Víctor Flores Olea
La reforma electoral:avance significativo

Por supuesto que es posible pensar en el mayor avance y perfección de las instituciones públicas. Y que desearíamos que se incluyeran opiniones que compartimos con otros ciudadanos. Por mi parte, a diferencia de quienes han dicho que se trata de un nuevo hecho de simulación, en términos generales pienso que los resultados de las pláticas en Gobernación sobre la reforma electoral representan un paso adelante significativo en el proceso de la democracia mexicana.

Pueden entenderse ciertas reservas: el hecho, por ejemplo, de que el documento publicado se llame ``conclusiones'' y no acuerdos o compromisos, es desilusionante para muchos. Se trata de ``conclusiones'' que el Congreso podrá tomar o dejar a voluntad? En buena lógica y espero no pecar de ingenuo esas ``conclusiones'' deberán entenderse como el mínimo común denominador que deberá reflejarse en las reformas a la Constitución y a la ley electoral que se discutirán.

La opinión pública esperaría que los partidos en el Congreso profundicen tales ``conclusiones'' y nos entreguen unas reformas democráticas verdaderamente significativas a estas alturas de la vida mexicana. Unos y otros han hablado de la necesidad imperiosa de transitar hacia la democracia: el intento que ahora se hace público no podría quedarse en otro lamentable aborto. Si los partidos por supuesto también el PRI han de estar a la altura de los tiempos, deben definirse en las cámaras por un cambio que sea convincente: ojalá pudiera calificarse de histórico.Es verdad: hay en el documento opiniones de la Secretaría de Gobernación que parecen restringir en algunos puntos las ``conclusiones'' de los partidos. Hay otros que aún deberán ser ``consultados'' al interior de cada organización política. Debemos entender que esas diferencias, aun cuando sean de matiz, lo son también entre el gobierno y el PRI? Cuál será entonces el criterio que rija en las reformas: el gubernamental o el del partido del gobierno?Sin duda hay un acuerdo genérico del Presidente de la República para efectuar la reforma electoral. En una política tan desalentadora en muchos aspectos, será capaz el gobierno de Zedillo de avanzar en materia electoral como lo requiere el país, aún con tantos lamentables rezagos democráticos? Creo que es oportunidad única y que no debiera echarse por la borda el momentum que se ha construido.Siempre pensé que fue un grave error del PAN ausentarse de la mesa de negociación, con importantes costos políticos para ese partido. Ahora, por supuesto, sus baterías críticas se dirijen a las lagunas que, desde su punto de vista, contienen las ``conclusiones''. Cuál será su actitud en el Congreso? De crítica total ya que no se reflejan algunas de sus posiciones? O luchará como debiera hacerlo para que diversos aspectos de la reforma en ciernes se profundicen y amplíen? El PAN, históricamente, ha sido un partido que también ha exigido mayor democracia en México: ahora deberá demostrarlo en el Congreso empujando por reformas más importantes aún que las contenidas en el documento actual.En texto tan breve es imposible hacer un estudio comparativo, pero en una primera ojeada parece indudable que las ``conclusiones'' reflejan en buena medida los acuerdos del Seminario del Castillo de Chapultepec. Y eso es elocuente. Tales aproximaciones o coincidencias se refieren, entre otros, a los derechos políticos de los mexicanos y a su control institucional, a la independencia de las autoridades electorales, al Tribunal Federal Electoral y a su integración al Poder Judicial de la federación, a ciertas condiciones de equidad entre los partidos respecto a su presencia en los medios de comunicación, a las coaliciones y las candidaturas comunes, acerca de las células de identidad ciudadana y el padrón electoral, a la calificación de las elecciones y a los procesos electorales en conjunto.

No puede dejar de subrayarse la importancia de la afiliación personal a los partidos duro golpe al corporativismo y la aceptación del referéndum y de la consulta popular, cuyos alcances todavía no se precisan. Se echa de menos la figura del plebiscito. Otro cambio significativo: la participación en la elección presidencial de los mexicanos residentes en el extranjero.

Por lo que hace al Distrito Federal, se acordó paso también de gran importancia la elección del gobernador por votación directa y universal. Quedó pendiente la cuestión concerniente a la elección de los delegados, como queda abierta a la discusión parece ser el principal punto de crítica del PAN el de las fuentes y límites del financiamiento a los partidos.Panacea? En estos tiempos no es fácil hablar de logros ``definitivos''. Es difícil siempre, en la negociación política, alcanzar todo lo deseable. Hemos de saludar sin embargo estas ``conclusiones''repetimos: ojalá se amplíen en las cámaras, sin que por ningún motivo se restrinjan como un paso significativo en el proceso de la democracia mexicana. Sin olvidar que sólo es un primer paso, que deberá seguirse por otros desde luego el de la reforma del Estado y por otros más que se refieren a la sustancia de la democracia general, entendida como ``cultura política'' que implica nuevas formas de vivir, de producir y hasta de pensar, y que sólo se irán logrando con el tiempo y la práctica. Y con el esfuerzo organizado de la sociedad mexicana en su conjunto.