Busca la Semarnap promover la inversión social y privada
Angélica Enciso El gobierno federal dispone de menos de medio peso al año para conservar una hectárea de las Areas Naturales Protegidas (ANP). Actualmente las 89 áreas que se han decretado en el país suman cerca de 10 millones de hectáreas.
Ante ello promoverá que para el manejo y conservación de los recursos naturales se incorporen instituciones locales, el sector privado y comunidades indígenas y campesinas.
La Secretaría de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca (Semarnap) espera obtener este año del Banco Mundial, a través del Global Enviromental Facility (GEF), 80 millones de dólares para la segunda etapa del programa ambiental --este es el financiamiento más importante para medio ambiente del cual dispone-- y 25 millones para las diez ANP más relevantes.
Esas reservas son El Triunfo, en Chiapas; Mariposa Monarca, en Michoacán; Calakmul, en Campeche; Sian Ka'an, en Quintana Roo; Río Lagartos, en Yucatán; Montes Azules, en Chiapas; el Vizcaíno, en Baja California Sur; Islas del Golfo, en Baja California; Sierra de Manantlán, en Jalisco y Colima, e Isla Contoy, en Quintana Roo.
Estas reservas son las únicas que cuentan con programa de manejo, infraestructura y administración para su preservación.
Durante 1995 el gobierno federal destinó 5 millones de nuevos pesos para la atención de las 89 ANP, por lo que las autoridades establecieron en el Programa Nacional de Medio Ambiente 1995-2000 diferentes mecanismos para allegarse recursos que permitan establecer planes de manejo en las reservas.
Las ANP están conformadas por 18 reservas de la biosfera, 13 reservas especiales de la biosfera, 44 parques nacionales, ocho áreas de protección de flora y fauna silvestres, tres parques marinos y tres monumentos naturales.
Por ejemplo, las autoridades estiman que para el manejo de un parque nacional de entre 5 mil y 10 mil hectáreas se requiere de un presupuesto anual cercano a 4 millones de pesos. ``Multiplicando esta cifra por el número total de parques nacionales en México, se obtiene una cantidad que es, por lo menos, una vez y media el presupuesto total anual del Instituto Nacional de Ecología''.
Entre los aspectos que la Semarnap considera para obtener recursos están: aprovechar el potencial turístico de las reservas, concesiones para infraestructura turística, financiamiento del GEF, acuerdos comerciales, donaciones privadas directas con deducibilidad de impuestos, loterías, cuotas de entrada o pago de servicios y aportaciones fiscales de los gobiernos federal y estatales.
Otro de los objetivos del programa ambiental es ampliar la cobertura territorial y la representatividad ecológica del sistema de ANP, sobre todo de los bosques caducifolios y de los ecosistemas costeros y marinos.
La Semarnap reconoce que los ``habitantes locales son los protagonistas en el arranque y en el éxito de este proceso, ellos han de asumir los compromisos de protección y de manejo sustentable, y al mismo tiempo ser beneficiarios directos, potenciales y reales, de una considerable gama de bienes y servicios ambientales que ofrecen las ANP''.
Agrega que para ello los habitantes locales requieren de una definición clara de derechos, así como sistemas de ordenamiento y regulación equitativos y eficientes. También, indica, requieren de certidumbre a largo plazo y apoyo financiero y tecnológico.