La Jornada 9 de mayo de 1996

Política industrial concertada: Zedillo

Ricardo Alemán Alemán, enviado, Aguascalientes, Ags., 8 de mayo Luego de que el presidente Ernesto Zedillo presentara el Programa de Política Industrial y Comercio Exterior, los dirigentes empresariales se dijeron ``satisfechos'' pero demandaron ``acelerar la política de desregulación; una reforma fiscal no sólo recaudatoria, sino promotora del empleo; reducir más el gasto corriente y bajar las tasas impositivas'', además de condiciones de igualdad, equidad y abandonar ``el monopolio de las decisiones''.

Y la respuesta del primer mandatario fue la promesa de lograr la recuperación económica ``a condición de mantener el rumbo y perseverar en el esfuerzo'', asegurar condiciones justas para los productores del país e impulsar una política industrial ``concertada, activa, integral, de largo plazo y con mecanismos precisos de evaluación y seguimiento'', en la que se escuchará siempre a los empresarios. ``Estamos decididos a alcanzar una recuperación que no se limite al mero control de la crisis sino que resuelva, de una vez por todas, las causas que la provocaron'', dijo el Presidente.

Durante el mismo acto, el Ejecutivo federal anunció la creación de una Comisión Intersecretarial de Política Industrial, que dará seguimiento a las actividades del ramo en las secretarías de Comercio y Fomento Industrial; Hacienda y Crédito Público; Contraloría y Desarrollo Administrativo; Trabajo y Previsión Social, y Educación Pública, en la que participarán los directores de Nacional Financiera, Banco de Comercio Exterior y del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología.

A su vez, los dirigentes empresariales, Héctor Larios Santillán, del Consejo Coordinador Empresarial (CCE); Víctor Manuel Díaz Romero, de la Confederación Nacional de Cámaras Industriales (Concamin); Carlos Gutiérrez Díaz, de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra), y Armando Garza Sada, de la Cámara de la Industria de Transformación (Caintra) de Nuevo León, se comprometieron a ``crear un ambiente de confianza y de optimismo razonado, a unir esfuerzos con el gobierno, ser interlocutores firmes y claros, y hacer propio el nuevo programa''.

El Programa de Política Industrial y Comercio Exterior se presentó durante una gira de trabajo de Ernesto Zedillo por Aguascalientes, en la que lo mismo inauguró fábricas que laboratorios universitarios, entregó cheques para trabajadores del campo y hasta se dio tiempo para encontrar el amuleto contra el chupacabras.

Cuando el Presidente realizaba un recorrido por las instalaciones de la muestra agroindustrial, un expositor le obsequió una trenza de ajos macho. Zedillo preguntó: ``¿Y esto para qué?''.

Cuando el expositor hablaba sobre las bondades de los ajos macho, el mandatario interrumpió y con la trenza de ajos en la mano soltó entre risas: ``No, esto más bien sirve para ahuyentar al chupacabras''. Y como si fuera una receta, de inmediato se produjo una compra masiva de trenzas de ajos macho. Un bromista sólo dijo: ``Se va a disparar el mercado del ajo''.

El acto central de la gira presidencial fue el anuncio del programa industrial, que estuvo a cargo de Herminio Blanco Mendoza, secretario de Comercio, quien hizo una detallada explicación de un programa que con antelación se ha difundido profusamente. La reunión se llevó a cabo en la Planta de Teñidos San Juan, de esta capital.

Allí, Ernesto Zedillo dijo que los mexicanos ``estamos decididos a alcanzar una recuperación que no se limite al mero control de la crisis, sino que resuelva de una buena vez las causas que la provocaron y que, al mismo tiempo, siente bases sólidas para el crecimiento económico que el país necesita''.

Explicó que los indicadores de la producción, el empleo y los mercados financieros ``demuestran el inicio de la recuperación y que la lograremos a plenitud, a condición de mantener el rumbo y perseverar en el esfuerzo''. Luego adelantó que el INEGI dará a conocer los indicadores relativos a la actividad industrial, ``que muestran que en el mes de febrero, la producción de la industria manufacturera creció 5.4 por ciento respecto del nivel observado un año antes. Este es un indicador más que nos prueba que estamos ya iniciando la recuperación económica y que podremos estar muy pronto en el crecimiento anhelado''.

La estrategia económica, dijo Zedillo, se centrará en incrementar los factores de la producción y en elevar la productividad de esos factores; hacer del ahorro interno la base fundamental del financiamiento; observar una estricta disciplina fiscal y una política monetaria que contribuya a la estabilidad de precios, y la procuración de condiciones que propicien la estabilidad y la certidumbre para la actividad económica.

