Aumentó en dos años 328% el ingreso mensual del Presidente

Salvador Guerrero Chiprés El presidente Ernesto Zedillo Ponce de León percibe 82 mil nuevos pesos de ingresos nominales mensuales, lo que representa un aumento de 328 por ciento respecto al salario recibido cuando asumió el cargo el primero de diciembre de 1994, informó ayer Alianza Cívica. El organismo agregó en un informe que el ingreso mensual del Presidente aumentó siete veces más que el salario mínimo, cuya mejoría se ubicó en 47 por ciento en estos últimos 18 meses.

Según datos de la Cámara de Diputados, citados por Alianza Cívica, el salario nominal bruto de Zedillo era de 14 mil pesos a su llegada al cargo. Un año después subió a 52 mil y hoy es de 82 mil.

La organización no gubernamental indicó que, con relación a los otros dos gobernantes pertenecientes al Tratado de Libre Comercio, el presidente Zedillo ocupa el tercer lugar después de Bill Clinton (128 mil pesos mensuales) y del canadiense Jean Chrétien, quien percibe el equivalente a 83 mil pesos por mes.

``Por otro lado, han seguido creciendo los salarios de los funcionarios de alto nivel. Del último año de Carlos Salinas (1994) al primero de Ernesto Zedillo (1995) el salario del Presidente se incrementó en 271 por ciento (de alrededor de 14 mil a 52 mil pesos). Entre 1995 y 1996 el salario volvió a crecer en 57.6 por ciento (de 52 mil a 82 mil), lo que significa que si sumamos los dos porcentajes en lo que aumentó el salario, nos da un 328 por ciento. Pero si se compara el salario de 1994 con el de 1996, este aumento alcanza 485 por ciento'', precisa.

Al dar a conocer la primera etapa del seguimiento de su programa Adopte un Funcionario, Sergio Aguayo, de la directiva de Alianza Cívica, consideró que ``no se explica la escandalosa contención salarial de todos los trabajadores ante la afrentosa proteccion del salario de los funcionarios''. Precisó que ese programa salarial ocupa una cantidad que es 10 mil millones de pesos superior al programa gubernamental contra la pobreza.

En conferencia de prensa, el organismo no gubernamental recordó que aunque el presidente Zedillo ofreció durante su campaña ``encabezar un gobierno informador'', tardó más de un año en responder a la petición de que informara sobre presupuestos asignados, ingresos personales y acerca de las condiciones bajo las cuales hace pública su declaración patrimonial.

Zedillo es el primer ``adoptado'' del programa de supervisión ciudadana. De tener recursos, indicaron, harían el monitoreo del regente capitalino y del titular de la Procuraduría General de la República.

Alianza Cívica interpuso amparo ante la tardanza del Ejecutivo federal para responder a su derecho de petición. La Presidencia de la República presentó datos ``de manera incompleta e imparcial'', indicó Sergio Aguayo, de la coordinación nacional del organismo, sólo después de que la jueza Rosa Elena Rivera Barbosa, del juzgado quinto de distrito, resolvió a favor del organismo el 16 de mayo pasado.

La secretaria ejecutiva de Alianza Cívica, Martha Pérez, entregó a los reporteros reunidos en la Asociación de Corresponsales Extranjeros, copias del informe Las violaciones al derecho de información de los mexicanos. La demanda de amparo de Alianza Cívica contra la Presidencia.

En el documento se hacen notar ``las enormes dificultades'' que hubo que vencer para encontrar los datos citados. La Presidencia de la República ``maneja presupuestos muy cuantiosos cuya administración no es clara; además, existe gran ambigedad sobre los ingresos que recibe el Presidente porque no hay información sobre compensaciones o bonificaciones de fin de año'', destaca en el informe.

Se precisa que el llamado Ramo 23, dedicado a ``provisiones salariales y económicas'', tiene asignado ``cantidades gigantescas que crecen pese a a crisis''. Este año el monto es de 31 mil millones de pesos, cerca de 4 mil millones de dólares. De esa porción del presupuesto federal la Presidencia emplea 650 millones de pesos ``con total discrecionalidad''. A este apartado se le conoce como la partida secreta.

El programa salarial del Ramo 23, dedicado ``a proteger el salario de los servidores públicos'', ocupa el 60.6 por ciento del monto total de ese ramo y asciende a 19 mil millones de pesos. Caba destacar que el Programa contra la Pobreza es de solo 9 mil millones de pesos.

Alianza Cívica consideró ``poco creíble'' una cifra citada en la prensa 328 mil pesos que correspondería a lo que el Presidente recibió como bonificación en 1995 por ``productividad y eficiencia'' y que es menos de la mitad de lo que se asignó a Oscar Espinosa Villarreal, quien manejó la tesorería priísta cuando Zedillo fue candidato a la Presidencia de la República.

Emilio Alvarez Icaza, de la coordinación nacional de Alianza Cívica, consideró ``inmoral'' la desproporción entre el aumento general de los salarios de los mexicanos y el del Presidente: ``Dejamos claro que no encontramos hasta ahora ninguna ilegalidad, sino inmoralidad y falta de transparencia en el ejercicio presupuestal'' de la Presidencia.

Sergio Aguayo expresó que ``frente al control escandaloso de los salarios, no puede avalarse el aumento de gastos de la Presidencia de la República; el Presidente debería tener mayor sensibilidad''.

Criticó que Ernesto Zedillo visite en Canadá a representantes de organismos no gubernamentales, mientras que en México ni siquiera los ha recibido. ``No mordemos, somos francos y capaces de civilidad para respetar la investidura'', indicó.