La Jornada 28 de marzo de 1996

Rechazan diputados la participación de extranjeros en las Afores; no hubo consenso, señalan

Ismael Romero y Elena Gallegos Legisladores del Partido Revolucionario Institucional y de la oposición concluyeron ante funcionarios de la Secretaría de Hacienda, luego de cuatro horas intensas de discusión, que no hay ``consenso'' sobre la participación extranjera en la constitución de las Administradores de Fondos de Ahorro para el Retiro (Afores) y por unanimidad establecieron que el capítulo y los artículos correspondientes tendrán que ser retirados de la iniciativa de ley que desde ayer se analiza en la Cámara de Diputados.

Encabezados por los presidentes de las comisiones de Hacienda, Francisco Suárez Dávila, y del Trabajo, José Ramírez Gamero, los priístas impugnaron la férrea defensa que hicieron los funcionarios hacendarios en favor de la inversión extranjera, e incluso llegaron a cuestionar el ``nacionalismo'' de éstos.

A la demanda priísta se sumaron legisladores panistas, perredistas, petistas y del Grupo Ciudadano, y todos en bloque demandaron además que en la Junta de Gobierno de la Comisión Nacional de los Sistemas de Ahorro para el Retiro (Consar) participe una representación de los trabajadores la iniciativa no lo prevé, pues son ellos los dueños del dinero que manejarán las Afores.

La diputación obrera priísta exigió, además, que la banca no maneje los recursos de las Afores. ``Los porqués están muy claros y muy manejados a la luz pública'', expuso la legisladora Claudia Esqueda. ``Hay inquietud entre los trabajadores. Nos preocupa el descrédito de los bancos'', agregó. ``Hay que poner una Muralla China para que no entren los bárbaros'', sugirió la priísta Dulce María Sauri.

A estos y otros temas, José Julián Sidaoui, subsecretario de Hacienda; Carlos Noriega, jefe de asesores del titular de esta dependencia; Ismael Gómez Gordillo, procurador fiscal de la federación, y Fernando Sólís, presidente del Consar, dieron respuestas que no dejaron satisfechos a los diputados de las dos comisiones.

Sidaoui y Gómez Gordillo fueron censurados abiertamente por priístas y opositores, cuando, a toda costa, quisieron convencer a éstos de que el Tratado de Libre Comercio obliga a México a aceptar la participación extranjera en las Afores, en igualdad de condiciones que a los sectores público, social y privado mexicanos.

Tonatiúh Bravo, diputado ciudadano, dijo a Gómez Gordillo que, como procurador fiscal de la federación, era el primer obligado en ``procurar en favor del interés nacional'', y le recordó que el propósito implícito del presidente Ernesto Zedillo, para las iniciativa que regulará a las Afores, es el fomento e incremento sustancial del ahorro interno.

``Por tal motivo me pronuncio en consonancia con el presidente Zedillo, en no abrir la puerta para desnacionalizar el ahorro interno'', dijo.

Jorge Padilla Olvera, del PAN, aseveró que se oponía a que los extranjeros acaben controlando el ahorro de los mexicanos, pues de acuerdo con el TLC, bancos o filiales extranjeras se podría quedar, en un monento dado, con todo el mercado de las Afores. ``Vamos a tener, en cualquier momento, a filiales extranjeras manejando la inversión de los ahorradores, de los trabajadores mexicanos'', advirtió.

El perredista Saúl Escobar se mostró preocupado por la interpretación de los funcionarios de Hacienda respecto del TLC, y dijo que en su opinión no necesariamente se le tiene que dar trato nacional a los intermediarios financieros extranjeros. Propuso la posibilidad de interponer una ``controversia'' y que algunos legisladores revisen la ley que regulará a las Afores bajo esa óptica.

Salvador Nikel, del PRI, preguntó a los funcionarios sobre el por qué de su insistencia en dar al TLC una interpretación que beneficia a los inversionistas extranjeros. Dijo que un punto fundamental a considerar era el nacionalismo.

En otra intervención, el panista Jorge Padilla sugirió eliminar los artículos de la iniciativa que permiten la participación extranjera en las Afores, y que sean los socios mexicanos los que contraten a sus abogados e interpreten el TLC.

