Deshidratación e insolación, causas aparentes; se les buscaba desde hacía dos días
Notimex, El Paso, 16 de junio Tras dos días de búsqueda, agentes de la Patrulla Fronteriza localizaron los cuerpos de tres indocumentados mexicanos que se extraviaron en el desierto de Arizona al intentar cruzar la frontera procedentes de México.
``Todo hace indicar que murieron por deshidratación y exposición al sol'', dijo Rob Daniels, vocero de la Patrulla Fronteriza en Tucson.
Los tres fueron encontrados en la víspera a unos 16 kilómetros al sur de la comunidad de Casa Grande, Arizona, y a unos 130 kilómetros al norte de la frontera con México.
Los indocumentados, cuyos nombres aún no han sido dados a conocer, eran buscados por agentes de la Patrulla Fronteriza desde el jueves cuando familiares suyos en Eloy, Arizona, al norte de Tucson, los reportaron como extraviados.
Daniels informó que el jueves por la noche los agentes localizaron deshidratado y confundido al cuarto miembro del grupo, quien informó que había dejado a sus compañeros detrás en una desolada área al sur de Casa Grande.
El viernes, la Patrulla Fronteriza localizó a unos tres kilómetros de la frontera al sur de la comunidad de Sells, Arizona, el cuerpo descompuesto de una persona que se presume falleció también tratando de cruzar ilegalmente la frontera.
Los agentes descartaron que esta muerte esté relacionada con los tres cadáveres localizados en la víspera.
El vocero señaló que los esfuerzos para localizar a los tres indocumentados se vieron entorpecidos por los vientos y las ligeras lluvias que se abatieron en esa zona el jueves y viernes y borraron las huellas que podrían haber dejado sobre la arena del desierto.
Daniels dijo que los hombres podrían haber caminado durante varios días bajo temperaturas que superan los 45 grados centígrados.
Los agentes que participaron en su búsqueda rastrearon una área de 500 kilómetros cuadrados y fueron informados por residentes de la reservación indígena Tojono O'odham, ubicada cerca de la frontera, que habían visto a los hombres días antes y les habían dado agua.
Con este caso, el número de indocumentados que han muerto este año tratando de cruzar la frontera asciende a cuatro, dijo Daniels.
La primera víctima de 1996 fue una mujer originaria de Perú, que murió cerca de Douglas, Arizona, a principios de mayo.
Aún no se confirma si el cuerpo encontrado el viernes se trataba también de un inmigrante indocumentado, el cual elevaría a cinco la cifra de muertos. Durante 1995, ningún inmigrante ilegal fue encontrado muerto en el desierto.
La Patrulla Fronteriza puso en operación el 17 de mayo su campaña anual Manténte fuera. Manténte vivo, para advertir a los inmigrantes ilegales de los riesgos que significa cruzar el desierto en el verano y tratar de desalentar que realicen este tipo de cruces.
Desde entonces, los agentes en el sector de Tucson, que cubre la mayor parte de la frontera de Arizona, han rescatado a unos 50 indocumentados que han estado a punto de perder la vida por el calor.