En el último bienio el consumo per cápita de arroz cayó 34%
Matilde Pérez El consumo per cápita de arroz en México pasó de seis a cuatro kilogramos en los últimos dos años, mientras este año las importaciones le costarán al país más de 300 millones de dólares para cubrir la demanda de consumo interno que supera las 400 mil toneladas, según reportes del Consejo Mexicano del Arroz (CMA).
Considerado uno de los principales alimentos de la dieta básica de los mexicanos, después del maíz, frijol y trigo, la producción mexicana de arroz está frenada por la ``retirada de la banca privada del campo y la exigencia del FIRA de que ésta sea el único conducto para hacer llegar el financiamiento disponible para la producción de granos''.
``Es una situación paradójica, ya que a pesar de los atractivos precios internacionales y del compromiso de los industriales de dar el 20 por ciento del aval requerido, los banqueros se resisten a llegar al agro'', apuntaron Antonio Lajud y José Valencia Flores, director y secretario técnico, respectivamente, del Consejo Mexicano del Arroz.
Los requerimientos financieros de los productores de arroz son de por lo menos 40 millones de pesos para sembrar las 100 mil hectáreas, superficie que se tenía en 1990, señalaron, y mencionaron que hay 100 mil hectáreas que podrían sembrarse con el alimento y con ello México podría recuperar la autosuficiencia en los próximos cinco años.
Disgustados por el ``contrabando técnico de arroz'' que detectaron y cuyas pruebas reúnen para exigirle al gobierno que establezca salvaguardas e incluso llegue hasta la revisión del Tratado de Libre Comercio en el renglón del arroz, los directivos del CMA explicaron que México sólo acepta importaciones de Estados Unidos: el año pasado se compraron a dicho país 67 mil toneladas de arroz blanco y 265 mil toneladas de arroz palay (con cáscara).
Explicaron que hasta la fecha no pueden cuantificar el daño causado por el ``contrabando técnico de arroz'' que están realizando algunos envasadores, pero la Secretaría de Comercio y Fomento Industrial (Secofi) ya se comprometió a revisar calidades y, de persistir esa situación, incluir las normas de importación.
Ante la escasez mundial de granos, el precio del arroz pasó de 180 a 270 pesos la tonelada, y se prevé que durante los próximos tres años sus cotizaciones se mantendrán elevadas en los mercados internacionales.
``Por eso estamos viendo con preocupación la posibilidad de introducción de arroces importados que no responden a la calidad establecida y demandada, lo cual perjudica a 17 mil productores y a los industriales, y beneficia únicamente a los empacadores'', abundaron.
Las señales del mercado muestran que la producción de este alimento en los próximos tres años será rentable, y eso podría ayudar a que muchos productores que dejaron el cultivo volvieran a sembrar. Actualmente, la producción nacional es de sólo 258 mil toneladas de arroz palay --equivalentes a 155 mil toneladas de arroz blanco--, es decir, apenas el 39 por ciento del consumo nacional.
México, especificaron Lajud y Valencia Flores, es uno de los mercados más atractivos para los estadunidenses, ya que el negocio les dejó en 1995 más de 300 millones de dólares y para este año han determinado invertir 300 mil dólares en publicidad para convencer a los mexicanos de ``consumir arroz estadunidense''.
Por su parte, el CMA en coordinación con la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural (Sagar) empezará también una campaña, para la cual los industriales y productores invirtieron 200 mil pesos y el costo del tiempo oficial es de 8 millones de pesos.
Uno de los renglones en los ``que estamos atorados es en la producción de semillas mejoradas. Los requerimientos actuales son de 12 mil toneladas pero hay escaso financiamiento. Sería excelente que cada uno de los productores e industriales aportaran un peso por tonelada para lograr esa producción, y alcanzar entonces una productividad de 15 toneladas por hectárea. Hasta la fecha el rendimiento por hectárea es de 4 toneladas por hectárea'', es decir, el mismo nivel de 1993 de acuerdo con estadísticas de la Sagar.
Para el actual ciclo primavera-verano se tiene previsto sembrar 90 mil 864 hectáreas y tener una producción de 402 mil 663 toneladas en zona de temporal, mientras en riego sería de 42 mil 313 hectáreas y 223 mil 528 toneladas.