Más endeudamiento postergaría la reactivación económica, dicen funcionarios de Hacienda

Elena Gallegos e Ismael Romero De persistir la tendencia a la baja de los ingresos tributarios --el año pasado fue del 19.7 por ciento-- y al alza en el costo de la deuda cuyo servicio se incrementó en términos reales 90 por ciento en el último trimestre de 1995, el gobierno tendrá que volver a ``echar mano'' del gasto público para evitar un mayor endeudamiento que sólo dispararía más las tasas de interés y postergaría la reactivación de la economía.

En una reunión que sostuvieron con legisladores de las comisiones de Hacienda y Programación los directores generales de Política Presupuestal, Jorge Chávez, y de Política de Ingresos, así como el coordinador de asesores del secretario Guillermo Ortiz, Carlos Noriega Curtis, insistieron en que fue eso, precisamente, lo que se hizo en 1995.

El presidente de la Comisión de Programación, el priísta Antonio Sánchez Gochicoa, dijo a los funcionarios de Hacienda que resultaba muy trágico para el país el que se hubiera hecho una ``transferencia brutal'' de recursos para el pago de la deuda.

``Eso fue patético porque se dejó de gastar en cuestiones sociales para afrontar el costo de los intereses de la deuda y para servir a los intereses de los dueños del capital'', indicó.

No obstante, los funcionarios se mostraron optimistas y señalaron que esperan que la actividad económica se recupere y, con ella, los ingresos tributarios, aunque adelantaron que es previsible que este año se mantenga la tendencia a la baja porque la economía no entra todavía a una etapa de franca recuperación.

Diputados y funcionarios intercambiaron puntos de vista sobre las cifras del último trimestre del año pasado, cuando el ingreso total del gobierno tuvo una caída del 3 por ciento. Esa caída, dijeron, pudo haber sido mayor pero ello fue evitada por los ingresos petroleros y el incremento del IVA.

Otros indicadores del ``terrible'' año que en materia económica vivió el país y que salieron a colación durante el encuentro que se efectuó en el salón Presidentes de San Lázaro, fueron: reducción de la inversión pública del 18.5 por ciento; recorte de 14.8 por ciento del gasto programable y la disminución del 12.5 por ciento a las participaciones a estados y municipios.

Los funcionarios explicaron que las participaciones se hubieran reducido ``casi hasta llegar al 30 por ciento, con el consiguiente costo'', pero también gracias a que se aumentó el IVA esto pudo evitarse. Recordaron el ``componente'' que tiene ese impuesto, ya que un porcentaje del mismo va al ramo de participaciones a estados y municipios.

Jorge Chávez dijo con insistencia que si se hubiera recurrido a más endeudamiento público la situación sería más grave porque las presiones sobre los fondos cambiables hubieran empujado a una mayor alza de las tasas de interés, con el lógico postergamiento de las reactivación económica.

El director de Política Presupuestal comentó además que durante 1995 sólo el ISR se redujo en 23 por ciento en términos reales como consecuencia de la caída de la actividad económica, y reiteró que es previsible que en lo que falta de 1996 se mantengan las tendencias al decrecimiento aunque adelantó que las tasas de ese impuesto cada vez serán menores porque ya se comenzó a tocar fondo.

De acuerdo con Chávez, el año pasado creció sin precedente el costo del servicio de la deuda debido a la variación cambiaria y a que se contabilizaron en ese renglón los 15 mil millones de pesos que se destinaron al ADE.

Indicó que ``dada la menor disposición de recursos en términos reales, no nos quedó más que echar una mano al gasto'', y negó que ese dinero haya sido para apoyar a los bancos, considerándolo incluso ``gasto social'', pues sirvió para apoyar al pequeño deudor.

En otro acto que se efectuó en San Lázaro fue presentado el libro Municipio y Democracia, trabajo de recopilación de la diputada panista María Elena Alvarez de Vicencio. Al acto asistieron el líder Humberto Roque Villanueva y el coordinador de la fracción del PAN, Ricardo García Cervantes. Presentó el libro el diputado Jorge Moreno Collado.