dijo que el riesgo de una crisis financiera mayor está latente y que la administración de Ernesto Zedillo, se resiste a impulsar la recuperación apoyándose en un mercado interno de 90 millones de mexicanos.

El mitin en el Zócalo

Convocatoria con gran respuesta fue la de ayer en la Plaza de la Constitución. Decenas de organizaciones sociales se sumaron al llamado y marcharon desde el Angel de la Independencia otras incluso, como el Sutaur, desde el Monumento a los Niños Héroes hasta el Zócalo. Eran tantos los contingentes que muchos llegaban a ese lugar cuando ya había hablado Cárdenas y le pidieron que repitiera parte de su mensaje.

También al arribar, los contingentes se encontraron todavía con un gran número de militantes del PFCRN, que habían realizado allí una concentración. No hubo posibilidades de confusión, pues mientras éstos instalaron su templete cerca de la Catedral Metropolitana, quienes marcharon por la tarde se ubicaron en el ala sur del Zócalo.

El mitin, conducido por la actriz Margarita Isabel, comenzó con la lectura de un texto de 1938, cuando doña Amalia Solórzano organizó la recolecta nacional para pagar la deuda contraída por el país con la expropiación petrolera.

Detallista en su exposición sobre los peligros que enfrenta el manejo de los energéticos nacionales, Cárdenas, primer orador, afirmó que la explotación de los depósitos petrolíferos se sigue haciendo con grandes pérdidas y desperdicios; denunció que la inversión oficial en esa actividad ha disminuido drásticamente provocando la obsolescencia prematura de ductos, refinerías y plantas petroquímicas, con graves riesgos de accidentes, y puso énfasis en que hoy se practica una política petrolera depredadora.

Pidió entonces que no se venda el petróleo para la exportación, sino que se impulse una política que prolongue lo más posible las reservas nacionales de hidrocarburos. ``Debemos eliminar en el plazo más corto posible las exportaciones de petróleo crudo y producir básicamente para satisfacer las demandas internas. Si algo se exporta que sean refinados y petroquímicos'', demandó.

Luego, Porfirio Muñoz Ledo, presidente del PRD, aseguró que el pueblo no está dispuesto a aceptar una sola privatización más si antes no se aclara el destino de los 30 mil millones de dólares que representó la venta de empresas públicas en el sexenio pasado, ``y que tal vez estén en las cuentas bancarias de la pandilla que gobernó a México''.

Dijo que la gran manifestación de ayer plantea el gran compromiso de constituir un frente amplio para el rescate de la soberanía. Un movimiento, subrayó Muñoz Ledo, de resistencia patriótica y democrática que a través de acciones civiles luche por el poder político para derrotar las acciones entreguistas del gobierno para rematar el patrimonio de los mexicanos.Cárdenas Solórzano, en su discurso de ocho cuartillas, también se refirió a la situación política y económica que vive México, con un Ejecutivo, aseveró, sin capacidad de convocatoria, en pleno descrédito político y con señales de endurecimiento. Añadió que pese al optimismo y los esfuerzos todo hace indicar que la mesa central para la reforma electoral que se realiza en Gobernación, ``simplemente abortó'' y se detuvo en el tema de la inseguridad en que vive prácticamente todo el país.

Agregó que en México nadie está seguro en su vida, en su integridad, en la de sus seres cercanos, ni en la de su patrimonio. Reprobó los crímenes impunes y las ``ineptitudes y complicidades de los cuerpos políciacos y sus jefes civiles y políticos''. Pidió detener la ola de secuestros y reclamó justicia en todos los casos: los asesinatos de Aguas Blancas, el de Luis Donaldo Colosio, el de la joven Paulina Rayek y los de los 70 perredistas muertos en los quince meses que lleva la actual gestión.

Los conflictos sociales se agudizan, señaló también Cárdenas y demandó respuestas satisfactorias para el Sutaur, así como libertad para sus dirigentes detenidos; los trabajadores de limpia de Tabasco; y un programa especial para resolver el problema de los deudores de la banca, que ha pasado a ser un conflicto social y representa uno de los obstáculos mayores para la reactivación económica.

Indicó entonces que a fin de que los recursos públicos y privados que se asignen a estimular el crecimiento no se reflejen en un alza de la inflación, sería necesario que los fondos destinados a proteger y promover los intereses de los banqueros en un problema sin solución como el de las carteras vencidas se reasignen a fines productivos y a la restructuración justa de las carteras.

En el mitin hablaron también Alfonso Ramírez Cuéllar, en nombre de El Barzón; Benito Mirón, por el Frente Amplio por la Construcción del Movimiento para la Liberación Nacional; Hebraicaz Vázquez, del Movimiento Nacional Petrolero; Bertha Luján, del Frente Auténtico del Trabajo, y el senador Félix Salgado Macedonio.

En el Monumento a la Revolución

Cárdenas también había dicho por la mañana que ``mientras el Congreso mexicano siga teniendo a la mayoría subordinada a la política entreguista del Ejecutivo, tendrá que buscarse la movilización y la concientización de los mexicanos como la única alternativa'', al intento de vender las petroquímicas.

La venta de la petroquímica secundaria representa ``un atentado del gobierno contra la soberanía nacional'', subrayó, y añadió que la presión del exterior ante un ``gobierno mexicano entreguista'' puede tener resultados gravísimos para la soberanía nacional, porque la economía trabajará en favor de otros intereses.

Poco antes, Muñoz Ledo afirmó allí mismo que la defensa de la petroquímica secundaria ``es posible todavía'' si se da un apoyo importante de la ciudadanía y si se realiza adecuadamente.

Explicó que las superpotencias, principalmente Estados Unidos, protegen sus reservas de hidrocarburos y se garantizan el abasto mediante el sobreendeudamiento de países como México. ``Nos están exprimiendo y el gobierno no se da cuenta... nos quieren hacer una colonia'', advirtió.

Movilizaciones de El Barzón

Prevenidos de que serían ``clausuradas'' las instalaciones del Banco de México, unos 20 integrantes del Cuerpo de Granaderos resguardaron el inmueble. No obstante, luego del mitin en el Zócalo y tras llamar Ramírez Cuéllar a una suspensión de pagos fiscales, los barzonistas se dirigieron nuevamente a tomar las oficinas de la institución bancaria, así como la sede central de Hacienda.

Ramírez Cuéllar planteó que no se permitirá que la banca rija la economía nacional y una vez más denunció que el gobierno no tiene voluntad para resolver los problemas del país.

Los barzonistas informaron que ayer se realizaron manifestaciones contra la banca en 22 entidades, y su dirigente Juan José Quirino reiteró la intención de establecer ``cordones humanos'' en Hacienda y el Banco de México para impedir el acceso de los empleados de ambas dependencias.