Líderes y adeptos de los chinchulines huyen de Bachajón

Elio Henríquez y Juan Balboa, corresponsales, San Cristóbal de las Casas, Chis., 21 de mayo Los líderes de Los Chinchulines, y un número indeterminado de familias supuestamente simpatizantes de este grupo, abandonaron el ejido de Bachajón y se refugiaron en otras localidades, luego que anoche circuló el rumor de que ``miles'' de indígenas llegarían al poblado para detener a los dirigentes de la organización.

Paralelamente, cientos de indígenas de doce organizaciones independientes tomaron hoy durante dos horas la radio estatal en Ocosingo y realizaron bloqueos ``intermitentes'' en cuatro puntos carreteros de la zona norte, para exigir la detención y castigo de los dirigentes de los Chinchulines, a quienes acusan de haber cometidos diversos delitos durante los últimos ocho años.

Habitantes de Bachajón, ejido tzeltal perteneciente al municipio de Chilón, dijeron que el éxodo de Chinchulines que viven en San Gerónimo uno de los dos barrios en que está dividido el pobladocomenzó a las 20:00 horas de ayer. Nadie sabe bien a bien qué paso. Lo único que ha trascendido es que desde la cuatro de la tarde de este lunes comenzó a circular el rumor de que ``diez mil indígenas zapatistas'' llegarían al poblado para castigar a los integrantes del grupo priísta, conocido también como Frente Juvenil.

Tampoco se conoce cómo llegó el rumor, pero todos lo escucharon. Se hablaba de que los ``diez mil indígenas zapatistas iban a rodear el pueblo y no iban a dejar salir a nadie hasta acabar con los Chinchulines'', a quienes se acusa de haber cometido diversos delitos en los últimos ocho años.

``A eso de las siete de la noche, la tensión había crecido y el rumor de la llegada de los indígenas llevaba vientos de huracán; en pocas horas el barrio de San Gerónimo quedó casi vacío'', comentó vía telefónica un lugareño.

El informante aseveró que aún no se sabe si son 30, 40 o 50 las familias que abandonaron el lugar anoche para refugiarse en Yajalón y otros municipios de la zona. Dijo que muchas de las personas que huyeron por temor a ser agredidas nos son integrantes de la agrupación priísta, pero ``tuvieron temor porque en la asamblea del sábado pasado las obligaron a firmar un oficio y a anotarse en una lista, quién sabe con qué fines''.

De acuerdo al testimonio del bachajonteco, en el barrio de San Gerónimo habitado en su mayoría por Chinchulines, sólo quedaban unas diez familias que no salieron de sus casas.

Y efectivamente, cientos de indígenas se movilizaron hoy en toda la región para exigir que se castigue a los miembros del grupo priísta, pero no tomaron Bachajón, sino que bloquearon de manera ``intermitente'' cuatro puntos carreteros, y durante dos horas se posesionaron de la radio XEOCh de Ocosingo para dar a conocer sus demandas.

Los bloqueos se efectuaron sobre la carretera San Cristóbal-Ocosingo, en el entronque al municipio de Chilón y en la vía que une a Bachajón con Yajalón y que conecta además con el municipio de Citalá.

Mientras tanto, en el templo de Bachajón, sacerdotes y religiosas cumplieron hoy tres días de ayuno por la paz en ese lugar, al tiempo que anunciaron que indígenas de 89 comunidades harán esta misma penitencia mañana en sus localidades.

Por la noche se informó, extraoficialmente, que los campesinos que bloqueaban la carretera a la altura de Cuxuljá fueron desalojados por Seguridad Pública estatal. En el desalojo fueron detenidos Sebastián Martínez, Mario Santis Gómez, Francisco Santis Gómez y Diego Gómez Santis, quienes fueron trasladado al penal de Cerro Hueco.

Puntos bloqueados

Los puntos bloqueados por la Coalición de Organizaciones Autónomas de Ocosingo (Orcao) son: la carretera federal 199, tramo Ocosingo-Palenque, a la altura del lugar conocido como Crucero de Temó; el tramo Ocosingo-Palenque, a la altura del rancho San José El Contento; una tercera ubicada en Citalá y el crucero Cuxuljá.

Al mantener bloqueados esos cuatro puntos, se incomunica del centro del estado a por lo menos seis municipios: Palenque, Chilón, Yajalón, Sabanilla, Tila y Tumbalá.

En tanto, el subsecretario general de Gobierno, Uriel Jarquín Gálvez, dijo hoy que no habrá impunidad en el caso de Bachajón, donde murieron seis personas, y aseguró que las investigaciones aún no han sido concluidas por la Procuraduría.