Miles de trabajadores de Tucumán protestan en Buenos Aires por medidas del gobernador Bussi, ex jerarca de la dictadura militar

Stella Calloni, corresponsal, Buenos Aires, 17 de mayo Miles de trabajadores ocuparon hoy esta capital durante horas, tras una marcha comenzada desde el interior de Tucumán, provincia del castigado noroeste argentino, en protesta por despidos masivos de empleados estatales, el pago en bonos y cheques diferidos, la disminución de los salarios y la situación general.

Estas medidas fueron dispuestas por el gobernador Domingo Antonio Bussi, ex jerarca de la última dictadura militar y elegido para ese cargo por sus promesas de resistir los ajustes.

Bussi ordenó cortar las naranjas de todos los árboles de Tucumán, para evitar que fueran utilizadas como proyectiles por los manifestantes.

Más de un millar de policías fueron movilizados y en un intento por detener la marcha se arrojaron panfletos desde helicópteros anunciando el pago de los sueldos atrasados.

La desocupación en esa provincia ronda casi el 60 por ciento y la pobreza abarca el 80 por ciento de la población.

En tanto, un informe del Instituto Nacional de Estadísticas y Censo (Indec) reveló que en Buenos Aires y su provincia, 3 millones de personas viven en la pobreza y otras 470 mil en la indigencia.

El Indec señaló que entre el censo de 1994 y el de 1995 un total de 810 mil personas se sumaron a la población incapaz de cubrir sus necesidades mínimas.

Los técnicos calculan que 540 hogares no perciben los 550 pesos (igual cantidad en dólares) en que calculan el costo de la canasta básica de productos y servicios indispensables.

El informe considera que las proporciones de pobreza en el resto del país son similares o incluso mayores que las registradas en Buenos Aires y sus alrededores.

Estas cifras se publican días después que funcionarios oficialistas y el presidente Carlos Menem fustigaron a medios que transmitieron imágenes de los barrios marginales de Rosario, donde mostraron a sus habitantes asando a un gato para comer.

Menem aseguró que periodistas habían pagado a esas personas para montar ``un show'' y los acusó de ``vendepatrias''.

En tanto, continúa la polémica por la no aclarada venta de armas a Ecuador y Croacia, en una triangulación que el gobierno dice desconocer a pesar de la documentación que se ha publicado sobre el tema.

Un sondeo reveló hoy que el 75 por ciento de los argentinos consultados cree que el titular del Ministerio de Defensa, Oscar Camilión, debe renunciar por su participación en el ilícito.

Por otra parte Menem dijo al intendente justicialista de Buenos Aires, Jorge Domínguez, que ``no hiciera caso'' del fallo de un juez que lo procesa por fraude y violación de sus deberes como funcionario público.

Se le acusa de haber vendido un edificio público a precio irrisorio y de mudar las oficinas que lo ocupaban a un costo local, y de demoler varias casas de una villa de emergencia y la escultura de un artista brasileño, para evitar que durmieran debajo personas sin hogar.

Líderes de la opositora Unión Cívica Radical acusados por el gobierno de ``instigar'' al juez en contra de Domínguez, dijeron que podrían realizar un juicio por ``calumnias e injurias''.

Por otra parte, el izquierdista y opositor Frente País Solidario solicitó la renuncia del presidente del Banco Central, Roque Fernández, por maniobras fraudulentas en beneficio del quebrado Banco Integrado Departamental, que afectó a poco más de 100 mil ahorristas.