La Jornada 18 de mayo de 1996

Firman el gobierno peruano y Shell-Mobil el contrato del siglo

Ansa, Afp, Efe, Dpa y Ap, Lima, 17 de mayo El gobierno peruano y el consorcio anglo-holandés Shell-Mobil suscribieron hoy un millonario contrato para la explotación de gas natural y condensados, cuya concesión será por 40 años e implicará una inversión superior a los 2 mil 700 millones de dólares.

La noche previa a la firma del llamado ``contrato del siglo'', el supuestamente desarticulado movimiento Sendero Luminoso perpetró un bombazo contra las instalaciones de la Shell-Mobil en la celebración del 16 aniversario del comienzo de su lucha armada, y provocó una decena de heridos graves y grandes daños a las instalaciones y los edificios vecinos.

Los yacimientos a explotar se localizan en Camisea, departamento de Cusco, una región de la Amazonia sur del Perú; el contrato es considerado como el más grande firmado por el Estado peruano con entes privados del extranjero. Se calcula que los yacimientos de gas en Camisea representan una riqueza natural de alrededor de 70 mil millones de dólares.

Las autoridades peruanas esperan obtener con este acuerdo ingresos por unos 6 mil millones de dólares en los próximos 25 años, en tanto que las reservas en Camisea se estima que son del orden de unos 2 mil 200 millones de barriles, cuyos yacimientos fueron descubiertos a fines de la década pasada por la transnacional Shell.

El presidente Alberto Fujimori, quien estuvo presente durante la firma de los documentos del contrato, apuntó que la suscripción de este acuerdo con la Shell-Mobil y Perúpetro significa una muestra de ``confianza'' en el país, por lo que la señal es que Perú avanza por la senda de la ``estabilidad y el progreso''.

El mandatario expresó su confianza en que ahora habrá mayores inversiones extranjeras, ya que Camisea es un hito de la mayor importancia en el desarrollo de la energía en el país. Destacó que el impacto favorable se reflejará a la par en términos sociales porque se combatirá la pobreza por ``su efecto multiplicador''.

El plan contempla la perforación de pozos, la instalación de una planta térmica y el tenido de ductos para transportar el gas y el gas licuado a Lima y Cusco. El gasoducto, que tendrá un costo de alrededor de mil millones de dólares, eventualmente podría interconectarse con el gasoducto de Bolivia y Brasil.

En la víspera de la firma de ese contrato de explotación de la mayor reserva gasífera de América Latina, los senderistas hicieron detonar un coche-bomba de unos 15 kilos de dinamita en parte de un depósito y oficinas de la Shell-Mobil, cuyas instalaciones se encuentran en el barrio este limeño de La Victoria, en una avenida muy transitada.

El estallido sorprendió a transeúntes y personas que se encontraban en el distribuidor de combustibles comprando gasolina, lo que provocó heridas graves a 10 personas. Además la explosión, que sobrevino antes de la medianoche, afectó casas, edificios y vehículos a cuatro manzanas a la redonda de las instalaciones de la Shell.

La policía antiterrorista y la fiscal Blanca Nélida Colán, que se presentaron en el lugar de los hechos, dijeron que los atacantes dejaron panfletos con consignas antigobiernistas y de repudio a Fujimori y a la ``venta del país''. Los volantes exhibían la hoz y el martillo, que identifica al senderismo, cuya acción coincide con el 16 aniversario del grupo.

Se estima que el ataque fue obra de la fracción Sendero Rojo, al mando de Oscar Ramírez Durand, que se niega a deponer las armas tras la captura de Abimael Guzmán. En días pasados, varios campesinos aparecieron muertos en la provincia de Tingo María, mientras en Ancash el ejército capturó a cuatro senderistas.

Entre tanto, se informó que las fuerzas armadas tienen 348 militares sometidos a investigación por presuntos nexos con el narcotráfico, mientras la policía antidrogas se apresta a solicitar informes en Europa en torno a los 174 kilos de cocaína que oficiales de la fuerza área iban a enviar a varios países del viejo continente.