La Jornada 6 de mayo de 1996

Otro accidente a indocumentados en California; cuatro heridos

Por lo menos cuatro migrantes mexicanos resultaron severamente lesionados ayer por la mañana en la autopista número 15 (al norte de San Diego), al volcarse la camioneta pick-up en la que viajaban cerca de Lake Elsinore, condado de Riverside.

Este es el tercer percance relacionado con el tráfico de indocumentados que ocurre en esa zona en menos de un mes.

El vocero de la Patrulla Fronteriza en el condado, Jim Pinkington, informó que agentes de esa corporación recibieron a diez personas que también viajaban en el vehículo accidentado y que habían sido detenidas por la Patrulla de Caminos en Temecula y los trasladaron al centro de retención del Servicio de Inmigración y Naturalización (SIN) en El Centro, unos 200 kilómetros al este de San Diego, para interrogarlos.

Según testigos entrevistados por una televisora local, por lo menos otras ocho personas involucradas en el percance huyeron antes de que llegara la policía. A los heridos se les trasladó a hospitales de la zona y se puso en marcha una operación especial para localizar a los prófugos.Aunque no se precisaron las condiciones del accidente, se dijo que ningún auto oficial de la Patrulla de Caminos ni de la Border Patrol perseguía al vehículo en el que viajaban no menos de 22 personas y que, luego de volcar, quedó volteado a un lado del camino.

El primer accidente de este tipo en lo que va del año ocurrió el 6 de abril cerca de Temecula, donde ocho indocumentados murieron y 18 resultaron lesionados. El conductor del vehículo, Fernado Covarrubias Varela, de 19 años, fue acusado la semana pasada de contrabando en un tribunal de Los Angeles.

Hace apenas una semana, en Alpine, otro vehículo perseguido por una unidad de la Patrulla Fronteriza se salió del camino luego de chocar con el automóvil de los agentes. Dos mexicanos murieron y cuatro continúan hospitalizados; uno está conectado a un aparato para mantenerlo vivo.

Protestas en el puenteinternacional de Juárez

La Coalición de Derechos Fronterizos realizó ayer por la mañana plantones en el puente internacional Santa Fe, en la zona fronteriza de Ciudad Juárez, Chihuahua, para protestar por la política migratoria de Estados Unidos.

Integrantes de la Coalición manifestaron su ``rechazo a la construcción de Muros de Berlín en la frontera entre México y Estados Unidos, así como la militarización de la zona, lo que representa más un acto de guerra que de buena amistad''.

La movilización empezó con dos marchas, una procedente de El Paso, Texas, y otra de Ciudad Juárez, que se encontraron a la mitad del puente.

Los organizadores censuraron la construcción de bardas y la contratación de miles de agentes de la Patrulla Fronteriza para reprimir a los mexicanos. Indicaron que son actos de ``mala vecindad'' que demuestran un espíritu ``racista y xenófobo'' de un sector importante del gobierno estadunidense.

Subrayaron que en las garitas de entrada a Estados Unidos elementos de la Guardia Nacional participan en las revisiones a personas que intentan cruzar, incluso legalmente, la frontera.

En la protesta participaron miembros del Comité Pro Defensa de Derechos Humanos de Chihuahua (Cich), la Red del Suroeste, que aglutina a 70 organizaciones fronterizas no gubernamentales, así como la Alianza Internacional Ecologista del Bravo, el Centro de Investigación y Solidaridad Obrera y el Destacamento del Pueblo, entre otros.

Por otra parte, en Mexicali, Baja California, la diputada federal Martina Montenegro calificó de ``reunión entre sordos'' la interpalamentaria México-Estados Unidos, efectuada este fin de semana en Zacatecas.

Montenegro consideró que, ante los ``tibios'' resultados, será necesario un intenso cabildeo de los legisladores mexicanos entre congresistas estadunidenses y grupos latinos defensores de los derechos humanos para contrarestar el clima racista y antimexicano que se vive en el vecino país.

Redadas en centros de trabajo

El Servicio de Inmigración y Naturalización realiza redadas en centros de trabajo de Dallas, Texas, y en su zona conurbada, en busca de indocumentados de ascendencia mexicana, en un afán de dar empleo a estadunidenses desocupados, informó el cónsul general de México en esa ciudad, Ramón Xilótl Ramírez.

El diplomático explicó que estas acciones forman parte de la Operación trabajo, pero se intensifican en temporadas electorales, en perjuicio de los inmigrantes mexicanos legales o ilegales, quienes enfrentan discriminación y malos tratos.

Xilótl Ramírez detelló que personal del SIN llega a los centros laborales e identifica a trabajadores indocumentados para deportarlos, pero inmediatamente ofrecen al patrón la posibilidad de contratar a estadunidenses que están en listas de desempleados.

En Dallas y su área metropolitana residen cuatro millones de habitantes, de los cuales 750 mil son inmigrantes legales mexicanos, además de un número no determinado de indocumentados.

Más de 70 mil quejas al año poragresiones a mexicanos en EUCada año más de 70 mil mexicanos solicitan apoyo consular en las 40 representaciones del gobierno de México en Estados Unidos, principalmente en los consulados de Los Angeles y San Diego, California.Además, las delegaciones estatales de la Secretaría de Relaciones Exteriores en los estados fronterizos también atienden quejas de connacionales radicados en el extranjero por abusos de las autoridades de ese país.

Según estimaciones de la propia cancillería, el número de mexicanos víctimas de violaciones de sus derechos humanos o laborales es superior, pues la mayoría de los casos no se reporta oficialmente.

(Jorge Alberto Cornejo, Rubén Villalpando, Carlos Figueroa y Antonio Heras, corresponsales)