Aprueba las Afores la mayoría prísta

Ismael Romero y Elena Gallegos El nuevo sistema de pensiones que operará en el país a partir del primero de enero de 1997 fue aprobado ayer por una mayoría priísta que quedó sola ante una oposición de derecha (PAN) que rechazó hasta el final que el IMSS constituya una Administradora de Fondos de Retiro (Afore) y de izquierda (PRD y PT) que reclamó mayores garantías y salvaguardas al ahorro de millones de trabajadores mexicanos.

Lejos de las estridencias de diciembre, cuando se aprobó la nueva Ley del Seguro Social, la sesión de este viernes fue maratónica y vivió largas horas de tedio, además de la ausencia de decenas de legisladores. En distintos momentos, los vacíos fueron especialmente notorios en la bancada del PRD.

El debate principal giró en torno a la inclusión de última hora (el jueves pasado) de un artículo octavo transitorio en el que se establece que el Seguro Social podrá constituir una Afore.

Acción Nacional vio en esa inclusion una ``trampa'' al Poder Legislativo y al pueblo de México, porque dicha Afore ``nunca se podrá constituir''. El PRD exigió que el punto se incluyera en un artículo de la ley y no en un transitorio, pues advirtió sobre el mismo riesgo. El PRI, por su parte, dijo que la redacción final del dictamen dejaba a salvo el derecho de la institución a constituir su propia administradora, por lo que se mantuvo intacto el texto.

Según el PRD --así lo expresó Amado Cruz Malpica en la tribuna--, la forma en que había quedado incluida la facultad del IMSS para crear su Afore podía ser fácilmente derrotada en tribunales, por lo que el artículo 8o. transitorio constituía un gran engaño.

Cabe señalar que debido a este asunto, la ausencia del doctor Alejandro Audry (miembro del sindicato del IMSS), ocasionó un buen número de especulaciones. Incluso se esparció la especie de que había negociaciones de última hora. Sin embargo, la mayoría negó que esto ocurriera y se encargó de difundir que Audry estaba en favor de la aprobación.

Para que no quedara duda, Adolfo Flores Rodríguez, también del SNTSS, dijo al pleno que las propuestas de su organización fueron escuchadas y que los trabajadores del IMSS lucharán porque se cumpla lo pactado en el 8o. transitorio. ``En ningún momento --remató-- se está tratando de engañar a nadie''.

Al criticar la postura asumida por el PAN en contra de la Afore-IMSS, el ex panista Mauro González Luna, miembro de la fracción del PRD, dijo que los del blanquiazul exhibían de nuevo sus incongruencias y sus falacias.

``Hoy nos vienen con la batea de babas de que votan en contra de una ley que contiene en lo fundamental todas sus propuestas --arremetió mientras señalaba con índice acusador a los panistas--, porque hay un artículo transitorio que defiende el interés de los trabajadores. Ese es el PAN antipopular de hoy en México!''

Los priístas corearon bravos! a Mauro. Incluso, Sebastián Lerdo de Tejada comentó que cada que el perredista hablaba del PAN, se convertía en su héroe. El ex panista subía el tono con gesto hosco: ``Recuerden lo que le dijo Vasconcelos a Gómez Morín: Ojalá que la misma pureza que buscan en su doctrina la apliquen en su conducta! La han olvidado completamente panistas!''

Aquí la euforia de los priístas no tuvo límite. Aplaudieron a rabiar la intervención de González Luna. En los pasillos, lo detenían para felicitarlo. Pero el legislador también tenía críticas para ellos. Ese fue quizá uno de los pocos episodios que concentró la atención de todos.

De acuerdo con lo aprobado por la Cámara de Diputados, que incluye además reformas y adiciones a la Ley de Instituciones y Sociedades Mutualistas de Seguros, Ley para Regular las Agrupaciones Financieras, Ley de Instituciones de Crédito, Ley del Mercado de Valores y Ley Federal de Protección al Consumidor, los trabajadores mexicanos regidos por el apartado ``A'' del Seguro Social podrán optar por dos sistemas diferentes de pensiones: el vigente y el que quedó regulado por la nueva legislación.

La nueva Ley del Seguro Social sustituirá a partir del próximo año el modelo de reparto (colectivo) por el de cuentas individuales para el retiro de cada trabajador, cuyos recursos serán de su propiedad.

