Liberan a tres miembros de la OCSS
Maribel Gutiérrez, corresponsal, Coyuca de Benítez, Gro., 2 de julio Tres jóvenes de la Organización Campesina de la Sierra del Sur (OCSS), que fueron detenidos por la Policía Judicial del estado en Tepetixtla, quedaron en libertad ayer por la tarde, sin cargo alguno. Mientras tanto, en esa comunidad se reforzó hoy la presencia militar con cuatro tanquetas y sobrevuelos de una avioneta y dos helicópteros.
Sólo en esa área de la sierra se encuentran unos 400 efectivos, que comenzaron a llegar el sábado 29 de junio para buscar a los integrantes del Ejército Popular Revolucionario (EPR).
En la entrada del poblado, de cerca de 20 mil habitantes, donde se desarrolló el principal núcleo de la OCSS, se encuentra un retén con unos 70 soldados que revisan a las personas que salen y entran.
También hay militares en el centro del poblado, y en la comandancia de la policía se instalaron unas 20 enfermeras y equipo de transmisiones del Ejército.
Cientos de efectivos militares recorren las partes altas, desde Tepetixtla hacia Filo Mayor, a pie y con vehículos Hummer artillados, en la misma zona donde hoy se comenzaron a ver sobrevuelos a baja altura.
Sobre la carretera de Coyuca a Tepetixtla, en un tramo de aproximadamente 20 kilómetros, se encontraban hoy 12 tanquetas del Ejército y tropas que se desplazaban en el camino o desplegadas en el monte, entre la vegetación.
La comandancia de la novena región militar, que abarca el estado de Guerrero, se ha negado a dar información sobre los resultados de sus operaciones en la sierra.
El agente del Ministerio Público del Fuero Común con sede en Tepetixtla, Sergio Pérez Rojas, dijo esta tarde que los militares no han hecho detención alguna en la zona, y agregó que en caso de que la hagan la consignarán ante el Ministerio Público Federal, porque el delito por el que buscan al grupo que apareció el viernes pasado en el vado de Aguas Blancas es portación ilegal de armas.
El presidente municipal de Coyuca de Benítez, Ezequiel Zúñiga Galeana, aseguró hoy que el Ejército ``no va a encontrar nada, porque no hay nada en la sierra. En este municipio no hay ningún grupo guerrillero''.
Opinó que la población no rechaza la presencia del Ejército ``porque siente que da seguridad'', pero insistió: ``Estoy convencido de que aquí no hay guerrilleros''.
Señaló que tiene contacto permanente con todas las comunidades de la sierra, y esta mañana, en un recorrido por una parte de esa región, en el poblado de Tixtlancingo, preguntó a los habitantes y le aseguraron que ``no hay nada''.
Zúñiga Galeana agregó: ``Pienso que son de La Montaña'', la región colindante con la Costa Chica y con Oaxaca y Puebla, donde habita la mayor parte de la población indígena de Guerrero.
Argumentó: ``Aquí en el municipio de Coyuca de Benítez, incluida la sierra, como en toda la Costa Grande, no hay población indígena. Aquí nadie habla náhuatl, y los del grupo armado que llegaron el viernes hablaron en náhuatl'', idioma al que tradujeron la proclama que antes leyeron en español. ``Por eso mi impresión es que no son de aquí; yo pienso que llegaron al foro, se vistieron con los uniformes, y al terminar el acto se fueron''.
Por su parte, el presidente del Comité Municipal del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Carmelo García Agustiniano, coincidió en que no ha recibido reporte alguno de la presencia del EPR, ni antes ni después de su presentación, el viernes pasado.
Acerca de la militarización de la sierra, el dirigente perredista dijo que esta mañana tuvo contacto con pobladores de Yerbasantita, Barrio Nuevo y Pueblo Viejo, en el área de la sierra de Tepetixtla, y no hay reportes de detenidos o arbitrariedades cometidas por los militares contra la población civil.
Sin embargo, rechazó la militarización: ``La gente está atemorizada. Nunca se había visto una situación de este tipo, con tantos militares en la sierra. No es la situación normal: la gente se asusta, los campesinos no pueden trabajar como siempre''.
En Tepetixtla, ayer en la tarde se liberó a los integrantes de la OCSS Gerardo Hurtado Arias, Rafael Nava y Leopoldo Martínez, que estuvieron 24 horas en los separos de la Policía Judicial del estado. No hubo denuncia contra ellos.
El agente del Ministerio Público, Sergio Pérez Rojas, informó que los detuvieron porque ``insultaron a los judiciales que hacían recorridos por la comunidad, pues se sienten muy amparados porque pertenecen a la organización''.
Uno de los jóvenes detenidos, Gerardo Hurtado Arias, de 19 años, relató que el domingo por la tarde estaba con sus amigos, que viven en El Coapinolar, en la parte alta de la sierra, y cuando se acercaron unos policías judiciales les gritaron: ``Ahora sí se van a chingar!'', en referencia al grupo armado que se presentó en el vado de Aguas Blancas. Los judiciales reclamaron: ''Te sientes muy picudo?'', y sin decir más golpearon a los jóvenes con sus armas y los llevaron a los separos de la corporación.