La Jornada 5 de julio de 1996

Yeltsin: con mi triunfo ``ganó la democracia para siempre''

Afp, Ansa, Dpa, Efe y Reuter, Moscú, 4 de julio El presidente Boris Yeltsin aseguró hoy que con su triunfo electoral ``ganó la democracia para siempre y ya no habrá otro camino'', e hizo un llamado a la reconciliación al afirmar que no hay razón para dividir al país entre ``vencedores y vencidos'' pues en su gabinete habrá ``lugar para todos''.

El candidato presidencial comunista Guennadi Ziuganov aceptó su derrota y aseguró que no impugnará los resultados de los comicios; no descartó que comunistas pudieran ingresar al nuevo gabinete.

Los resultados del escrutinio de 99 por ciento de los votos concedían 53.70 por ciento de la votación a Yeltsin contra 40.41 de Ziuganov.

El presidente ratificó hoy en su cargo al primer ministro Victor Chernomirdin y le encomendó la formación del nuevo gabinete en el que, aseguró, ``hay lugar para todos''. Sin embargo, Chernomirdin aseguró que no formará un gobierno de coalición, como han sugerido los comunistas, pero que el nuevo gabinete podrá incluir a personalidades de izquierda de probado ``profesionalismo''.

Ziuganov, por su parte, aseguró que respetará ``la voluntad de los ciudadanos'', pero acusó a quienes dirigieron la campaña de Yeltsin de ``incurrir a una movilización sin precedentes de los fondos del Estado'' y que hubo violaciones de la ley electoral para apoyar al presidente. Agregó que la entrada de los comunistas al gobierno ``no tendría sentido'' pero no descartó que ``si el gobierno es profesional y honesto'' los comunistas ingresen al gabinete.

No obstante, Ziuganov advirtió que aunque su partido está en contra de métodos violentos y radicales, se verá obligado a convocar manifestaciones masivas contra del gobierno ``si la situación social continúa degradándose''.

En la primera vuelta electoral, Yeltsin, obtuvo 34. 82 por ciento de los votos, una ventaja de sólo 2.69 puntos porcentuales sobre Ziuganov, con 32.13, lo que demuestra que fue decisivo en su triunfo el apoyo del candidato nacionalista Alexander Lebed, quien entonces quedó en tercer lugar, y a quien el presidente nombró Jefe del Consejo de Seguridad. Analistas consideran que Yeltsin obtuvo también gran parte de los votos que en la primera vuelta recogió el reformista Grigori Yavlinski, quien entonces quedó en cuarto lugar. En total, Yeltsin obtuvo 12 millones de votos adicionales en la segunda ronda electoral.

En lo que respecta a la distribución del voto en base al territorio, la segunda vuelta confirmó que la llamada franja roja en el oriente de Rusia y el sur de Siberia se mantuvo fiel a Ziuganov, mientras el centro, el norte y el extremo oriente del país, así como las grandes ciudades donde son más visibles los efectos de las reformas económicas, apoyaron a Yeltsin. Observadores internacionales de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa que vigilaron las elecciones coincidieron que éstas se desarrollaron de manera libre y sin irregularidades.

Voceros de Yeltsin informaron que el presidente se trasladó hoy a su residencia del Kremlin de su casa de campo, tras haber permanecido casi una semana fuera de la escena pública por consejo de sus médicos, y agregaron que empezó a trabajar desde muy temprano. Lebed aseguró que Yeltsin debía firmar hoy un paquete de decretos, entre ellos un programa de seguridad nacional propuesto por él mismo.

Analistas aseguran, sin embargo, que la batalla por la sucesión de Yeltsin ya ha comenzado, y afirman que si el agotado mandatario necesita un periodo de reposo, éste será aprovechado por allegados suyos como Lebed o Chernomirdin, para aumentar su poder.

Los mercados moscovitas experimentaron alzas de entre10 y 12 por ciento ante la noticia de la reelección de Yeltsin y la ratificación de Chernomirdin en su cargo que, según expertos, garantiza la continuidad de las reformas económicas. El presidente estadunidense Bill Clinton felicitó al pueblo ruso por ``dar la espalda a la tiranía'' y aseguró que la reelección de Yeltsin ``tiene un sonido muy agradable'' en alusión a su propia campaña de reelección.

También felicitaron a Yeltsin los gobiernos de Japón, Alemania, Francia, España, Canadá, Polonia e Italia. El gobierno chino dijo respetar la elección del pueblo ruso y su deseo de continuar la cooperación entre ambos países, y el gobierno cubano afirmó que su relación con Rusia es independiente de los resultados electorales