Se opone Sánchez Navarro a un golpe de timón del gobierno

La Jornada de Oriente, Puebla, Pue., 27 de marzo Juan Sánchez Navarro sostuvo que para que el país logre salir de la crisis económica es necesario que antes se resuelvan los conflictos políticos, y advirtió que la clave radica en restaurar la confianza en las instituciones.

El ex presidente del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios refutó a quienes piden que el presidente de la República dé un ``golpe de timón''. ``Yo les preguntaría, ¿hacia dónde quieren que se dé ese viraje? Creo que no vamos mal en la política ni en la economía, pero la crisis fue de tal profundidad que sería muy difícil que de manera casi inmediata se llevara a cabo una transformación hacia un futuro mejor en el país'', dijo.

Tras ofrecer una conferencia ante el Foro de Empresario Jóvenes de la Coparmex, Sánchez Romano señaló que la situación, tanto económica como política, está encauzándose bien aunque lentamente, e insistió en que no es posible resolver los problemas con demasiada rapidez.

El también ex presidente del Consejo Coordinador Empresarial manifestó que en el interior de la república se ha encontrado con un panorama mucho menos tenso o pesimista que ``el que percibo en la capital del país. La situación psicológica de la gente, de los empresarios e incluso de los políticos empieza a ser mejor''.

Apuntó que en el fondo toda la recuperación se basa en la restauración de la confianza, pero lo primero es que todos los mexicanos ``seamos menos pesimistas, pues atravesamos por una crisis general que no sólo es de la autoridad, sino de los ciudadanos''.

Respecto a la mesa del diálogo nacional para la reforma del Estado, Sánchez Navarro comentó que la Secretaría de Gobernación ha revelado que se están dando pasos muy rápidos para empezar la reforma, aunque agregó que las circunstancias políticas anormales --como el caso de Huejotzingo-- han ocasionado un retraso económico.

Respecto a las perspectivas económicas para el presente año indicó que es difícil prever los acontecimientos pues ello sería aventurado e hipotético. No obstante, comentó que 1996 ya no será un año perdido y se espera algún crecimiento.

Al hablar sobre los banqueros, señaló que al igual que todos los mexicanos están fastidiados por la crisis, por lo que deberán emprender acciones para transformar las instituciones crediticias.