La Jornada 17 de junio de 1996

La construcción, inútil; sólo sirve a intereses políticos de su promotor, aseguran agentes

Jorge Alberto Cornejo, corresponsal, Tijuana, BC., 16 de junio El Servicio de Inmigración y Naturalización (SIN) de Estados Unidos aceptó la propuesta del congresista californiano Duncan Hunter e iniciará este mes la construcción de la triple malla metálica en la frontera de Tijuana con San Diego, para lo cual se autorizó una partida presupuestal de 4.3 millones de dólares.

Para el legislador republicano por el distrito de El Cajon, la construcción de los primeros 3.5 kilómetros de un muro paralelo al ya existente en el área de Imperial Beach, representa el primer paso para lograr la construcción de tres muros, como indica su propuesta.

Sin embargo, para algunos agentes de la Patrulla Fronteriza significa que se incrementarán los riesgos y la presencia de delincuentes identificados como asaltapollos. Uno de ellos aseguró que la construcción de la triple malla es innecesaria y sólo responde a intereses políticos del congresista Hunter.

Los nuevos muros serán construidos con concreto y metal. Además en la región de Mesa de Otay será levantada también este año cinco kilómetros más de un muro metálico de 4.5 metros de altura, con alambres de púas en la parte superior.

Aunque la construcción de la triple barda aún debe ser autorizada por la junta de la Patrulla Fronteriza en Washington, oficiales de la corporación en San Diego indicaron que se preparan ya los planos para iniciar los trabajos dentro de una primera fase de prueba.

El jefe de la corporación estadunidense en el condado de San Diego, Johnny Williams, dijo al diario San Diego Union-Tribune que se monitorearán por etapas los logros que se obtengan con la construcción de una doble barda y luego con las tres mallas, antes de aprobar la medida para los 106 kilómetros de frontera que comprende el sector.

En algunos puntos de la frontera entre Tijuana y San Diego la triple malla fue colocada a principios de este año, y los oficiales de la corporación aseguran que no han notado ningún beneficio adicional al que se obtiene con sólo una cerca.

También en Tijuana, el vicepresidente de la Academia Mexicana de Derechos Humanos, José Luis Pérez Canchola, dijo hoy a La Jornada que la medida tiene como origen un interés político encaminado a impresionar a los electores que ven que los republicanos promueven hechos concretos de control migratorio.

El investigador y activista mexicano no ve en la construcción de muros una solución verdadera que contribuya a frenar el flujo migratorio, ya que estudios de la Coalición pro Defensa del Migrante en esta frontera indican que el mayor número de connacionales que se trasladan ilegalmente al vecino país lo hacen por las garitas utilizando documentación apócrifa y por regiones montañosas por donde aún no existe ningún muro que bloquee la frontera.

Pérez Canchola insistió en que la construcción de la doble y triple barda es una respuesta a hechos consumados y no ataca las causas de la migración; por ello constituye sólo una acción con impacto político que no resuelve de fondo el problema.

La medida contribuirá, asegura Pérez Canchola, a que los migrantes que intentan llegar a California ilegalmente utilicen rutas en los desiertos y en las regiones montañosas, lo que elevará, sin duda, el número de accidentes y decesos.

Durante este año, al menos 14 migrantes mexicanos han muerto en el este del condado en la región montañosa de Tecate, la mayoría de ellos deshidratados, pues tienen que caminar hasta cuatro días en una región infestada de víboras de cascabel y sin agua.