En 6 años, más de 80 ataques a templos de minorías; Jackson critica a la Suprema Corte
Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Nueva York, 13 junio Otras dos iglesias de congregaciones negras en el sur del país fueron incendiadas hoy, lo que aumentó las demandas para que el gobierno federal tome acciones a fin de detener los ataques.
Los últimos atentados, ocurridos en Oklahoma y Florida, se produjeron un día después que el presidente Bill Clinton visitó las ruinas de una iglesia de la comunidad negra en Carolina del Sur. Desde hace 18 meses se han producido más de 30 incendios, al parecer intencionales, de templos negros en varios estados del sur. Clinton, el candidato republicano a la presidencia Bob Dole, la Cámara de Representantes y decenas de políticos y figuras religiosas condenaron los últimos ataques.
No obstante, el reverendo negro Jesse Jackson sostuvo que el creciente clima racista en Estados Unidos está promoviendo este tipo de ataques y subrayó que la decisión adoptada hoy por la Suprema Corte --nulificando los distritos electorales diseñados para incrementar la presencia de comunidades negras en el Congreso--, así como decisiones de la mayoría republicana en el Congreso para reducir los programas de asistencia social para comunidades marginadas y los pobres, son factores que propician las condiciones que llevan a este tipo de actos de destrucción.
``Uno no puede pedir poner fin a los incendios vertiendo gasolina'', dijo Jackson en una declaración. El líder del movimiento de los derechos civiles y de la Coalición Arcoiris, sostuvo que el clima racista se nutre de hechos como la decisión de hoy de la Suprema Corte para anular los distritos electorales en Carolina del Norte y Texas, diseñados para concentrar al electorado negro en un sólo distrito y así asegurar la elección de representantes políticos negros.
Esta mañana los bomberos de Enid, Oklahoma, lucharon durante horas para controlar el incendio en la iglesia bautista del Primer Misionero, pero el edificio sufrió severos daños y deberá ser reconstruido. El inmueble tenía 18 años, pero la congregación fue formada hace más de un siglo por un grupo de esclavos liberados. El jefe de los bomberos, Bill Presley, explicó que factores como la intensidad y tamaño del incendio provocaban sospechas sobre su origen, pero todavía no se tenían los elementos para sostener que el siniestro fue provocado.
En un incidente separado, la televisora ABC informó esta noche que otra iglesia de una congregación negra en Mariana, Florida, fue incendiada esta tarde, pero hasta el momento no existían más detalles sobre el hecho.
Noah Chandler, vocero del Centro por la Renovación Democrática con sede en Atlanta, Georgia, informó hoy a La Jornada que más de 80 iglesias negras o multirraciales habían sido incendiadas o atacadas desde enero de 1990. Con los ataques de hoy, más de 35 iglesias han sido incendiadas en los últimos 18 meses --cinco en los últimos 10 días--. El Ku Klux Klan ya ha sido implicado en dos de los ataques.
Según el Centro por la Renovación Democrática (Center for Democratic Renewal), influyente organización de investigación de los grupos racistas del sur, actualmente el Buró Federal de Investigaciones (FBI) está investigando 42 incendios de iglesias en 15 estados, incluyendo 33 casos en iglesias principalmente negras.
Bob Dole condenó hoy en forma enérgica estos últimos ataques, pero también reiteró que la administración Clinton ha ``politizado'' lo que debiera ser un tema de preocupación para todos los estadunidenses. Hablando en conferencia de prensa esta tarde, Clinton respondió que no percibía como político criticar el incendio de iglesias y el ``impulso racista'' que al parecer está motivando estos ataques. Y anunció que esta invitando a los gobernadores de todos los estados afectados a la Casa Blanca la semana entrante para examinar la situación y que ha ordenado a otras agencias federales unirse a la investigación.
``Este país fue fundado sobre la premisa de la libertad religiosa'', dijo. ``Todos los que tenemos responsabilidad en este rubro debemos trabajar tiempo extra para llegar al fondo de estos crímenes y ayudar a la reconstrucción de iglesias y comunidades''.
Ayer, el presidente visitó lo que quedó de una iglesia en Greeleyville, Carolina del Sur, que fue destruida por un incendio sospechoso a principios de esta semana.
``Es una señal positiva que el presidente declare sobre este tema'', dijo Chandler del Centro por la Renovación Democrática en entrevista con La Jornada. ``Pero debieron ocurrir 80 ataques contra iglesias en el curso de seis años para que por fin una figura nacional dijera algo'' al respecto.
Liberan a policías que golpearon a King
En otra controvertida decisión, la Suprema Corte desestimó un dictamen de un tribunal menor que podría haber obligado a los ex agentes Stacey Koon y Laurence Powell, acusados y sentenciados por la brutal golpiza propinada a Rodney King en 1991, a volver a la cárcel por la paliza.
La comunidad negra del país recibió así su segunda derrota en el día. Ambos ex agentes blancos de la policía de Los Angeles fueron declarados inocentes en un primer juicio, lo que provocó en 1992 los peores desórdenes ocurridos en Los Angeles en años. En un segundo juicio, éste por violación a los derechos civiles de King, fueron declarados culpables.
Los jueces decidieron por unanimidad revocar un dictamen de un tribunal de apelaciones que habría obligado a ambos ex agentes a pasar hasta 57 meses en prisión, y decidió transferir el caso a un juez federal que debe reconsiderar la validez de imponer a ambos hombres sentencias más severas. El juez podría imponer una condena más severa en lugar de mantener su sentencia original de dos años en prisión, que Koon y Powell han cumplido ya.
Se rinden los Freemen; complot en Nueva York
Los últimos miembros del grupo Freemen, que no reconoce al gobierno federal ni a la ley, se rindieron esta noche al FBI poniendo fin así y sin violencia, a un sitio policial de 81 días en un rancho en Jordan, Montana, informaron las agencias Reuter y Afp.
El enfrentamiento comenzó tras el arresto de dos de los principales líderes de la milicia derechista, por acusaciones de fraudes millonarios. Algunos de los milicianos, entre ellos mujeres con sus hijos, abandonaron el rancho a lo largo del sitio y los 16 últimos se rindieron esta noche; se cree que 12 de ellos serán acusados de delitos estatales o federales, incluyendo la circulación de millones de dólares en cheques falsificados y amenaza de matar a un juez.
Los Freemen, al igual que varias otros grupos paramilitares de derecha que operan en este país, sostienen que el gobierno federal ejerce su autoridad violando la Constitución y se niegan a someterse a las autoridades; muchos de ellos poseen armamento.
Por otra parte, las autoridades del condado de Suffolk, estado de Nueva York, informaron que la policía desarticuló este jueves una aparente conspiración para asesinar con material radiactivo a políticos de Long Island. Dos hombres fueron detenidos y acusados de conspiración para cometer asesinatos. El fiscal de distrito, Bob Catteson, precisó que en el complot los sospechosos, impulsados por su odio obsesivo contra las figuras políticas y con la ayuda de otras personas, tenían la intención de diseminar material radiactivo en el asiento del automóvil de las víctimas --varios políticos locales del Partido Republicano--, en su alimento o cerca de ellas, con la esperanza de que contrajeran una enfermedad incurable que les causara la muerte.
En la casa de uno de los detenidos fueron hallados cinco envases de material radiactivo y armamentos y municiones, un detector de minas y varios materiales de las milicias