La Jornada 8 de abril de 1996

Concamin: persisten ``titubeos'' en la conducción de la economía

Patricia Muñoz Ríos Aún se observan ``titubeos'' del gobierno para tomar decisiones urgentes, por lo que el sector industrial demanda ``mano firme'' y que efectivamente se cumplan las medidas que se anuncian, afirmó el presidente de la Confederación Nacional de Cámaras Industriales (Concamin), Víctor Manuel Díaz Romero.

En entrevista, comentó que si el sector industrial ha demandado que el gobierno ya no ``titubee'' es porque éste anuncia determinadas medidas o apoyos, por ejemplo de restructuración financiera o de inversión en infraestructura, y simplemente no se cumplen.

Después, agregó el industrial, vienen algunos ajustes, cambios, nuevos anuncios que tampoco se concretan; esto desconcierta a la planta productiva y a los inversionistas, quienes ``no hemos variado un ápice nuestros planteamientos y seguimos haciéndolos en un sentido responsable''.

Aclaró que no ven indecisión de parte del presidente de la República, sino ``a otros niveles''; por eso, agregó, se ha demandado el establecimiento de un programa industrial de largo plazo y no de corto, pues el país y la planta productiva en particular ``ya no pueden soportar tantos cambios sexenales''.

Díaz Romero dijo que el sector productivo demanda que se terminen las distorsiones de la economía, pues la política monetaria se maneja en forma errática. ``Creemos en la política monetaria con disciplina, creemos que el gasto corriente debe ser equilibrado; no puede haber un desorden en esto'', comentó.

``No creemos --agregó-- en relajamientos; definitivamente somos muy firmes en este sentido. El orden es para nosotros muy importante; sin embargo, consideramos que se deben buscar instrumentos que logren canalizar recursos de bajo costo y garanticen que la actividad productiva tenga acceso a financiamiento.''

El manejo errático de la política monetaria, advirtió, puede llevar nuevamente al incremento de las tasas de interés, lo que lesiona mucho a la actividad productiva.

Además, no se debe destinar el gasto social al pago de deuda, sino a la recuperación de la actividad productiva y a la generación de empleos, como se pretende.

El sector industrial, indicó Díaz Romero, considera que debe haber un sacrificio fiscal de parte del gobierno para que las personas físicas y morales aumenten su poder de compra y haya un ``desahogo'' para el sector laboral, así como esquemas flexibles para los industriales, con periodos de gracia más amplios para atender las carteras vencidas.

Este conjunto de acciones y más programas específicos basados en una política industrial permitirán el desahogo financiero de los sectores social y privado y creará un clima de mayor confianza para las inversiones, consideró.

``Se necesita demostrar con hechos y acciones bien programadas que México es un país confiable y con una visión de largo plazo; sólo así se logrará que la inversión extranjera acuda al país en mayor cantidad que la que se ha observado'', comentó el presidente de la Concamin.

Indicó que se tienen que tienen que emprender acciones consistentes que ``nos lleven a la solución de gran visión y de desarrollo del país, sin tener gastos extraordinarios por acciones erráticas''.