La Jornada 25 de abril de 1996

En Paraguay, fuertes rumores de asonada; Wasmosy sale de Asunción

Reuter, Ap, Afp, Dpa, Efe y Xinhua, Asunción, 24 de abril Insistentes versiones sobre un posible golpe de Estado circulaban esta noche en Paraguay, luego de que un juez inició una investigación sobre la rebelión del general Lino Oviedo, quien hoy solicitó su pase a retiro, pero no asumió el ministerio de Defensa, contra lo anunciado ayer por el presidente Juan Carlos Wasmosy, quien a su vez abandonó esta capital para ``meditar y recuperar energías''.

Miles de paraguayos continuaron manifestándose contra el acuerdo pactado el martes entre Wasmosy y el controvertido militar, sin que se registraran incidentes graves, al tiempo que el líder opositor Domingo Laino hizo un llamado a la calma y pidió al general Oviedo que ``desista de ocupar'' la cartera de Defensa. El Congreso condenó el acuerdo Wasmosy-Oviedo, y advirtió que en caso de que el militar rebelde se integre al gabinete, se realizará un juicio político contra el gobernante; al menos tres ministros renunciarán en caso de que Oviedo asuma la cartera de Defensa.


El presidente de Paraguay, Juan Carlso Wasmosy,
observa el saludo del insubordinado general Lino
Oviedo, al centro, el general Oscar Días Delmás,
quien hoy fue invitado como sucesor del militar
en la jefatura de las Fuerzas Armadas de ese país.

Foto: Afp

El detonante de esta crisis fue la negativa del mandatario a retrasar los comicios internos del gobernante Partido Colorado, previstos para el domingo próximo, como lo exigió Oviedo el lunes pasado. Wasmosy dispuso entonces el relevo del polémico general como jefe del Ejército, decisión rechazada por Oviedo, quien se atrincheró en el Primer Cuerpo de Caballería, al este de Asunción.

A primera hora de este miércoles, y como lo confirmó anoche Wasmosy, Oviedo aceptó dejar la jefatura del Ejército, que fue encomendada al general Oscar Díaz Delmás, cercano a Oviedo y quien, según trascendió, apoyó al militar rebelde.

En la ceremonia, a la que asistió el secretario general de la Organización de Estados Americanos, César Gaviria, Oviedo advirtió que la sociedad democrática ``no puede subestimar a los militares''. El polémico jefe castrense afirmó que dejaba el cargo ``con la satisfacción del deber cumplido''.

En el traspaso, efectuado en el cuartel del Primer Cuerpo de Caballería, Wasmosy elogió a Oviedo, a quien abrazó al final del acto. Wasmosy deseó suerte a Díaz Delmás y le recomendó: ``Tenga la misma dedicación que su antecesor''.

Poco después, Oviedo solicitó a Wasmosy su pase a retiro, lo que fue aceptado por el gobernante mediante decreto, con lo que se zanjó el camino para que Oviedo fuera nombrado ministro de Defensa, como lo confirmó anoche el mandatario.

Pero al pasar las horas, el ministro del Interior, Diógenes Martínez, dijo que ``la fecha del nombramiento del general Oviedo como ministro de Defensa no está fijada'', y subrayó que ``el presidente Wasmosy jamás precisó la fecha de este nombramiento, que de todas maneras no tendrá lugar hoy''.

Martínez y el vocero presidencial, Edward Bogado, señalaron por separado que el mandatario abandonó esta capital para ``descansar, reflexionar y recuperar energías''. Trascendió que Wasmosy se dirigió en su avión particular a la localidad de Santa Teresa, unos 500 kilómetros al norte de Asunción, y se instaló en una finca campestre de su propiedad.

Oviedo, combativo

Oviedo, cuyo paradero no fue especificado por las agencias, no hizo declaración alguna sobre el aplazamiento de su investidura como ministro de Defensa, pero sus allegados aseguraron que esta tendrá lugar a las dos de la tarde de este jueves.

