La Jornada 19 de abril de 1996

Fusilaron a decenas de personas en un hotel cercano a Gizeh

Ap, Reuter, Afp, Ansa y Efe, El Cairo, 18 de abril Presuntos extremistas islámicos mataron hoy a 17 turistas griegos y a un egipcio e hirieron a otras 15 personas, al disparar con fusiles automáticos contra decenas de personas frente a un céntrico hotel cercano a las pirámides de Gizeh en un ataque que, según la policía egipcia, podría haber tenido como objetivo a visitantes israelíes, en represalia por la incursión militar de Israel en Líbano.

La matanza, señaló la policía, se produjo al filo de las siete de la mañana cuando cuatro hombres armados con fusiles kalashnikov, salieron precipitadamente de un minibús y comenzaron a disparar indiscriminadamente contra los turistas, la mayoría de edad avanzada, varios de los cuales intentaron abordar un vehículo en el que se disponían a viajar a Alejandría.

Los atacantes, que lograron huir, entraron al vestíbulo del inmueble, donde siguieron disparando y mataron a uno de los empleados del hotel, mientras exclamaban ``Alí Akbar! (Dios es grande)'' y remataban a varias personas que yacían en el suelo, indicaron testigos.

``Querían matar a todo mundo. Yo estaba detrás de la puerta del hotel y me salvé de milagro'', declaró a una turista griega quien había llegado el martes a Egipto, junto con 150 de sus compatriotas procedentes de Israel.

Poco después de la matanza, la policía cercó el Hotel Europa e intentó capturar a los atacantes. Aunque por el momento ninguna organización se responsabilizó del atentado, la policía egipcia supone que podría haber sido perpetrado por militantes de la Jamaa Islamy (Unión Islámica), una organización extremista que desde 1992 mantiene la lucha armada contra el gobierno del presidente egipcio Hosni Mubarak y a causa de la cual han muerto más de 900 personas, entre ellas 20 turistas.

Sin embargo, funcionarios de las fuerzas de seguridad egipcias consideraron la posibilidad de que la matanza hubiese sido cometida por milicianos palestinos del grupo radical Hamas o pertenecientes al grupo chiíta proiraní Hezbollah.

El atentado fue condenado por varios líderes mundiales, entre ellos el secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Boutros Ghali, quien lo describió como ``una carnicería gratuita'', tras recordar que desde hace tiempo no ocurrían ataques contra turistas en Egipto.

De su lado, el presidente de Grecia, Costas Stephanopoulos, lamentó la muerte de sus compatriotas y advirtió que ``desafortunadamente hay una reactivación del fundamentalismo en Egipto''.