Ricardo Alemán Alemán
Itinerario política

El regreso de Córdoba: De parte de quién?
En los Pinos: ``No ha venido ni vendrá''

El pasado martes regresó a México José Córdoba Montoya, el que fuera el número dos del gobierno de Carlos Salinas de Gortari. El motivo de su nuevo viaje: atender asuntos personales. Nada relacionado con el caso Colosio. Nada vinculado con el gobierno de Ernesto Zedillo. Por lo menos eso es lo que dijo a quienes le preguntaron.

Córdoba Montoya reaparece en México tres días después de que se cumplió el segundo aniversario del asesinato de Luis Donaldo Colosio y a dos días de que apareciera una entrevista en donde Luis Colosio Fernández responsabiliza al ex jefe de la Oficina de la Presidencia de organizar el complot que costó la vida al que fuera candidato presidencial del PRI, el 23 de marzo de 1994.

Quienes hablaron con José Córdoba Montoya dicen que parecía tranquilo, que no tiene previsto, por lo menos en lo inmeidato, responder a las acusaciones de Luis Colosio Fernández y que no ha intentado entrevistarse con el presidente Ernesto Zedillo. Lo que tenía que decir sobre Colosio, relatan los que hablaron con Córdoba, ya lo dijo.Acaso se refieren a la entrevista que por escrito concedió al periódico Reforma y que se publicó el 10 de septiembre de 1995. En esa ocasión Córdoba consideró ``un disparate y un infundio sugerir que yo le hibiera podido pedir a Colosio renunciar a su candidatura''.

También en esa fecha negó haber conocido, antes del 23 de marzo de 1994, sobre un complot para asesinar a Colosio: ``En ningún momento anterior al homicidio de Luis Donaldo Colosio tuve yo, en mi calidad de jefe de la Oficina de la Presidencia de la República, ningún indicio de ninguna índole de que alguien pudiera estar planeando un atentado en contra de su persona''.En la misma entrevista aclaró sus nexos con algunos de los personajes presuntamente implicados en el crimen: ``En ningún momento el general Domiro García Reyes dependió de mí. No conozco al señor Fernando de la Sota. No conozco al señor José Antonio Sánchez Ortega. Tampoco conozco a las víctimas de un doble homicidio ocurrido en San Diego, California, a principios de 1994''.

Pero las respuestas de José Córdoba Montoya, conocidas el 10 de septiembre de 1995, de ninguna manera eran consecuencia de un señalamiento directo como el formulado por el padre del candidato presidencial asesinado. El periódico sonorense El Imparcial publicó el domingo 24 de marzo una entrevista con Luis Colosio Fernández como su nota principal y con el siguiente encabezado: ``Culpa don Luis a Córdoba''.

El rotativo aclara que la entrevista se realizó el 21 de marzo de 1995 dos días antes del primer aniversario de la muerte de Colosio, pero se mantuvo en reserva a solicitud del padre del ex candidato presidencial. Entonces, hace casi un año, Colosio Fernández ya tenía ``informes'' que le hicieron llegar, según los cuales ``Córdoba Montoya preparó el homicidio en Lomas Taurinas'' o ``tuvo mucho que ver''.

Llama la atención que durante 12 meses Luis Colosio Fernández pareció cuidadoso en sus respuestas, siempre con la esperanza de que el crimen de su hijo se aclarara. Pero ya desde hace un año tenía reservas sobre la actuación del presidente Ernesto Zedillo: ``Ojalá que cuando la investigación apunte a Córdoba, el presidente Ernesto Zedillo no se eche para atrás'', dijo en marzo de 1995.

Pero en marzo de 1996, luego de 12 meses de espera y de esperanza, don Luis se decidió a hablar: No hay voluntad política para esclarecer el crimen, dijo. Censuró el ``doble discurso del gobierno'', responsabilizó a los ``hombres del poder'' por no dejar que se aclare el crimen y preguntó: ''Quién o quiénes impiden actuar? Qué intereses se colocan por encima de la obligación de procurar justicia de manera expedita? Hasta cuándo seremos víctimas del engaño y del abuso?``De suyo importante, la acusación de Luis Colosio Fernández va dirigida contra José Córdoba Montoya, pero también alcanza a la PGR y a la Presidencia de la República. Y ya han surgido voces que piden a Colosio Fernández presentar pruebas si es que las tiene, lo que parece razonable. Pero acaso la PGR ha determinado llamar a declarar a Salinas, a Córdoba o a Zedillo, por sólo citar a tres personajes que pudieran aportar algo en la investigación?Córdoba Montoya está en México, casualmente a pocos días de que se cumplió el segundo aniversario de la muerte de Colosio. Y si bien tiene todo el derecho a entrar y salir del territorio nacional, no parece casual su regreso y sí podría resultar oportuno que la PGR aproveche para aclarar dudas.

Por lo pronto, quienes en la residencia oficial de Los Pinos conocen la agenda presidencial confirmaron que Córdoba Montoya ``no ha venido ni vendrá''.

En el camino

Desde el domingo pasado, en los canales de Televisión Azteca, empezó a difundirse una cápsula en la que de manera institucional esa televisora reclama el esclarecimiento del asesinato de Colosio. Y no es parte del programa A quien corresponda.