La Jornada 30 de abril de 1996

Gurría: la banca mexicana no soportaría un blanqueo masivo

David Aponte, Elena Gallegos, Ismael Romero y Jesús Aranda La Agencia Antinarcóticos de Estados Unidos (DEA) debe presentar ``pruebas, nombres y circunstancias'' específicas de sus presuntas evidencias de lavado de dinero en la banca mexicana, para que el gobierno de México pueda actuar en consecuencia. De otra manera, son ``acusaciones al aire'', dijo ayer el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Guillermo Ortiz.

Durante una reunión con legisladores federales, el canciller José Angel Gurría dijo que el sistema financiero no ``podría aguantar'' un blanqueo masivo de dinero. Por eso no tienen sustento las acusaciones y las cifras de la DEA respecto a que hubo ganancias de aproximadamente 7 mil millones de dólares por ese concepto, expuso.

En ese sentido fue la respuesta de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de que no hay un masivo lavado de dinero en las instituciones bancarias mexicanas. Obviamente, en todo el mundo existe esa práctica, y en México se están perfeccionando las leyes para atacar el ilícito, manifestó.

Reunidos en Tlatelolco, los diputados federales y senadores y el jefe de la diplomacia mexicana comentaron que la cooperación bilateral, regional e internacional es la única forma de afrontar el problema del narcotráfico y sus variables como el blanqueo de activos. Asimismo, consideraron que deben terminarse las llamadas certificaciones, porque únicamente crean tensiones entre las naciones.

En breve conversación en la residencia oficial de Los Pinos, al término de la clausura de la 64 Asamblea General del Infonavit, el titular de la SHCP dijo que las autoridades mexicanas quisieran que la DEA ofreciera casos específicos de blanqueo de dinero procedente del narcotráfico en las instituciones bancarias del país, y que los ``sustente''.

``Quisiéramos que fueran más específicos y, en todo caso, si hay pruebas que den nombres, que den circunstancias para poder actuar en consecuencia. Creo que es el interés del gobierno de la República, y de las autoridades financieras (mexicanas), que si hay alguna base a este tipo de acusaciones que se sustenten'', expuso.

Ortiz rechazó mencionar si las autoridades hacendarias de México tienen evidencias de posibles acciones de lavado de dinero en los bancos del país.

De acuerdo con información de la Procuraduría Fiscal de la Federación, los gobiernos de México y Washington realizan por lo menos 14 investigaciones conjuntas en el rubro de blanqueo de dinero en los sistemas financieros de ambos países.

``Nosotros hemos tenido ya desde hace tiempo una relación, yo diría, de trabajo bastante productivo con nuestras contrapartes de Estados Unidos, y hemos cooperado en distintas instancias en materia de lavado de dinero. Esto es, con organismos dependientes del Departamento del Tesoro que se encargan de perseguir este delito. Repito, ha sido fluida y ha sido fructífera, porque ya se han obtenido resultados concretos'', manifestó Ortiz.

--¿Es una acusación irresponsable (de la DEA), señor secretario?

-Como mencioné anteriormente, si esta denuncia tiene una base, pues nos gustaría mucho que la dieran a conocer y que nos dijeran específicamente lo que saben.

Por separado, el presidente de la Confederación Nacional de Cámaras Industriales, Víctor Manuel Díaz Romero, dijo que si la DEA tiene pruebas contra instituciones de crédito mexicanas, ``que las presente formalmente como una acusación'' y no a través de los medios de comunicación.

La semana pasada, el director de la DEA, Thomas Constantine, afirmó que en el sistema financiero mexicano se lavan miles de millones de dólares producto de actividades ilícitas, principalmente del narcotráfico. Las declaraciones fueron avaladas por sus colaboradores en Washington.

Desde el lunes 5 de junio de 1995, La Jornada publicó un extenso reportaje en el que varias agencias del gobierno estadunidense, entre ellas la DEA, afirmaron que los cárteles de la droga habían infiltrado el sistema bancario y que compraron acciones de bancos para obtener puestos en los consejos de administración.

Por otra parte, el secretario de Marina, José Ramón Lorenzo Franco, afirmó que la colaboración entre las diferentes dependencias encargadas de atacar el narcotráfico ha permitido un mayor número de decomisos de droga en comparación del año pasado.

Señaló que se ha intensificado el respaldo entre la Armada de México y su contraparte estadunidense, para capacitar a oficiales mexicanos en la lucha contra el tráfico de estupefacientes y acciones en el mar. Comentó que actualmente hay 12 marinos mexicanos que siguen cursos de Inteligencia e inspección en diferentes instituciones castrenses de Estados Unidos.

El almirante fue entrevistado al término de la ceremonia en la que impuso la condecoración Distinción Naval Segunda Clase al capitán Eldon Stephen Wilson, agregado naval de Estados Unidos en México, quien terminó su misión diplomática aquí. Añadió que desde hace tiempo se trabaja con el vecino país en el intercambio de información. ``Personal que trabaja en la embajada (estadunidense) nos da información, la comprobamos y actuamos, y a veces nosotros también damos la información''.

Indicó que la Armada no tiene considerado, por el momento, la adquisición de armamento. ``Estamos a la espera de ver cuáles son las necesidades. Estamos sacándole el máximo provecho al material que tenemos; todavía no determinamos qué es lo que podemos necesitar, todavía no hablamos de ningún apoyo (con Estados Unidos)''.

Respecto a la coordinación alcanzada entre las dependencias que actúan en contra del tráfico de estupefacientes, Lorenzo Franco sostuvo que esta lucha es más efectiva cuando existe coordinación, como se ha demostrado en los últimos meses.