La Jornada 2 de junio de 1996

En dos meses, 84 ancianos muertos en una clínica de Brasil

Ap y Ansa, Río de Janeiro, 1o. de junio El ministro de Salud brasileño, Adib Jatene, se declaró ``consternado'' ante las deplorables condiciones en que se encuentra una clínica geriátrica privada localizada en Río de Janeiro, en donde 84 pacientes han muerto en los dos últimos meses.

``La impresión que tuve es muy ruin'', admitió Jatene tras visitar la clínica de Santa Genoveva, y si bien reconoció que el gobierno paga sólo el equivalente a 18 dólares diarios por paciente debido a la ``falta de recursos" destinados al sector salud, ello no ''justifica de ningún modo el lamentable estado de sus instalaciones", afirmó.

El ministro del sector sanitario prometió una "rigurosa investigación" en torno a las denuncias contra la clínica, que está afiliada al Sistema Unico de Salud, antes de darla de baja o pedir sanciones para sus responsables.

La Comisión Estatal de Salud reveló que la mencionada clínica había reportado 32 muertes en el mes de abril y 52 en mayo.

"Es un número extremadamente alto, ni aunque se tenga en cuenta que son pacientes de enfermedades crónicas hay justificación" para ello, según dijo la funcionaria Lucia Souto.

De acuerdo datos proporcionados por diversos medios de prensa, las autoridades sanitarias y judiciales pudieron comprobaron que, según las autopsias practicadas a los tres últimos fallecidos, estos tenían indicios de desnutrición y neumonía aguda.

Las irregularidades verificadas --entre ellas la reutilización de agujas y jeringas, el empleo de medicamentos con fechas vencidas y de agua contaminada, así como las pésimas condiciones de higiene tanto de los alimentos como de las propias instalacionesÐ desencadenaron un gran escándalo en este país .

Algunos analistas locales compararon esta situación con la registrada en Caruarú, estado de Pernambuco, donde desde febrero hasta la fecha han muerto 50 pacientes sometidos a hemodiálisis, que se contaminaron con agua.