La Jornada 14 de abril de 1996

Alarma en Oventic por movilización de 400 militares y sobrevuelos

Rosa Rojas, enviada, y Elio Henríquez, corresponsal, Oventic, Chis., 13 de abril La movilización, al filo de las 7 de la mañana, de unos 400 militares que cruzaron por el pueblo para dispersarse en las montañas de los alrededores, así como el constante sobrevuelo de un helicópero, pusieron en estado de alarma a las ``bases de apoyo'' zapatistas, que se instalaron, haciendo guardia, en el Aguascalientes II ``para impedir que lo destruya el Ejército, como hizo con el Aguascalientes de Guadalupe Tepeyac''.

Sobre este incidente, la Comisión Nacional de Intermediación (Conai) informó a la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa) que ``esto no favorece el clima de distensión'' a unos días de que se inicie la próxima etapa programada para el 18 de los corrientes del diálogo de San Andrés entre el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) y el Gobierno federal. La Conai informó en San Cristóbal de las Casas que una comisión se trasladaría, por la tarde, a Oventic para realizar una investigación.Reporteros de diversos medios de comunicación nacionales y extranjeros, avisados de que ``había problemas en Oventic'', arribamos, alrededor de las 10.30 horas, a las orillas del poblado, donde se ubica el Aguascalientes II. Paralelamente, iban llegando, en pequeños grupos provenientes de los alrededores de la montaña, hombres y mujeres indígenas, rigurosamente empaliacatados, y se instalaron en el montecito que está frente a su nuevo centro cultural. Unos 200 se quedaron ahí, simplemente esperando.

Integrantes del Campamento Civil por la Paz, entre ellos David Hartsough, de San Francisco, Estados Unidos, informaron que los soldados, armados y con chalecos antibalas, subieron, acompañados por un hombre con uniforme azul, aparentemente de la Policía Judicial Federal.

Los soldados, indicaron, iban cargados con mochilas, comida y enseres de cocina, aparentemente para instalar otro campamento ya hay cuatro en los alrededores de Oventic, y se habían internado caminando hasta un paraje, a hora y media del pueblo, que los indígenas identificaron como Tzjalchén. La acción fue filmada por los voluntarios internacionales.Mientras los periodistas recabábamos información, el helicóptero azul, matrícula XC-BAT, presuntamente de la policía, sobrevoló el lugar, casi al ras de los árboles del cerrito donde se habían concentrado los indígenas. Dio tres vueltas, aparentemente filmando la escena, y luego se retiró.

Alrededor de las 11 horas, los comandantes Moisés y Rafael, miembros del Comité Clandestino Revolucionario Indígena del EZLN, en improvisada rueda de prensa, afirmaron que la información aparecida hoy en el diario Expreso, que les acababan de entregar, en el sentido de que el Ejército encontró un plantío de mariguana en Oventic, el cual sería destruido hoy, ``es un pretexto para entrar a las comunidades; ellos quieren provocar, hacer guerra contra la población civil, para luego decir que los emboscaron los zapatistas, pero tengan claro, eso no lo vamos a hacer''.

``Queremos desmentir totalmente lo que dicen los soldados federales porque en Oventic y otros poblados donde simpatizan (con) nuestra lucha ese sembrado no se trabaja porque sabemos que perjudica a mucha gente, a la comunidad'', dijo Moises.

Añadió que ``tal vez el gobierno está muy enojado'' porque todavía hace unos días hubo mucha gente reunida aquí y en la selva. Agregó que recibieron información de que también en la selva hay mucho movimiento de tropas, por lo que el gobierno federal ``está violando la ley del diálogo''.

``Los simpatizantes del EZLN tienen prohibido sembrar mariguana o cualquier droga'', reiteró, agregando que ``si dicen los federales que en Oventic hay plantíos de mariguana, son los priístas (los que la siembran), apoyados por los federales, que son los que les llevan la semilla'', y ``por eso, ellos se sienten seguros para traficar y consumir mariguana, por eso la gente priísta, al no saber qué consecuencias trae, aceptan, porque el gobierno ordena para que haya pretexto para entrar en las comunidades''.

``Queremos decir al mundo apuntó Moisés que este movimiento del Ejército federal no es señal de una paz, es la gran señal que el gobierno está provocando. No es cierto que el gobierno tiene voluntad de solucionar en forma pacífica, el gobierno está buscando nuevas formas de romper el diálogo... Es una seña que el gobierno ha decidido hacer guerra''.Interrogado acerca de cómo supieron que son los soldados los que llevan la semilla de mariguana a los priístas, Moisés contestó: ``Eso ni se pregunta, lo sabe todo México, lo sabe todo el mundo que así hacen los soldados federales porque consumen esas drogas, por eso los soldados cuando entran a las comunidades entran muy agresivos''.

A su vez, el comandante Rafael, apuntó que es claro que el movimiento de tropas ``no es sólo por la yerba. Si sólo estuvieran buscando esa yerba, no habría necesidad de movilizarse todos'', y ellos habían recibido información de que existían movimientos de tropas en los campamentos de San Cayetano, en San Andrés, en Holnachó y en la selva, por lo que es claro que lo que se busca es amenazarlos.

Luego de reiterar que, si un zapatista siembra mariguana, será castigado, Rafael afirmó que, si los soldados tratan de entrar en el Aguascalientes II, ``no lo permitiremos, que sepa todo el mundo que no lo permitiremos jamás''.