Cada trabajador afiliado al IMSS contará con una cuenta individual, la cual podrá abrir en la Afore de su elección. En ella se depositarán las cuotas obrero-patronal-estatal por concepto de seguro de retiro, cesantía en edad avanzada y vejez, así como los rendimientos que generen. La cuenta se integrará por las subcuentas de retiro, cesantía en edad avanzada y vejez; de vivienda y de aportaciones voluntarias.

Cada Afore operará una Sociedad de Inversión Especializada de Fondos para el Retiro (Siefores), que serán las responsables de la inversión de los recursos de las cuentas individuales de los trabajadores.

Habrá una Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), responsable del nuevo mercado, con una junta de gobierno en la que además de la presencia oficial habrá una representación de dos vocales del sector obrero y uno del sector patronal.

De última hora (y a propuesta del PRI), se hizo una modificación al artículo siete de la ley, para que estos tres vocales sean elegidos de entre las organizaciones nacionales con mayor representatividad. Se da por hecho que se escogerán de la CTM y la CROC y de la Coparmex, respectivamente, aun cuando no se especificó en el texto.

Los tres vocales serán designados por el secretario de Hacienda, en congruencia con los usos y costumbres que prevalecen en la Secretaría del Trabajo para la designación de representantes en órganos, como la Comisión Nacional de Salarios Mínimos.

Las Afores serán consideradas legalmente como ``agentes financieros''. Su capital social estará formado por acciones de la serie ``A'', que representan cuando menos 51 por ciento de dicho capital. El 49 por ciento restante podrá integrarse indistinta o conjuntamente por acciones de las series ``A'' y ``B''.

Las primeras podrán ser adquiridas sólo por personas físicas y morales mexicanas y las segundas serán de libre suscripción (extranjeros).

Ninguna persona moral o física podrá tener el control de más de 10 por ciento de las series. Con base en los acuerdos internacionales, inversionistas de Chile, Canadá y Estados Unidos --países con los que México ha suscrito tratados de libre comercio-- podrán constituir Afores hasta con 100 por ciento del capital.

Con respecto a las Siefores, se estableció que cada Afore deberá constituir por lo menos una que garantice a los trabajadores conservar el valor real de sus ahorros.

La Base de Datos Nacional del SAR, que se mantiene como propiedad exclusiva del gobierno federal, será operada por diversas empresas, por medio de concesiones que se someterán a licitación pública.

En tanto los trabajadores no elijan una Afore, a partir de 1997, sus recursos estarán depositados en una ``cuenta concentradora'' que se abrirá a nombre del Seguro Social, la cual les garantizará un rendimiento anual de 2 por ciento, pagaderos mensualmente mediante su reinversión en las cuentas individuales.

Si en cuatro años (para el primero de enero del 2001) los trabajadores no han elegido una Afore, sus recursos serán destinados a la administradora que en ese momento garantice mejores rendimientos.

Cabe señalar que el entero y recaudación de las aportaciones correspondientes al régimen previsto por la Ley del Insituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, se seguirán rigiendo por lo dispuesto en dicha ley y por el sistema de pensiones vigente para los trabajadores del Estado. Es decir, los que se rigen por el apartado ``B'' del 123 constitucional.

Durante un plazo de cuatro años, contado a partir del primero de enero de 1997, el límite de participación en el mercado de los sistemas de ahorro para el retiro será de 17 por ciento. Posteriormente, previa autorización de la Consar, una Afore podría cubrir hasta 20 por ciento.

Legisladores comentaron que el sistema podría comenzar a operar con la Afore del Seguro Social y cinco más.

El volumen de recursos que se generará por el sistema de ahorro será de 10 por ciento de la nómina salarial nacional, acumulado con interés exponencial, de tal suerte que sobrepasará en 5 años el tamaño actual del sistema financiero. Se ha previsto que en 97, año en que entrarán en operación, las Afores manejarán alrededor de 30 mil millones de pesos y que en un plazo menor a 10 años estarán concentrando recursos equivalentes a 40 por ciento del PIB. De ahí, la gran importancia que tiene el que dicha iniciativa haya sido aprobada en las condiciones en las que se votó.

Al fundamentar el dictamen, el diputado Carlos Aceves del Olmo, del sector obrero priísta, destacó que la iniciativa original, enviada por el Ejecutivo, se modificó en 70 por ciento. Francisco Suárez Dávila, de la misma bancada y presidente de la Comisión de Hacienda, señaló que 90 de 118 artículos fueron cambiados en comisiones.

