La Jornada 22 de marzo de 1996

Militarizan los centros petroleros en Bolivia, ante la huelga general

Afp, Ap, Efe, Ansa, y Ap, La Paz, 21 de marzo El gobierno del presidente Gonzalo Sanchez de Lozada militarizó esta madrugada todas las instalaciones petroleras, luego de que los trabajadores del sector anunciaron su próxima adhesión a la huelga nacional convocada por la Central Obrera Boliviana (COB), en rechazo a la privatización de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB).

La militarización de las instalaciones petroleras transcurrió pacíficamente, pero al menos cinco personas resultaron heridas y seis más detenidas durante enfrentamientos ocurridos en diversos barrios periféricos de esta capital en el marco de protestas organizadas por la COB, que demanda un incremento de 200 por ciento al salario mínimo (equivalente a 40 dólares) y se opone al programa de capitalización de las empresas estratégicas.

La policía dispersó con gases lacrimógenos a decenas de manifestantes que protestaron en varios barrios de esta capital, mientras al paro que desde el lunes mantienen docentes urbanos y rurales se sumaron este jueves los trabajadores sanitarios y los maestros, administrativos y estudiantes de las universidades públicas.

El ministro de Trabajo, Reynaldo Peters, insistió en calificar de ``poco seria'' la protesta de la COB, y rechazó que más de 40 sindicalistas se mantengan en huelga de hambre desde hace diez días, al señalar que "es una huelga de postas: los que ayunan durante el día salen por las noches y son relevados por otros", en tanto que el ministro del Interior, Carlos Sánchez Berzaín, calificó la huelga general de "estrategia para desestabilizar al gobierno e inclusive al proceso democrático"

El secretario ejecutivo de la COB, Oscar Salas, advirtió, tras conocerse la militarización de las instalaciones petroleras, que a partir de ahora se radicalizarían las medidas de protesta, y señaló que se desarrollarían manifestaciones y bloqueos en áreas rurales, además de asegurar que los trabajadores petroleros se sumarán el próximo jueves a la huelga general, por lo que, dijo, se cerrarán los centros de distribución de carburantes y el gasoducto a Argentina.

Tres ministros, incluido Peters, intentaron dividir a los trabajadores petroleros, e incluso llegaron a anunciar que habían alcanzado un acuerdo con estos, quienes, dijeron, aceptaron no sumarse a la huelga organizada por la COB.

Pero la dirigencia de los petroleros rechazó la versión, al tiempo que en Camiri, población del sudeste conocida como la capital petrolera nacional, el sindicato petrolero regional se declaró en huelga.

Por su parte, Sánchez de Lozada continuó con las consultas iniciadas el miércoles con representantes de la oposición parlamentaria que rechaza también el proyecto de ley de capitalización de YFPB, que de ser aprobado dará paso a la creación de varias empresas especializadas en exploración, explotación, transporte, refinación y comercialización de hidrocarburos y derivados, controladas en un 50 por ciento por inversionistas extranjeros. De este modo, YPFB subsistiría sólo como ente público administrador de contratos con las nuevas sociedades anónimas, y el gobierno recibiría ingresos por 2 mil millones de dólares.

YPFB tiene unos cuatro mil 500 trabajadores y controla directamente 60 por ciento de la producción petrolera y gasífera, y es también responsable de la producción de las empresas contratistas privadas.