El vicepresidente de la Junta de Gobierno del Partido Colorado, Enrique González Quintana, formuló una invitación a la toma de posesión de Oviedo como ministro de Defensa, a la que describió como ``una cita de honor para todo buen colorado''.

Las principales emisoras, Radio Cardinal y „andutí, registraron interferencias en sus transmisiones con la difusión de consignas como ``Oviedo ataca'', ``Oviedo, único líder'', y ``Oviedo, presidente'', lo que evocó una práctica frecuente en la dictadura del general Alfredo Stroessner (1954-1989).

Otro factor que alimentó los temores de un posible golpe de Estado fue una serie de explosiones en las cercanías de una base de la marina de guerra en el barrio de Sajonia, al este de Asunción. Fuentes militares alegaron que sólo se trató de ejercicio de rutina con balas de fogueo. Más tarde se observaron tanques y blindados, pero el Ejército informó oficialmente que eran unidades que retornaban a sus bases tras los festejos, ayer, del Día del Jinete.

Rechazan eventual golpe

Varios jefes castrenses rechazaron la posibilidad de un golpe de Estado, a pesar de las insistentes versiones sobre movilizaciones y de que la Policía Nacional, encargada de la custodia del Parlamento, confirmó que efectivos vestidos de civiles, pero armados, rodearon la sede del Legislativo, cuyas cámaras condenaron el acuerdo Wasmosy-Oviedo.

``Desmiento categóricamente los rumores: quiero que se diga a la población que se mantenga en calma, pues no existe ningún golpe ni existirá mientras yo comande las fuerzas'', dijo el comandante de las fuerzas militares, Silvio Noguera, enlace entre los comandantes de los distintos servicios armados y Wasmosy.

Acompañaban a Noguera el general Díaz Delmás y el general Santiago Zaracho, jefe del Primer Cuerpo de Caballería, donde Oviedo se atrincheró el lunes tras declararse en rebeldía; ambos militares también rechazaron la existencia de preparativos para un golpe de Estado.

Oviedo, en la mira

Los rumores sobre movilizaciones militares y el acuartelamiento de las fuerzas armadas se produjeron luego de que el fiscal Eladio Valiente recomendó que Oviedo sea procesado por el delito de sedición; el juez Alcides Coberta inició una causa judicial para esclarecer quiénes son los ``culpables, los cómplices y los encubridores'' de la rebelión militar que encabezó Oviedo.

La Cámara de Diputados aprobó una resolución en la que exigió el procesamiento de Oviedo y rechazó en forma ``total'' su nombramiento como ministro de Defensa. Advirtió que, de concretarse, no reaccionará ``pasivamente'', y Wasmosy será sometido a un juicio político. El Senado manifestó su ``indignación y reprobación ante la posibilidad'' de que Oviedo sea incluido en el gabinete.

Siguen las protestas

``Wasmosy se la come, Oviedo se la da'', ``Wasmosy, cobarde, el pueblo está que arde'', y ``Wasmosy, Oviedo, los dos al basurero'', fueron algunas de las consignas más coreadas por los varios miles de paraguayos que se manifestaron a lo largo de la jornada contra la solución encontrada por el mandatario a la crisis generada por la insubordinación del militar.

No se reportaron incidentes graves, aunque un grupo de estudiantes del Colegio Nacional de la capital, que no pudo transmitir un mensaje de apoyo a Oviedo en Radio Cardinal, se trasladó a la plaza del Congreso, en donde se ``burló'' de los manifestantes, dijeron testigos. Los manifestantes abuchearon a los oviedistas, a quienes arrojaron piedras; el enfrentamiento culminó cuando los simpatizantes del general se retiraron del lugar. Unos cien estudiantes cerraron el paso en una de las principales carreteras del país, pero no se han reportado enfrentamientos, según emisoras, mientras el Partido Liberal Radical Auténtico y Encuentro Nacional integraron una comisión para coordinar la oposición cívica a la designación de Oviedo como ministro de Defensa