La Jornada 22 de mayo de 1996

Intenta el senador bloquear el envío del equipo; hay un deficiente monitoreo, advierte

Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 21 de mayo Uno de los principales objetivos del programa de asistencia de seguridad con México este año, es incrementar la cooperación en operaciones militares conjuntas, afirma el Departamento de Estado. Empero, funcionarios de ambos países advirtieron hoy que esa terminología podría ser malinterpretada, ya que no tiene la intención de describir actividades en las que personal militar de ambas naciones trabaje conjuntamente.

Esta confusión en la terminología resucita una larga controversia sobre los objetivos de la política estadunidense hacia México y resalta de nuevo las divergencias entre los objetivos concretos a corto plazo y los deseos a largo plazo, afirmó un oficial militar estadunidense retirado, con amplia experiencia en la política norteamericana en América Latina.

En un informe sobre los programas de asistencia de seguridad presentado al Congreso en marzo pasado, el Departamento de Estado describe el objetivo específico de su propuesta de un programa de capacitación militar para las fuerzas armadas mexicanas, de un millón de dólares, como ``la relación militar abierta y de cooperación de México con Estados Unidos''.

Bajo este encabezado, el informe describe el programa de Educación y Adiestramiento Militar Internacional (IMET, por sus siglas en inglés) como el otorgamiento de entrenamiento profesional y técnico en áreas de interés mutuo, habilidades de administración y normas de derechos humanos, entre otros temas.

La efectividad del programa, dice el informe oficial, ``será medida en parte por la promoción de oficiales y personal civil entrenados por Estados Unidos a posiciones de liderazgo y comando; la interoperabilidad incrementada y la cooperación en operaciones militares conjuntas; la efectividad en misiones antinarcóticos, y otras de seguridad pública''.

Al ser consultada sobre este texto del informe público, una fuente diplomática mexicana en Washington consideró esta descripción como ``una muy mala caracterización del programa de cooperación bilateral en materia de defensa. Este texto está descontextualizado, ya no proyecta con precisión lo que está ocurriendo en la cooperación entre ambos países''.

A su vez, un funcionario del Pentágono consideró que puede darse una posible malinterpretación de ``operaciones militares conjuntas'' porque en la terminología castrense la frase no describe operaciones entre dos o más países. El diccionario de Términos Militares del Departamento de Defensa, describe operaciones ``conjuntas'' como maniobras en las que participa más de un ala de las fuerzas armadas de la misma nación: marina, ejército, fuerza aérea. Asimismo, operaciones ``combinadas'' son las que tienen lugar entre las fuerzas armadas de dos o más países aliados. Según este funcionario, cuando el Pentágono describe operaciones involucrando a los militares de dos países diferentes, la frase utilizada es ``operaciones combinadas'' y por lo tanto, si el informe citado tenía la intención de describir operaciones entre México y Estados Unidos, la frase hubiera contenido la palabra ``combinadas''.

El funcionario del Pentágono dijo en entrevista con La Jornada, que en el contexto de este párrafo contenido en el informe del Departamento de Estado, el objetivo de ``la interoperabilidad incrementada y cooperación en operaciones militares conjuntas'' tiene la intención de describir un incremento en la capacidad de coordinación de operaciones dentro de las mismas fuerzas armadas de México. ``Todo esto es interno, dentro de México'', dijo la fuente.

Sin embargo, sobre esta explicación no existe un acuerdo unánime en la administración Clinton. Preguntado sobre el mismo informe del Departamento de Estado, otro alto funcionario del gobierno estadunidense dijo: ``No hay ningún plan para operaciones militares conjuntas, ni hay alguna discusión sobre el particular. Estamos muy complacidos con nuestra relación militar, la cual se está desarrollando con base en el respeto mutuo y la preocupación sobre la soberanía''.

Otro funcionario más insistió en que el término ``conjunto'' en Estados Unidos no tiene el mismo significado que en México, y opinó que el texto tiene la intención de describir una situación en la que cada país realiza operaciones en su propio territorio, pero que las operaciones se desarrollan simultáneamente y de una manera coordinada.

Aunque al parecer existe unanimidad en las declaraciones en el sentido de que no habrá operaciones conjuntas o combinadas entre las tropas estadunidenses y mexicanas, el informe --oficialmente conocido como Presentación Congresional para Operaciones Extranjeras del Departamento de Estado para el Año Fiscal 1997-- de nuevo revela una falta de precisión en la descripción de la relación bilateral producto de las sensibilidades en ambas naciones.

El secretario de Defensa, William Perry, en su visita a México el año pasado tocó el tema de ejercicios de entrenamiento entre ambos países que permitiera a los militares de cada nación practicar acciones de respuesta a desastres naturales, en particular en la zona fronteriza, informaron fuentes del Pentágono en esa ocasión.

Un alto oficial militar estadunidense retirado comentó que durante más de una década Estados Unidos ha estado buscando promover una cooperación más amplia entre las fuerzas armadas de ambos países. De acuerdo con esta fuente, que pidió no ser identificada, un elemento dentro de ese deseo siempre ha incluido la posibilidad de operaciones militares conjuntas o combinadas. ``A mi parecer, no veo que ocurra y la mayoría de oficiales entiende que esto no puede darse ahora, pero es parte del ideal estadunidense de una relación a largo plazo''.