Hay algo común entre los que representan al gobierno en los diálogos con el EZLN y Eraclio Zepeda, responsable de la Seguridad Pública en Chiapas: los escogieron por traidores.
La perversión y torpeza gubernamental ha decidido que el EZLN y los campesinos aún no tienen derecho de tratar con responsables directos del gobierno, sino solamente con traidores. Marco Antonio Bernal, Gustavo Hirales y otros, los Galios de Héctor Aguilar Camín y el fantasma de Salvador Morales Garibay, organizan su lucha y su estrategia contra los zapatistas y sus asesores. El silencio, un arma de dos filos: desgastarlos, provocarlos y no comprometer en nada al gobierno.
El mensaje gubernamental es sencillo: Querían interlocutores?, dialoguen con sus propios traidores; en las siete mesas estuvieron viejas y conocidas caras de viejos compañeros de todos los presentes y que hoy son teóricos del marxismo-salinismo. Algunos confundieron durante años la lucha revolucionaria con el militarismo y no satisfechos en la Liga 23 de Septiembre se siguieron en la PGR, como fue el caso del comandante Gustavo Hirales, que tardíamente descubrió que llevaba un policía dentro.
Por eso la delegación que representó al gobierno guardó silencio durante toda la segunda etapa de diálogo y no pudo fijar la posición gubernamental: no eran sus representantes, sino sus asesores contrainsurgentes que orientan en cómo quebrar las aspiraciones del EZLN. Para los asesores de la contrainsurgencia, el EZLN no debe salir de Chiapas, sólo representa conflicto en 20 muncipios y no debe ser tratado como una fuerza política. Los asesores de la contrainsurgencia no han encontrado la manera de aislar a los asesores y, aunque quieren tender ``puentes'', éstos buscarían dividirlos en interlocutores válidos e intransigentes. En que sótano de la contrainsurgencia aprendieron estas lecciones? Por eso no existe avance sustancial: en San Cristóbal no estaban los representantes del gobierno, sino nuestros traidores.
Podrían estos ``representantes'' defender el neoliberalismo, el TLC, las reformas de Justicia, la reforma del Estado? Con qué cara podrían hablar si los de un lado y otro de la mesa nos conocíamos, hace años compartimos ideas y actividades, y ahora son representantes del salinismo, el zedillismo, de la PGR, la contrainsurgencia, Gobernación y Seguridad Nacional? Cuál es la idea de los asesores provenientes de la traición? Es la paz con dignidad? Es la solución a fondo del conflicto? En qué asesoran Hirales y Bernal, a quién representan?La representación contrainsurgente tiene un significado grave para todos: mientras exista el EZLN y la izquierda seguirán siendo traidores. Aniquilar y anular su pasado es su tarea; ésa es una condición para los traidores activos: destruir lo que fueron. Los traidores sirvieron a Carpizo no sólo en la PGR, sino para destruir la fuerza del CEU y derrotarlo en el Congreso Universitario manipulando la Cocu (Comisión Organizadora del Congreso) y por eso a los Galios se sumó Jorge del Valle.
Estos representantes de Seguridad Nacional y de la contrainsurgencia son silenciosos, soberbios, duros frente a sus interlocutores porque están a prueba, y ésta consiste en anular, quebrar, reducir, no dialogar, y por ello están dispuestos a la ignominia. En tales condiciones es mejor tratar con un verdadero adversario que con un traidor.
En los diálogos, los traidores se convirtieron en los policías duros y sólo hablan para preguntar la vieja frase que consideran intimidatoria: ''qué proyecto tienen?''. Los Galios no tienen poder propio y su fuerza es el silencio.
Si el gobierno quiere demostrar respeto y diálogo, debe cambiar de representación por una razón: la perversión es un problema de fondo; forma es fondo y el marxismo-salinismo no es buen conducto para dar salida a una agenda política e ideológica sobre el rumbo de la nación, la economía y el Estado. Por qué no los mandan a negociar con el PAN y el municipio de Huejotzingo? Por lo menos Hirales ha estado en la PGR y podría entenderse con ellos.
