La Jornada 9 de julio de 1996

Formal prisión a Peñaloza Webb y Sánchez Pizzini

Juan Manuel Venegas El juez séptimo de distrito, Ricardo Ojeda Bohórquez, dictó ayer auto de formal prisión al ex tesorero del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Carlos Tomás Peñaloza Webb, y al operador de la casa de bolsa Estrategia Bursátil, José Luis Sánchez Pizzini, por los delitos de cohecho, fraude y uso indebido de atribuciones.

Peñaloza Webb y Sánchez Pizzini están acusados de haber defraudado al IMSS fondos por 360 millones de pesos, por lo que desde el viernes pasado fueron remitidos al Reclusorio Oriente de la ciudad de México, donde permanecerán toda vez que ninguno de los dos solicitó la libertad bajo fianza a la que tienen derecho, reparando el daño patrimonial que le provocaron a la institución.

La lectura del auto de formal prisión fue hecha por el juez en presencia de los inculpados, quienes escucharon la determinación judicial tras la rejilla de prácticas del juzgado séptimo, donde apenas el viernes pasado habían rendido su declaración preparatoria.

El juez Ojeda Bohórquez precisó que Peñaloza Webb enfrentará proceso por su presunta responsabilidad en los delitos de uso indebido de atribuciones, fraude y cohecho, en tanto que su socio Sánchez Pizzini recibió el auto de fomal prisión por los ilícitos de cohecho y fraude.

De acuerdo con las investigaciones de la Procuraduría General de la República y de los auditores del IMSS, Peñaloza Webb se aprovechó del cargo de tesorero para realizar diversas transacciones financieras en beneficio personal y en perjuicio de las finanzas del Seguro Social.

En su declaración ante el Ministerio Público, el propio Peñaloza Webb reconoció que junto con Sánchez Pizzini, intervino en operaciones bancarias del IMSS obteniendo ganancias que luego depositó en una cuenta personal que tiene en un banco de Texas. Según declaró Peñaloza Webb, el 15 de mayo de 1995 recibió una llamada telefónica de Sánchez Pizzini para explicarle que estaba enterado que el IMSS vendería papel bancario emitido por Bancomer, Banpaís y Nacional Financiera.

Sánchez Pizzini le indicó que había dos compradores ``y que vendiendo más bajo el papel bancario en el que invirtió el IMSS podríamos obtener ganancias. Entonces yo me comprometí a obtener la autorización del Consejo Técnico del instituto para llevar a cabo la operación.

``A finales de mayo presenté la evaluación al comité y después de argumentarlo éste aceptó la venta del papel en las condiciones planteadas por mí.

``Días después de la transacción, Sánchez Pizzini me habló por teléfono preguntándome a dónde me mandaba las utilidades. Yo le di el número de cuenta 186-117822-7 del National Bank of Texas, donde me depositó cerca de un millón de dólares; sin embargo, hace unos días le regresé ese dinero a Sánchez Pizzini mediante una transacción financiera de banco a banco, porque me enteré de otros negocios poco claros que había hecho Sánchez Pizzini que incluían una transacción con Chrysler en una operación que causó grandes pérdidas a esa empresa.``De acuerdo con las investigaciones, se ubicaron diversas transferencias a cuentas de Peñaloza Webb desde la casa de Bolsa Anáhuac por 523 mil dólares, además de la cuenta por un millón de dólares en Texas y dos en Banpaís por 7 millones 40 mil pesos.