Las víctimas de la nave cóndor no presentan balazos: Forense; murió uno de los detenidos

Miriam Posada y Ricardo Olayo La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) informó que el doble asalto bancario cometido el pasado lunes, fue planeado hace tres meses por un comando de 16 delincuentes que adquirieron diversas armas, entre ellas metralletas conocidas como cuernos de chivo, con las que presuntamente derribaron el helicóptero Cóndor AS-350, a bordo del cual fallecieron dos miembros de la Secretaría de Seguridad Pública y un reportero radiofónico.

La dependencia agregó que las tres personas mencionadas perdieron la vida al impactarse la nave y la posterior explosión, según los informes del Servicio Médico Forense, quien indicó que ninguno de los cuerpos presentaba heridas por impacto de bala.

Uno de los sujetos detenido horas después del asalto, en un operativo en Iztapalapa, falleció ayer a consecuencia de la balacera en que fue capturado, sin que se tenga aún la confirmación de que haya participado en el robo.

En tanto, uno de sus presuntos cómplices, Fernando Carrillo Luna, declaró que el asalto se empezó a planear los últimos días de diciembre del año pasado, en cuanto tuvieron en su poder las AK-47 o cuernos de chivo, pistolas y otras armas largas.

Los investigadores de la Procuraduría capitalina han confirmado el número telefónico y la dirección que les proporcionó Carrillo Luna, quien sólo ha ofrecido medias filiaciones de sus cómplices, pues dice no conocerlos y sólo saber algunos de sus sobrenombres.

Alfredo Herrera Torres, actual director de Averiguaciones Previas de la PGJDF, informó que el monto del robo a las sucursales Cremi y Banpaís, ubicadas en Plutarco Elías Calles y Brea, colonia Granjas México, es de un millón 501 mil pesos.

El funcionario, quien será el titular de la nueva Coordinación de Investigaciones contra el Crimen Organizado, agregó que no es posible establecer si los detenidos pertenecen o formaron parte de la banda de asaltabancos que formó Alfredo Ríos Galeana. ``En muchos casos, los actuales grupos delictivos han rebasado en su forma de operar a ese delincuente que se ha convertido en un mitoÕÕ, indicó.

José González García, el delincuente que ofreció 50 mil pesos por escapar al primer superintendente Fernando Medina Morales, continúa internado en el Hospital de Urgencias de Balbuena, y de acuerdo con el Ministerio Público de la agencia 50, no ha rendido su declaración.

El tercer detenido durante el enfrentamiento es Félix Urquiza Maldonado, quien presuntamente no pertenece a la banda, sino que sólo es testigo y obtendría su libertad las próximas horas.

Por lo que hace a José Guerrero Flores, uno de los tres detenidos durante un enfrentamiento nocturno con elementos de la Fuerza de Tarea en la colonia Santa Martha Acatitla, murió minutos después de haber ingresado al hospital de la Comunidad Económica Europea, con una herida de bala en los genitales y otra en el abdomen.

De acuerdo con el Ministerio Público de la agencia 20, la familia de Guerrero Flores inició la averiguación previa 20/1870/96-03, por homicidio, en la que refieren que ignoran cómo ocurrió la detención y que tuvieron conocimiento de los hechos a través de una llamada telefónica en la que les indicaban que se trasladaran al hospital, porque su familiar estaba herido. Sin embargo, al llegar al nosocomio, José Guerrero había fallecido.

A su vez, Miguel Angel Torres, quien recibió un impacto de bala en el glúteo izquierdo, continúa internado en calidad de detenido y Enrique Guzmán Acevedo fue remitido a la agencia 44 del Ministerio Público.

Resultado de las autopsias

La causa de la muerte del superintendente Roberto Cañas Salazar, del reportero radiofónico José Manuel Amador Martínez y del integrante del agrupamiento Zorros, Isidro Rafael Preciado, fueron las múltiples contusiones que recibieron al impactarse la nave, lo que les provocó la muerte instantánea.

Los cuerpos se encontraron completamente calcinados con incrustaciones metálicas en piernas y muslos, además de trozos de fierro fundido en la piel, producto de la explosión.

El director del Servicio Médico Forense, José Ramón Fernández, destacó que ninguno de los cadáveres tenía heridas de bala ni se encontraron proyectiles.

Roberto Armando Cañas Salazar, presentó quemaduras en la totalidad del cuerpo, luxación de hombro, fractura de húmero izquierdo, fracturas de tibias y peronés, heridas en ambos parietales, lesiones en las primeras vértebras cervicales y clavícula izquierda fracturada, entre otras lesiones.

Rafael Preciado presentó quemaduras en todo el cuerpo, fracturas de húmero, tibia y peroné izquierdo, fémur derecho, hígado y pulmones contundidos, entre otras lesiones, al igual que el reportero José Manuel Amador.

Por otra parte, el hospital Los Angeles reportó que el estado de salud del piloto Vicente Rodarte Montiel, es estable pero aún se encuentra grave, por lo que las próximas 48 horas serán cruciales.