Usará México contra el narco equipo ruso y estadunidense

Los 4 años próximos, cruciales para controlar a los cárteles o México ``se convertiría en una Colombia'', Constantine El espionaje telefónico parte de la estrategia, se indica en el Congreso Los 73 helicópteros Huey que donará EU se usarán ``principalmente, pero no exclusivamente'' en la lucha antidrogas, dice un representante del Pentágono

Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 16 de mayo El administrador de la DEA, Thomas Constantine, advirtió hoy que los próximos tres o cuatro años serán críticos para determinar si México podrá controlar el creciente poder de los cárteles del narcotráfico o si éstos triunfarán al convertir al país en una Colombia.

``Serán unos años críticos para empezar a manejar esto'', declaró Constantine durante una audiencia del Comité de Apropiaciones del Senado. ``Como creo que hemos visto en Colombia, si (los cárteles) se dejan sin control durante un periodo sustantivo, tienen la habilidad de ejercer influencia sobre gobiernos completos''. Al agudizarse las críticas a la política antinarcóticos del gobierno de Bill Clinton por parte de los republicanos, representantes del Ejecutivo se han presentado a una serie de audiencias esta semana para explicar las estrategias para combatir el ``creciente'' poder de los cárteles mexicanos. Constantine y otros altos funcionarios han destacado la ampliación del uso de mecanismos de inteligencia y detección como la intervención de comunicación telefónica, esfuerzos para reforzar el control en la región suroeste de la frontera estadunidense y la profundización de la cooperación con México mediante iniciativas como la donación de unos 73 helicópteros más para las operaciones antinarcóticos del vecino país.

En todo esto, enfatizó hoy el secretario de Estado, Warren Christopher, la clave ha sido la relación bilateral con México. ``Estamos logrando una cooperación con la cual nunca habíamos contado antes'', dijo Christopher. Como ejemplos de lo anterior, citó la reciente extradición de dos mexicanos a este país, la cercana cooperación con el procurador general Antonio Lozano Gracia y las operaciones para detectar y detener narcotraficantes en México.

Constantine, junto con el jefe del FBI, Louis Freeh, y el zar antidrogas, Barry McCaffrey, hicieron eco a los comentarios de Christopher alabando el compromiso del presidente Ernesto Zedillo en el combate contra la droga.

Alentado por los congresistas para que detallara las estrategias que Estados Unidos aplica para la lucha antinarcóticos en México, Constantine dijo que el objetivo principal son los cárteles mexicanos. ``La estrategia está anclada por un uso extensivo del Título III (intervención de comunicaciones por teléfono) para identificar, investigar y procesar a miembros de los cárteles de la droga mexicanos'', explicó hoy Constantine. ``Tenemos planes para incrementar nuestra efectividad en la identificación y desmantelamiento de las organizaciones traficantes que operan dentro de México y Estados Unidos, como lo (hicimos) en Colombia, al atinar contra sus operaciones de comando, control y comunicaciones'', añadió el jefe de la DEA.

Constantine señaló que sólo la semana pasada Estados Unidos arrestó a más de 136 sospechosos y cofiscó más de 12 mil libras de cocaína, como resultado de una extensa operación denominada Zorro II, la cual involucró el uso de más de 80 líneas intervenidas para monitorear el transporte de envíos desde Colombia a México y finalmente a Estados Unidos.

En el pasado, la DEA ha intervenido líneas en México para detectar narcotraficantes, pero esta tarde un vocero de esa agencia no pudo confirmar o negar si actualmente interviene líneas en México.

