La Jornada 20 de marzo de 1996

Aplazaron por tiempo indefinido la ejecución de Tristán

Jorge Caleb, corresponsal, David Aponte y Notimex La Corte de Apelaciones Criminales de Austin, Texas, otorgó el aplazamiento por tiempo indefinido a la ejecución de la pena de muerte contra el mexicano Irineo Tristán Montoya, programada para este miércoles después de las 18 horas.

La vocera de la Procuraduría de Justicia de Texas, Sonia Sánchez, dijo que el aplazamiento se otorgó con base en la apelación interpuesta por la defensa de Tristán contra la nueva legislación que rige la aplicación de la pena capital en Texas.

En la ciudad de México el consultor jurídico de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Miguel Angel González Félix, explicó que la defensa del conacional interpuso dos recursos ante la instancia judicial texana que surtieron un efecto positivo. ``El asunto legal no está cerrado. El gobierno y las autoridades de Tamaulipas (de donde es originario el sentenciado) seguirán su estrategia de agotar todos los recursos legales'', agregó.

El subsecretario de Asuntos Bilaterales de la SRE, Juan Rebolledo Gout, dijo que el aplazamiento representa ``una buena señal que nos permite seguir trabajando para evitar que el destino final sea la muerte''.

La cancillería afirmó en un comunicado que dará seguimiento al caso de Irineo y analizará las gestiones a su alcance para apoyar a la defensa, a cargo del abogado estadunidense Donald Flannery.

A su vez, el cónsul de México en Brownsville, Juan Carlos Cue Vega, señaló que la Corte podría confirmar la sentencia y fijar una nueva fecha de ejecución o bien revertir la pena y ordenar un nuevo juicio; pero incluso si se decidiera por la primera opción quedaría todavía la resolución de la Mesa de Perdones y Libertad Condicional de Texas, y los recursos de habeas corpus a nivel federal.

Víctor Tristán Montoya, hermano de Irineo, calificó la suspensión como una victoria de quienes apoyaron a su familiar, pero anunció que mantendrían el plantón que desde el lunes instalaron en el nuevo puente internacional de Matamoros hasta tener la certeza de que el caso se revisará.

Un caso de más de una década

Irineo Tristán Montoya, acusado de la muerte de un taxista estadunidense en 1985, se habría convertido mañana en el segundo mexicano en ser ejecutado en Estados Unidos en más de medio siglo, y en el primero desde la ejecución de Ramón Montoya en marzo de 1993.

El aplazamiento de su ejecución, por vía de una inyección letal, fue adoptado por la corte a las 11:00 horas locales.

Bonny Goldstein, abogada de Tristán, dijo que el aplazamiento es por tiempo indefinido hasta que la corte de apelaciones resuelva en torno de la polémica generada por la nueva ley texana sobre pena capital, cuestionada por tres convictos.

Irineo Tristán tenía 18 años cuando emigró a Estados Unidos con la ilusión de ganar dólares, en 1985. A los pocos meses de laborar en el puerto de Brownsville se involucró en un homicidio y la corte de Distrito 107 del condado de Cameron, Texas, lo encontró culpable del delito de homicidio con agravante el 17 de junio de 1986.

El juez Melchor Chávez le impuso la sentencia máxima prevista en el estado de Texas, fue condenado a la pena capital y se programó su ejecución para el 6 de agosto de 1992. Fuentes de la Procuraduría texana informaron que una eventual nueva fecha de ejecución será fijada por las cortes estatales una vez que exista el dictamen definitivo sobre la apelación al nuevo estatuto de pena de muerte de Texas.

La nueva ley en vigor establece que los condenados a muerte sólo podrán apelar su condena una sola vez ante un solo tribunal judicial, mientras que la anterior permitía múltiples apelaciones en distintas instancias legales. La apelación de Montoya protesta contra la intención de la legislatura texana de investir de carácter retroactivo a la nueva ley estatal.

Los procesos de apelación iniciados por los abogados de Montoya fueron anteriores a la entrada en vigor del nuevo estatuto, por lo cual no debe ser aplicable al proceso penal del mexicano, quien aún no agota sus recursos legales.

Su ejecución estaba prevista irónicamente a unos días de cumplirse el tercer aniversario de la muerte de Ramón Montoya Facundo, quien fue el primer mexicano en recibir este castigo en más de medio siglo en Estados Unidos.

Un grupo de hispanos realizó anoche en el centro de Houston una vigilia en protesta por los planes estatales, y el hermano de Irineo, Gabriel, hizo lo mismo en Austin frente a la Junta Estatal de Perdones.

Programan ejecución de otro reo mexicano en Hunstville, Texas

El preso mexicano Javier Suárez Medina será ejecutado el 31 de mayo próximo, informaron autoridades de Texas. El vocero del Departamento de Justicia Criminal de Texas, David Nunnelee, informó que si ninguna corte lo impide, Suárez Medina morirá a las 18 horas locales en la Unidad Wall del complejo carcelario de Hunstville, Texas.

El recluso, de 26 años y originario de Coahuila, llegó a la cárcel estatal el 13 de diciembre de 1988. Fue condenado a muerte luego de ser hallado culpable de asesinar a balazos a Rudy Cadena, un policía antinarcóticos de Dallas, Texas.