La Jornada 3 de abril de 1996

Suspendieron por exceso administrativo a alguaciles implicados

Reuter, Los Angeles, 2 de abril Tres indocumentados mexicanos fueron golpeados el lunes pasado por policías estadunidenses, después de una persecución a alta velocidad por una autopista de California, que comenzó cerca de la frontera entre México y Estados Unidos.

El incidente fue filmado por una cámara de televisión a bordo de un helicóptero de un programa televisado de noticias, cuyas imágenes muestran a un agente asestando por lo menos seis golpes a uno de los ``sospechosos'' con su garrote, aun cuando el detenido ya estaba tendido boca abajo sobre el suelo.

El mismo agente jala luego por el cabello a una mujer que acompañaba al primer detenido y la saca violentamente del vehículo, para luego golpearla también con su macana, mientras llegaban refuerzos para esposar a ambos sujetos.

No parecía que los dos detenidos se resistieran al arresto al primero de los policías que golpeó también a la mujer, según las imágenes proyectadas en la televisión.

La golpiza que propinaron a los detenidos los subalguaciles del condado de Riverside, en California. Fue posterior a la persecución de una antigua camioneta pick-up, que transportaba a por lo menos a 20 personas, entre hombres y mujeres, a lo largo de una autopista en el sur de California.

Durante la persecución, los vehículos policiales registraron velocidades próximas a los 160 kilómetros por hora.

Los dos policías que golpearon a los indocumentados fueron suspendidos del servicio y situados en ``excedencia administrativa'', mientras se realiza una investigación. Las autoridades no dieron a conocer sus nombres.

Un dirigente local de una organización privada de defensa de las libertades ciudadanas, dijo que el atropello policial rememoró la paliza propinada en 1991 al conductor de raza negra Rodney King, por cuatro agentes de raza blanca de la policía en Los Angeles.

Esa golpiza fue filmada por un camarógrafo aficionado y la absolución de dos de los policías provocó, en 1992, sangrientos disturbios en la urbe angelina.

El portavoz del Departamento del Alguacil, Mark Lohman, dijo que se investigará la actuación de los subalguaciles.

Al mencionar la indignación del público por la agresión, filmada por las cámaras del programa de noticias, Lohman dijo a la prensa: ``Nos avergüenza muchísimo y estamos seriamente preocupados por la actuación de nuestros agentes''.

Las emisoras locales de televisión fueron prácticamente inundadas por las llamadas telefónicas de su audiencia, que manifestaba su indignación por las golpizas.

Unos 20 inmigrantes a bordo del vehículo huyeron, después de que la policía hizo que la camioneta se detuviera al bordo de una autopista en El Konte, una zona residencial en las afueras de Los Angeles.

Los indocumentados fueron capturados posteriormente por la policía y oficiales de Inmigración, que los encontraron en un vivero cercano y un barrio residencial aledaño donde habían buscado refugio. Están bajo custodia en una oficina federal de detenciones, en el centro de Los Angeles.