Por más que el gobierno busca bajar el perfil nombrando representantes a nuestros traidores, la envergadura del diálogo, y el hecho mismo del diálogo, difícilmente es reversible a menos que se prepare la respuesta violenta. El EZLN no está aislado ni cercado políticamente, y esa batalla ya la ganó y debe ser reconocida. Por ello el gobierno debe tener representación propia en el diálogo y no representantes de piedra. Se imaginan al FMLN, la URNG, el FSLN o el M-19 tratando con sus propios traidores?Otro caso triste pero también indignante es el de Eraclio Zepeda, quien llegó ``para apaciguar'', según decía, y terminó de policía de los finqueros, en la matanza de Nicolás Ruiz, un pueblo con documentos originales de propiedad, que tenía en posesión dos años y había levantado dos cosechas de maíz y frijol. Hace 30 años, sus campesinos fueron despojados de 600 hectáreas por Heriberto Salas el cual, a su vez, vendió a José Pérez, Facundo Moreno, Francisco Peña, Nicolás Díaz, Rutilo Díaz, Franco Jiménez y Jaime Becerra. Este 21 de marzo la fuerza pública del comandante Laco Zepeda llegó por los cerros, rodeó a más de cien campesinos de Nicolás Ruiz, y mientras unos disparaban, otros quemaban el campo: más de 500 tiros de armas reglamentarias, 100 granadas de gases lacrimógenos y tres campesinos rezagados que quisieron poner piedras en el camino para que no pasará la fuerza pública, fueron asesinados por francotiradores. No pudieron ponerles armas en la mano porque ni siquiera llegó el agente del Ministerio Público ni nadie del gobierno dio fe pública de los cadáveres ni levantó declaraciones ni recogió las pruebas de los casquillos, insignias, gorras y cartuchos de los uniformados. Dicen que el ejército también disparó y que fue el que tomó el campamento de los campesinos.
Para qué todo esto? Resulta que Laco, héroe de los propietarios de tierras, no pudo devolvérselas. Los policías se fueron y los campesinos regresaron a ellas porque son sus dueños y están afuera de su pueblo. En Nicolás Ruiz todo el pueblo está unido, en la plaza y en la calle. Mujeres, hombres y niños se movilizan esperando que regresen a más de cien que se llevaron presos; se los llevaron a todos apilados como leña, unos arriba de otros, más de 200 kilómetros hasta Tuxtla; unos heridos, oliendo polvo y al punto de la asfixia.
Para Eraclio Zepeda y su ayudante Jarquín esto fue ``un incidente'' y es ``por la paz y la ley''. Zepeda realizó este acto tras haberse declarado que en Chiapas había terminado el rezago agrario y se levantaba la bandera blanca del fin del rezago. Sus policías fueron luego a Pichucalco y Nicolás Ruiz y no resolvieron nada.
Dicen que Eraclio ha cambiado y ahora los finqueros y las gentes de bien en Chiapas, lo quieren de verdad. Al igual que los Galios, se volvió el más duro y el más soberbio y por eso están contentos los priístas y los finqueros y lo consideran uno de los suyos. Eraclio está haciendo cosas que ellos ahora no se atreverían; Eraclio se dio cuenta de que llevaba un Figueroa dentro y al igual que los que continuaron su militarismo ultraizquierdista en la PGR, decidió, como Figueroa, demostrar que él ``sí es revolucionario y es valiente''.
Eraclio es ahora su propio cuento y ahora no escribe sobre campos en llamas y viejos campesinos despojados de sus tierras; ya no puede contarnos de campesinos asesinados ni finqueros medievales; ya no quiere platicar de la violencia y la muerte, por una razón: él quema ahora los pueblos, él ordena que la policía dispare, él defiende ahora a los finqueros, él encarcela a los viejos campesinos despojados.
Lo hemos visto y vivido quién podrá ahora escribir este cuento donde la traición tiene premio en el gobierno?En este diálogo de los zapatistas con la nación ha estado a prueba la infinita tolerancia y ganas por la paz; por eso, por lo menos, tienen derecho a una representación real del gobierno y no de fantasmas que han hecho de su vida un despojo de las peores causas.