``Nosotros contrataremos a nuestros abogados, para interpretar que el interés nacional está primero'', y esto le dará varios años de ventaja a las Afores nacionales. Creo que les estamos poniendo el tapete, la alfombra roja a los extranjeros, quienes tienen la posibilidad de tener el 100 por ciento de las acciones de una Afore'', expuso.

Eduardo Guzmán, del PT, opino que no se podían dar interpretaciones y dar ``manga ancha'', como lo estaban haciendo los funcionarios de Hacienda, y dijo que se trataba de un problema de posición. Asimismo, subrayó que la iniciativa de ley estaba hecha para un sistema financiero que ya demostró su incompetencia.

Quienes de plano propusieron que el capítulo y los artículos relativos a la participación extranjera fueron borrados de la iniciativa fueron los priístas Ramírez Gamero y Sebastián Lerdo de Tejada. El perredista Armando Quintero les dijo a los funcionarios que eran unos ``alcahuetes'' de los intereses de Estados Unidos, y que deberían mejor revisar conducta e interpretar el TLC y las leyes en favor de los mexicanos.

En una intervención inicial, José Sidauoi dijo que la participación de filiales extranjeras quedará sujeta a la aprobación del gobierno federal, en congruencia con lo previsto en los tratados o acuerdos internacionales correspondientes, en este caso el TLC, y que aquéllas se sujetarán al marco legal mexicano y que el dinero de los mexicanos no saldrá del país.

La iniciativa, resumió, concilia la salvaguarda del patrimonio de los trabajadores, con el respeto a los compromisos internacionales del país, y se aprovecha la experiencia y el capital de instituciones del exterior para ofrecer mayores opciones al trabajador.

Las palabras de Sidaoui no convencieron a los legisladores. Tampoco lo hicieron las de Ismael Gómez Gordillo, cuando una y otra vez leyó textos del TLC y dijo que un grupo de expertos y él habían concluido que la interpretación sobre la incursión del capital foráneo es la correcta. ``Es una interpretación honesta'', dijo.

Se trata, explicó, de una interpretación integral de las disposiciones del TLC y de la nueva Ley del Seguro Social (que estará vigente en 1997). ``Pretender tratar a entidades extranjeras en forma distinta como se hiciera para las mexicanas, violaría el principio de trato nacional y eso es lo que pudiera dar lugar a llevar a un panel'', añadió.

El diputado priísta Ramírez Gamero recordó que en las negociaciones del TLC se quedó en que no se iba a tocar lo que se refiere al trabajo y seguridad.

Gómez Gordillo dijo después que el TLC no se puede anteponer al interés nacional y que éste debe desarrollarse bajo un ámbito de competencia, basado en la eficiencia, donde el beneficiado final sea el propio consumidor.

El priísta Francisco Suárez Dávila intervino para señalar que las palabras de Gordillo lo habían alentado, cuando aquél se refirió al interés nacional. Pero reprobó que el funcionario se empeñara en defender la inversión extranjera, cuando en Estados Unidos llegan a cambiar incluso su legislación ordinaria, que sí priva sobre el TLC.

Suárez Dávila se llegó a molestar con Gómez Gordillo cuando éste insistió en que la interpretación del TLC y de la Ley del Seguro Social sí posibilitan la participación extranjera.

Tonatiúh Bravo citó una disposición que establece que la Secretaría de Hacienda estará facultada para intrepertar, para efectos administrativos, las disposiciones sobre servicios finacieros que se incluyan en los tratados o acuerdos internacionales. ``Que la interpretación sea en favor del interés nacional, pidió.

Otros cuestionamientos en los que los funcionarios de Hacienda no cedieron terreno, fueron los relativos a la participación de una representación de los trabajadores en la Junta de Gobierno del Consar. José Ramírez Gamero y Alfonso Reyes Medrano dijeron que en este punto exigirán cambios a la iniciativa, pues si los trabajadores son dueños del dinero que manejarán las Afores, tienen el derecho de participar en la toma de decisiones, sobre el destino que se les dará.

Diputados y funcionarios volverán a reunirse en abril, después de que la Cámara realice consultas con los sectores involucrados, en torno a la iniciativa de ley que regulará las Afores.

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