La Jornada 19 de marzo de 1996

Creció casi un punto en 60 días el desempleo abierto

Roberto González Amador y Carlos Antonio Gutiérrez, corresponsal El desempleo abierto afectó durante febrero a 2 millones 205 mil mexicanos en edad y condición de trabajar, que constituyen 6.3 por ciento de la población económicamente activa (PEA) y vieron cancelada cualquier oportunidad de conseguir una fuente de ocupación, reveló el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI).

En un informe difundido ayer, el organismo indicó que en el segundo mes del año la tasa de desempleo abierto se mantuvo en un nivel similar al de enero --6.4 por ciento--, aunque superó en 8 décimas de punto la registrada en diciembre de 1995, que fue de 5.5 por ciento.

El INEGI calcula la tasa de desempleo abierto como la proporción de la PEA --estimada en 35 millones de mexicanos-- que no trabajó ni una hora a la semana durante el mes en cuestión, a pesar de que realizó acciones de búsqueda de un empleo asalariado o intentó ejercer una actividad por su cuenta.

En los primeros dos meses de 1996, la tasa de desempleo abierto, de 6.4 y 6.3 por ciento, fue superior a la registrada en noviembre y diciembre de 1995, cuando se ubicó en 5.8 y 5.5 por ciento, de manera respectiva.

Añadió el INEGI que en términos anuales la tasa nacional de desempleo abierto superó en febrero pasado 18 por ciento la reportada el mismo mes de 1995.

El empleo se mantiene como el indicador que acusa un mayor deterioro desde el estallamiento de la actual crisis económica. En el transcurso del año pasado se perdieron 814 mil 465 puestos de trabajo --es decir, 2 mil 262 por día--, que se sumaron al millón de nuevos demandantes de una plaza que no la hallaron como consecuencia de la recesión económica.

Según el reporte sobre empleo divulgado ayer por el INEGI, se advierte un estancamiento en la generación de puestos de trabajo y en la calidad y retrisbución de los mismos. También destaca que de la población en desempleo total la más afectada es la femenina, cuya tasa de desocupación abierta fue en febrero de 6.8 por ciento, mientras que entre la masculina alcanzó 6.1 por ciento.

Otros indicadores contenidos en el reporte señalan que, por ejemplo, la llamada Tasa de presión general, que incluye además de desempleados abiertos a aquellos ocupados que buscan trabajo con el propósito de cambiarse o tener un empleo adicional, pasó de 10.7 por ciento de la PEA en enero a 10 por ciento en febrero.

En cuanto a otra medición, conocida como Tasa de ocupación parcial por razones de mercado --que representa la población desocupada y la ocupada que labora menos de 35 horas a la semana-- alcanzó a 8.8 por ciento de la PEA en febrero, y un mes antes fue de 9.1 por ciento.

El INEGI indicó que a nivel regional, Torreón, Cuernavaca y Guadalajara reportaron tasas de desempleo abierto inferiores a la nacional, con 6 por ciento de la PEA en cada una de ellas.

Con tasas superiores a la media nacional estuvieron Monclova, ciudad de México y Coatzacoalcos, con 8.3 por ciento la primera y 8.1 por ciento para cada una de las dos últimas.

De acuerdo con el informe, del total de los desocupados abiertos a nivel nacional, 86.2 por ciento --un millón 900 mil personas-- contaba con experiencia laboral, en tanto 13.8 por ciento restante --305 mil ciudadanos-- no la tenía.

El mayor porcentaje de la población ocupada estuvo concentrada en los servicios, con 37.9 por ciento del total; comercio, 21.4; industria de la transformación, 20.8; comunicaciones y transportes, 6; en el gobierno, 6; en la construcción, 5.7 y en ``otras actividades'', 2.2 por ciento.

Respecto a la jornada de trabajo, una quinta parte de la población ocupada registró una jornada menor de 35 horas.