La frontera, el segundo componente

Otra vertiente de la estrategia antidrogas presentada esta semana por la administración Clinton en foros públicos es el esfuerzo para detener el ingreso de narcóticos en la frontera. ``Tenemos que movernos para bloquear la frontera mexicana'', afirmó McCaffrey hace unos días en una audiencia legislativa, al anunciar un incremento presupuestal de 24 por ciento para las operaciones antinarcóticos en la frontera. McCaffrey reiteró que las tareas ya previstas para este fin incluyen incrementar el tamaño de la Patrulla Fronteriza en los próximos cinco años y ampliar la presencia del FBI en esa zona. El general retirado viajará a San Diego para inspeccionar la zona fronteriza. Al mismo tiempo, una vocera del grupo de trabajo del Departamento de Justicia encargado de los asuntos fronterizos desmintió versiones sobre un presunto incremento del personal militar estadunidense en la región más allá de los niveles actuales de 200 a 300 soldados que realizan operaciones de apoyo a la lucha contra la droga. Este jueves, en audiencias legislativas, tanto el FBI como la DEA solicitaron formalmente fondos adicionales para ampliar sus operaciones fronterizas. El director del FBI dijo que su agencia actualmente tiene 198 agentes asignados a la frontera del suroeste y pidió más fondos para colocar otros 50 en esa región. La DEA también busca ampliar su presencia en esa zona y hoy Constantine pidió 25 millones de dólares más para colocar a otros 54 agentes y su personal de apoyo en la frontera.

La cooperación militar entre México y EU, más fuerte que nunca

Funcionarios de la administración Clinton están particularmente satisfechos por la cooperación entre los militares de ambos países en torno al tema del narcotráfico. En una sesión informativa a puerta cerrada entre funcionarios del Pentágono y otras partes de la administración y asesores legislativos, celebrada esta semana, Brian Sheridan, funcionario del Pentágono, dijo que la relación entre los militares estadunidenses y mexicanos es más fuerte que nunca. Según fuentes que participaron en la sesión, Sheridan destacó que después de años de mantener una relación distante, actualmente el Pentágono confía en que los militares mexicanos están preparados para ampliar sus relaciones con Estados Unidos.

Como parte de este esfuerzo, el Pentágono ha acordado donar 73 helicópteros UH-1H Huey a la Fuerza Aérea Mexicana para usarlos principalmente en actividades antidrogas. En esta sesión informativa, el Pentágono reafirmó que los primeros 20 helicópteros se enviarán próximamente, e informó que también habían acordado ofrecer refacciones durante dos años y entrenamiento de pilotos y equipo de mantenimiento entre junio de este año y finales del próximo.

El acuerdo para trasladar los 73 helicópteros a la Fuerza Aérea Mexicana, adicionales a los 30 helicópteros Huey arrendados a la PGR, es resultado de intensas negociaciones entre ambos países sobre las condiciones de la donación. En esta reunión a puerta cerrada, funcionarios del Pentágono y del Departamento de Estado confirmaron que los helicópteros se usarán principalmente, pero no exclusivamente, en operaciones antinarcóticos.

Asesores congresionales que expresaron sus preocupaciones por que el equipo pueda usarse para cometer abusos contra la población presionaron a los representantes del Pentágono y del Departamento de Estado a que explicaran las garantías que había sobre el uso del equipo, indicaron fuentes que estuvieron en ese encuentro. Según explicó el Departamento de Estado, México tendrá que presentar cada dos meses un informe sobre los helicópteros y especificar su ubicación en territorio nacional.

Ademas, un llamado ``asesor de aviación'' de la Embajada de Estados Unidos en México viajará de vez en cuando por el país para inspeccionar el equipo, pero se le ha asegurado al gobierno mexicano que estas visitas nunca se realizarán sin previo aviso.Funcionarios estadunidenses informaron que la fuerzas armadas mexicanas han acordado ampliar su participación en esfuerzos antinarcóticos, y como evidencia mencionaron que la semana pasada 18 helicópteros Bell 206 fueron trasladados de la flota controlada por la PGR a la Fuerza Aérea. Además, circulan informes de que la Marina mexicana ha contratado la adquisición de 12 helicópteros MI-8 hechos en Rusia.Aunque los funcionarios estadunidenses ofrecieron en la sesión pocos detalles para explicar por qué ha mejorado tanto el nivel de cooperación bilateral para combatir el narcotráfico, un funcionario del Pentágono dijo que existe una nueva percepción sobre la voluntad del otro lado. ``Estos tipos son diferentes, en verdad van en serio sobre esto y les creemos'', dijo a los asesores legislativos.