Alto a la cultura de la violencia, demanda Zedillo
Roberto Garduño y Triunfo Elizalde Los altos niveles de violencia y los enfrentamientos entre la fuerza pública e integrantes de la sociedad civil fueron temas que abordó el presidente Ernesto Zedillo, quien advirtió: ``Cotidianamente se transmite, se reproduce y se exalta una cultura de la violencia como medio normal para alcanzar bienestar, riqueza, poder y, absurdamente, aun justicia''.
Al recibir el informe anual de actividades de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), el Ejecutivo recogió con interés la propuesta hecha por el ombudsman Jorge Madrazo Cuéllar para emprender una campaña nacional de unidad contra la violencia:``En la violencia, en la intolerancia, en la prepotencia, en la ira y en el rencor se incuba la división entre los mexicanos. La violencia no es buena para nadie'', puntualizó.
Jorge Madrazo Cuéllar y el presidente Ernesto Zedillo,
al término de la presentación del informe de la CNDH.
Foto: José Antonio López
Ante los integrantes del consejo de la CNDH, el secretario de Gobernación, Emilio Chuayffet, los presidentes de la Gran Comisión de las cámaras de Diputados y Senadores, el mandatario llamó al pueblo mexicano a cerrar las puertas a la violencia.
``La sociedad mexicana debe apelar a la conciencia y a la responsabilidad de los medios de comunicación masiva para que encuentren las vías idóneas para un uso positivo y autorregulado que evite seguir alentando la cultura de la violencia. Su contribución será invaluable para fortalecer en los futuros ciudadanos su rechazo a la violencia y su disposición al esfuerzo pacífico como único medio legítimo de progreso''.
En su alocución, insistió que la unidad nacional contra la violencia dará un impulso decisivo a una cultura de respeto al Estado de derecho y a la dignidad de las personas.
Expresó su insatisfacción porque en seis años desde que se creó la CNDHsólo se han cumplido 60 por ciento de las recomendaciones emitidas. Esa cifra contrasta con el 90 por ciento que se tiene registrado en otros países, incluso de América Latina.
Ernesto Zedillo mostró interés por la propuesta que emitió la Federación de Oganismos Públicos de Defensa de los Derechos Humanos para reformar el artículo 102 ``B'' de la Constitución. Dicho ordenamiento señala que el Congreso de la Unión y las legislaturas de los estados crearán organismos de protección de los derechos humanos, pero no serán competentes en asuntos electorales, laborales y jurisdiccionales.
El discurso presidencial también hizo alusión al incremento de las quejas por negligencia médica y dijo que la Comisión Nacional de Arbitraje Médico, de reciente creación, será un instrumento para lograr la equidad y la responsabilidad en ese ámbito.