Ningún ejército ganará la lucha antidroga: Barry McCaffrey

David Aponte La guerra contra las drogas no la va a ganar ``el Ejército de ningún país''. La lucha es un tema para los legisladores, los procuradores, los jueces, los policías y las familias y tendrá que darse mediante la cooperación internacional, con respeto a la soberanía e independencia de las instituciones nacionales, dijo ayer el general Barry McCaffrey, director de la Oficina Antinarcóticos de la Casa Blanca.

El narcotráfico es un flagelo que ``corrompe las instituciones políticas y sociales'' estadunidenses y mexicanas. Por ese motivo, argumentó, los gobiernos de Washington y México buscan nuevos mecanismos de cooperación.

El zar antidrogas llegó a la ciudad de México para sostener encuentros privados con el presidente Ernesto Zedillo y funcionarios de la Cancillería, de la Secretaría de la Defensa Nacional y la Procuraduría General de la República. Tras su llegada, MacCaffrey declaró a la prensa: ``Nuestros presidentes reconocen que la lucha contra el consumo y el tráfico de drogas sólo se puede dar en un marco de plena cooperación internacional. Este flagelo corrompe las instituciones políticas y sociales de ambos países. (Por eso) buscaremos mejorar (los) mecanismos bilaterales para enfrentar ese problema. Nuestra cooperación no puede lesionar la soberanía ni la independencia de las instituciones nacionales de cada país''.

El general expuso que las autoridades de ambos países están conscientes de que la cooperación bilateral es fundamental para atacar al narcotráfico. y que aceptan la responsabilidad de respetar la soberanía de cada lado de la frontera.

Los reporteros mexicanos mencionaron que si la certificación de la Casa Blanca y el respeto a la soberanía no resultaban una contradicción. El militar respondió que el tema de las drogas está relacionado con miles de millones de dólares y resulta toda una ``conspiración internacional'' con un enorme poder.

``Creemos que las democracias tienen que cooperar, si vamos a tener éxito en este trabajo. Así que encuentro necesario subrayar la importancia de que nuestras democracias trabajen con plena cooperación en este problema... Pero claramente vemos un compromiso de las fuerzas policiacas y las fuerzas armadas de cada país y son responsables a sus propias autoridades civiles dentro de sus propias fronteras'', manifestó.Qué hace Estados Unidos en cuanto al problema del consumo interno?Es necesario que nosotros en Estados Unidos estemos pendientes de la grave consecuencia de este problema, un problema que nos causa 10 mil muertes y nos cuesta 67 mil millones de dólares cada año. Nos agrada poder decirles que hay una baja de 30 por ciento en el consumo de cocaína en los últimos años. Los reportes de los últimos 10 años demuestran que el número de usuarios de drogas ha bajado de 22 millones a 12 millones.

``Pero todavía así es un gran reto para nuestra sociedad. El presidente Clinton y su gobierno están completamente interesados en continuar esta lucha.''Por qué los gobiernos de México y Estados Unidos consideran necesaria la participación de los militares en la lucha contra las drogas?Esta guerra no se va a ganar por el Ejército de ningún país. Esta lucha es tema para legisladores y jueces, policías, procuradores, líderes religiosos, profesores y, lo más importante, las familias. Quienes portan el uniforme militar pueden ayudar de maneras apropiadas en conformidad estricta de las leyes de cada país.

Antes de la llegada de McCaffrey, el embajador de Washington en México, James Jones, comentó que el general es un ``héroe de guerra'', un hombre muy respetado,y que su vista es muy importante, porque la cooperación antinarcóticos ocupa un nivel muy alto en la agenda bilateral.

En sus actividades de este martes, McCaffrey sostuvo una reunión de trabajo con el personal de la representación diplomática estadunidense. Por la noche, tuvo encuentros privados con funcionarios mexicanos en la residencia del embajador Jones.

Los representantes estadunidenses iniciarán sus trabajos formales este miércoles en la Secretaría de Relaciones Exteriores, donde sesionará por primera vez el Grupo de Contacto de Alto Nivel Antinarcóticos establecido por Zedillo y Clinton el 16 de marzo.