Alejandro Rojas Díaz-Durán expresó que de plano se hizo una nueva ley que nada tenía que ver con la que les había enviado el Presidente, en lo cual el esfuerzo del sector obrero había sido decisivo.

Saúl Escobar, uno de los responsables del PRD en el trabajo de revisión de la ley en comisiones, manifestó que al hablar de Afores y Siefores se hablaba también del abandono del derecho social del Estado mexicano y de uno de sus principales instrumentos, la seguridad.

``Si hoy aprobamos esta ley y su sistema de Afores y Siefores, en el curso de unos cuantos meses, de dos periodos de sesiones, es decir, en menos de un semestre, habremos o se habrán desmantelado, por la mayoría, 52 años ininterrumpidos del sistema más avanzado en América Latina de seguridad social'', dijo.

La ley, expresó, cierra el círculo de la acelerada contrarreforma del régimen de seguridad social mexicano. Y afirmó que a pesar de los avances, el PRD tenía ``serias objeciones'', las cuales fueron expuestas más tarde en el debate en lo particular.

Escobar se refirió también a los retrocesos en la iniciativa, como la ausencia de un ``bono de reconocimiento'' y límites o topes en el cobro de comisiones que tendrán que pagar los trabajadores por el manejo de sus cuentas.

Eduardo Guzmán, del Partido del Trabajo; Elías Miguel Moreno Brizuela, del PRD; Martha Alvarado Castañón, diputada ciudadana, y Luis Sánchez Aguilar, diputado socialdemócrata, expusieron después diversas deficiencias contenidas en el dictamen de la iniciativa, y llamaron al pleno a votar en contra.

Por el PAN, Jorge Urdapilleta fijó la posición en contra de la ley, y su principal argumento, esgrimido una y otra vez por otros miembros de su fracción, fue el del rechazo a la constitución de la Afore del IMSS.

``No podemos aceptar el engaño al Poder Legislativo y en especial al pueblo de México, al incluirse en el artículo 8o. transitorio la constitución de una Afore del IMSS. No es posible hablar de equidad ni de libre y leal competencia, cuando ese instituto, que manejará información privilegiada como miembro de la Junta de Gobierno de la Consar, podría ser selectivo y discriminatorio'', expuso.

Por si fuera poco, dijo, manejará una cuenta concentradora los primeros cuatro años.

El priísta Suárez Dávila explicó que la ley era la iniciativa económica más trascendente de esta Legislatura y una de las leyes más importantes de la administración del presidente Ernesto Zedillo.

Después de otras intervenciones, el paquete de la iniciativa se debatió en lo particular. El PRD propuso modificaciones a 41 artículos; el PAN, a 10, y el PRI a cuatro. En la votación, sólo las propuestas priístas fueron aceptadas.

En lo general y en lo particular, la iniciativa fue aprobada por 280 votos de los priístas en pro y 100 de panistas, perredistas y petistas, en contra.

En el debate, en el que participaron un total de 57 oradores, el tema principal fue el de la constitución de la Afore-IMSS. Los perredistas Saúl Escobar, Amado Cruz Malpica, Javier González Garza, Ifigenia Martínez y Raúl Livas pidieron que el punto fuera incluido dentro de la ley y no en unos de sus artículos transitorios.

Los panistas Gabriel Llamas Mojardín, Cecilia Romero, José Alberto Pérez Castañeda, Alejandro Díaz y Pérez Duarte y Consuelo Botello, entre otros, criticaron que se hubiera puesto ``parches'' de última hora al dictamen de la iniciativa.

Los priístas Jesús Rodríguez y Rodríguez, Dulce María Sauri, Florentino Castro y Marco Antonio Michel Díaz, defendieron la inclusión de la Afore-IMSS. Sostuvieron que su constitución está asegurada y que el hecho no significa que el Seguro Social se transformará en una administradora.

El Seguro, explicaron, tendrá su Afore, con una estructura propia, que competirá en igualdad de condiciones que las privadas o las que constituyan otras entidades públicas, como se establece en la ley.

Florentino Castro dijo que si no se incluía la Afore del IMSS, muchos de los diputados del PRI no iban a votar en favor de la ley, particularmente los del sector obrero. Luego se fue contra panistas y perredistas por las objeciones puestas.

La sesión terminó a las 8:30 de la noche.