Medida necesaria para satisfacer la demanda y contener presiones alcistas, informa la Secofi

Para hacer frente a la caída en la producción nacional de frijol ocasionada por la sequía, México importará 100 mil toneladas del grano para garantizar el abasto nacional y neutralizar presiones sobre su precio, informó hoy la Secretaría de Comercio y Fomento Industrial (Secofi) en un comunicado, el cual señala que, de ser necesario, también se podrían autorizar otras importaciones a fin de atender cualquier demanda adicional del alimento.

El texto señala que para satisfacer las necesidades del producto, la Secofi solicitó a la Compañía Nacional de Subsistencias Populares, (Conasupo) que incremente sus ventas a los mercados regionales a partir de mayo. Las ventas tendrán un volumen mensual de 35 mil toneladas y estarán disponibles a través de Distribuidora e Impulsora Comercial Conasupo S.A., (Diconsa), a mayoristas y tiendas de autoservicio.

Recordó que la decisión de autorizar importaciones, adoptada también por la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, se publicó el 23 de abril y tiene por objeto hacer frente a la caída en la producción nacional de frijol, propiciada por la sequía en algunas zonas del país.

Diconsa distribuirá 720 mil toneladas de maíz en 1996

Durante los primeros cuatro meses de 1996, Diconsa distribuyó 182 mil toneladas de maíz a la población que vive en zonas rurales marginadas; para este año tiene programado distribuir, en esas mismas comunidades, 720 mil toneladas, con lo cual se garantiza el suministro de este producto básico en la mesa de millones de mexicanos.

En un comunicado, Diconsa señaló que el desplazamiento del grano en los primeros cuatro meses del año implicó una gran movilización de su flota de vehículos, al realizar más de 20 mil viajes con camiones que tienen una capacidad de ocho toneladas cada uno, logrando así llegar a las comunidades más apartadas y de difícil acceso en todo el país.

Este esfuerzo, que articula la operación de la estructura de Diconsa, compuesta por 16 empresas subsidiarias, 334 almacenes de abasto y 21 mil 622 tiendas, permite atender a cerca de 29 millones de personas de escasos recursos económicos, quienes obtienen en el maíz un margen de ahorro superior a 30 por ciento, gracias al subsidio que otorga el gobierno federal a este producto básico.