La estrategia económica, insistió el Presidente, ``no puede constreñirse al corto plazo, debe mirar hacia el porvenir y anticiparlo, fincando bases sólidas para poder encauzar el futuro''.

El programa industrial, añadió, comprende una política concertada, activa, integral, de largo plazo y con mecanismos precisos de evaluación y seguimiento. ``Será concertada, porque parte de reconocer que sólo mediante la conjunción de esfuerzos entre los trabajadores y los empresarios y todos los órganos del gobierno, reiniciaremos el crecimiento económico''.

Será activa, porque el esfuerzo de los sectores deberá coordinarse y complementarse con la acción promotora del Estado. ``El gobierno federal asume cabalmente su responsabilidad en la promoción de la competitividad empresarial, propiciando condiciones favorables para el desarrollo industrial y apoyando la capacidad competitiva de las empresas''.

Será integral, ya que articulará las políticas financieras, tributarias, de comercio exterior, cambiaria, de desregulación, de actualización tecnológica, de capacitación y de expansión de nuestra infraestructura, a fin de que su adecuada conjugación fomente el desarrollo de la industria del país.

Y será de largo plazo, porque formula líneas de acción y medidas específicas, susceptibles de ser aplicadas, de conformidad con los centros de inversión de la economía moderna. ``Además, el programa privilegia la consulta, con los métodos de trabajo y la participación activa de los empresarios en las tareas de apoyo y fomento industrial''.

Previamente hablaron los dirigentes empresariales, quienes señalaron que el Programa de Política Industrial y Comercio Exterior incluye las propuestas que los organismos de la iniciativa privada demandaron en los últimos meses.

``Lo que falta ahora es fijar prioridades y plazos y ponerlo en práctica con programas concretos sector por sector'', señaló el presidente del CCE, Héctor Larios Santillán.

Una vez más, el sector empresarial solicitó al gobierno reducir el gasto corriente gubernamental y ``quizá menores impuestos'' para aumentar el ahorro y la inversión.

Larios pidió fomentar una política de desregulación, ``porque el exceso de requisitos y trámites está pesando fuertemente sobre los costos de las empresas, sobre todo medianas y pequeñas, muchas de las cuales están inclusive en peligro de desaparecer''.

El dirigente empresarial calificó el programa como ``un excelente esfuerzo de concertación'' y aseguró que ``estamos ya en un principio de recuperación''. Sostuvo que el proyecto referido cubre el actual sexenio, pero se tendrán que encontrar procedimientos prácticos para que su vigencia se extienda en los años por venir. ``Lo ideal sería que contemplara un horizonte de estrategia de diez años o más, muy acorde con la prospectiva tecnológica''.

El sector empresarial, dijo, pondrá énfasis en crear un ambiente de confianza y de optimismo razonado indispensable para que se produzcan las inversiones en proyectos productivos.

Más optimista, el presidente de la Concamin, Víctor Manuel Díaz Romero, dijo que el anuncio de este programa es una ``acertada respuesta que dará confianza, estabilidad y seguridad''.

El dirigente reclamó que el programa garantice que la estabilidad sea permanente... porque ``ya es tiempo de que los esfuerzos extraordinarios y dolorosos produzcan frutos que respondan a las expectativas de todos los mexicanos. La cultura de la cooperación que estamos construyendo, debe dar paso a una nueva relación entre industriales y gobierno. Los industriales vemos el programa hoy presentado, como la oportunidad de definir el rumbo que queremos seguir para lograr que esta política genere una dinámica de reactivación económica y desarrollo en el corto, mediano y largo plazos'', expresó.

Para el presidente de la Canacintra, Carlos Gutiérrez, el Programa de Política Industrial y Comercio Exterior, da respuesta a las inquietudes y demandas de los industriales y ``abre la puerta para un crecimiento sostenido''.

De esta manera, dijo, se moderniza la presencia de los organismos empresariales en los nuevos ámbitos que demandan nuestra participación. ``Ya no es posible reducirlas a la consulta; los industriales hemos reclamado que jugaremos, como agentes industriales, un activo papel en su instrumentación, seguimiento y evaluación''.

En su intervención, Armando Garza Sada, presidente de la Caintra, condicionó que si la aplicación del programa se traduce en un crecimiento rápido y sostenido de la inversión total, éste habrá tenido éxito. ``Su alcance lo mediremos en términos de tasa de crecimiento económico, inversión total, crecimiento de las exportaciones, tasas de interés reales, paridad cambiaria competitiva y empleo'', concluyó.