La Jornada 13 de mayo de 1996

Organizaciones civiles de ocho países piden en carta a Zedillo la liberación de los presuntos zapatistas

José Gil Olmos Organizaciones políticas, sociales, laborales, artísticas y de derechos humanos de Canadá, Italia, Francia, Estados Unidos, Alemania, Argentina, Australia y Holanda, pidieron al gobierno mexicano la liberación inmediata de Javier Elorriaga Berdegué y Sebastián Entzin Gómez, sentenciados a 13 y seis años de cárcel respectivamente; al mismo tiempo advirtieron que eso es un ataque al proceso de paz en Chiapas y el posible reinicio de enfrentamientos entre el EZLN y el Ejército Mexicano.

En una carta enviada por fax al presidente Ernesto Zedillo, con copia al secretario de Gobernación, Emilio Chuayffet y al gobernador de Chiapas, Julio César Ruiz Ferro, el grupo de solidaridad de Frankfurt, Alemania, manifiesta su preocupación por ``la amenaza de guerra, dada la descalificación implícita al considerar a los presuntos miembros del EZLN como terroristas y transgresores de la ley''. Los simpatizantes alemanes del EZLN señalan que con la sentencia ``queda de manifiesto una vez más el verticalismo de las decisiones trascendentales de México al burlarse de las comisiones encargadas del diálogo''. Los alemanes, que forman parte del consejo de redacción de la revista Links, rechazan las explicaciones de ``independencia jurídica'' que han vertido la Secretaría de Gobernación y la Procuraduría General de la República y aseguran que ``son una burla más de un poder corrupto que resuelve sus problemas desde el oscurantismo, la violencia y la imposición''.

Pidieron a Zedillo que ``en nombre de la transparencia política, la democracia y la justicia'' liberen de inmediato a los dos presuntos zapatistas.

También 54 agrupaciones de Italia enviaron por correo electrónico de Internet una carta donde cuestionan la sentencia sin que se haya presentado ``el fanstasma'' Salvador Morales Garibay a ratificar la única declaración que existe contra Elorriaga y Entzin. ``Esto significaría legalmente la libertad condicional de los compañeros''.

Comités de solidaridad de varias ciudades de ese país y diversas organizaciones señalaron que el juicio en contra de los presuntos zapatistas ``deja muchas dudas en la impartición de justicia en México''. Además, recuerdan que en su reciente visita a Roma y en su entrevista con el Papa Juan Pablo II, al presidente Zedillo se le recomendó respetar los derechos humanos en México, pero ``en la práctica sucede lo contrario''.

Pidieron que el gobierno mexicano realice un procedimiento jurídico legal que dé la posibilidad a Elorriaga y Entzin de confrontarse con Morales Garibay, quien al parecer dijeron está protegido por el gobierno y se encuentra oculto desde hace más de un año.

Asimismo informaron que el comunicado Señales de guerra en Chiapas fue enviado a toda la prensa italiana y algunos medios lo han difundido íntegro.

En otro texto titulado No a la guerra, señalan que además de la sentencia a Elorriaga y Entzin, es preocupante el aumento de la violencia en Chiapas.

``La impunidad con la que operan las guardias blancas del autodenominado grupo Los Chinchulines, la actitud retadora de la delegación gubernamental en el diálogo de San Andrés, las amenazas en el comunicado de la Secretaría de Gobernación del 6 de mayo, los múltiples focos de violencia de origen agrario, religioso y político y la falta de una respuesta adecuada por parte de las autoridades locales y federales, deja entrever la posibilidad de una reactivación del conflicto militar entre el EZLN y el Ejército Mexicano'', advierte la Coordinación Italiana de Comités de Apoyo a la Lucha Zapatista.

La carta también la firman Lucio Manisco, director del periódico Liberazione; Giovanni Russo Spena, senador del Partido de la Refundación Comunista; Angela Bellei, ex diputada del mismo partido; Emili Molinari, ex senador de los Verdes Ecologistas; Massimo Gorla, ex diputado de la Asociación por la Paz; Dario Pacino, escritor y ensayista, y 30 firmas más de concejales provinciales y de zona, así como periodistas.

En Madrid, España, la Red de Apoyo Zapatista anunció que se prepara una reunión amplia para levantar firmas en favor de la libertad de Elorriaga y Entzin, así como el encuentro europeo contra el neoliberalismo a efectuarse en Berlín, que es previo al Intercontinental en Chiapas en julio y agosto.

Por su parte, miembros del Partido Socialista de los Trabajadores de Holanda en otra carta enviada al presidente Zedillo afirman: ``Nosotros, aunque somos de Holanda, somos zapatistas también. Queremos justicia, libertad, democracia y una paz digna por México. No somos terroristas, pedimos los mismos derechos por los mexicanos que existen en Holanda: elecciones no corruptas, respecto a los derechos humanos, tierra, techo, salud, educación y justicia''.

Para el Partido Socialista holandés la sentencia ``desestabiliza'' el proceso de diálogo entre el gobierno y el EZLN: ``Si el gobierno mexicano cree que con un golpe de mano se puede deshacer del EZLN y de las profundas causas que le dieron origen, está equivocado''.

También han enviado cartas las organizaciones estadunidenses Global Exchange, The Development Gap, otras mexicanas, que han juntado más de 260 firmas de apoyo a la liberación de los presuntos zapatistas. Mientras que en Melbourne, Australia, el Comité de Solidaridad con México anunció movilizaciones de los comités de solidaridad.