Represalia contra minera de Canadá por la Helms-Burton
Afp, Efe y Reuter, Washington, 10 de julio Estados Unidos anunció hoy que prohibió el ingreso a su territorio a ejecutivos de una empresa extranjera que realiza negocios con propiedades confiscadas en Cuba, la canadiense Sherrit International, en virtud de la ley Helms-Burton que endurece el bloqueo de Washington contra la isla caribeña.
Aunque el portavoz del Departamento de Estado, Nicholas Burns, se abstuvo de identificar a la empresa, fuentes legislativas e industriales dijeron que se trata de la minera canadiense Sherrit International.
También el ministro canadiense de Comercio Internacional, Art Eggleton, indicó que la misiva iba dirigida a esa compañía, que posee minas de cobalto y níquel en el este de Cuba que la minera estadunidense Freeport McRoran aseguró le fueron expropiadas por el gobierno cubano.
``Es una violación al derecho internacional y al Tratado de Libre Comercio de América del Norte'', agregó el ministro Eggleton, quien anunció que pedirá el establecimiento de un panel de resolución de disputas conforme al TLC tan pronto como se anuncien las directrices de aplicación del resto de la ley.
Burns precisó que el Departamento de Estado envió el 9 de julio cartas a ``un puñado'' de accionistas y altos ejecutivos de la compañía afectada donde se les notifica que ``están traficando con propiedades estadunidenses confiscadas en Cuba bajo el título IV''.
Las cartas precisan que tanto los directivos de la firma como sus cónyuges e hijos menores perderán el derecho a entrar en Estados Unidos a menos que en un plazo de 45 días Sherrit retire sus inversiones en Cuba.
Las sanciones del título IV alcanzan a quienes después de la promulgación de la Helms-Burton, el 12 de marzo pasado, hayan invertido en algunas de las 5 ml 911 propiedades estadunidenses confiscadas tras el triunfo de la revolución castrista en 1959, añadió el vocero. Burns advirtió además que cuatro firmas europeas que ``financian operaciones con azúcar cubano'' han hecho saber a Estados Unidos que se desligarán de esos tratos para evitar las sanciones de la Helms-Burton.
``No puedo revelar sus nombres porque así nos lo pidieron'', dijo el portavoz, quien agregó que ``se nos han acercado en un número de países alrededor del mundo para decir que están pensando en salirse de la industria azucarera cubana''.
Hasta el momento sólo el banco holandés ING anunció públicamente que no financiará más la zafra en Cuba, cuya principal exportación es el azúcar, mientras los antiguos barones del azúcar, agrupados en Miami, mencionaron que también lo harían el estatal Banco Nacional de Comercio Exterior de México, los españoles Banco Bilbao Vizcaya y Banco Sabadell, y el libanés Franzabank.
El título IV de la Helms-Burton, promulgada luego que dos avionetas estadunidenses del grupo anticastrista Hermanos al Rescate fueron derribadas por cazas cubanos en febrero pasado, establece la exclusión de ``traficantes'' del beneficio de entrada al territorio estadunidense, aunque otra disposición más polémica, el título III, aún no ha entrado en vigor. Este capítulo autoriza a los estadunidenses confiscados en Cuba a demandar en cortes locales a los inversionistas extranjeros que ``trafiquen'' con sus antiguas propiedades.
El presidente Bill Clinton tiene hasta el próximo martes para anunciar si pone en vigencia el título III o lo suspende por seis meses. Mientras dirigentes de la comunidad cubanoestadunidenses celebraron la decisión de sancionar a Sherrit y llamaron a aplicar la Helms-Burton en su totalidad, el diario The Washington Post recomendó al mandatario demócrata que ejerza su derecho a demorar esa disposición, que irrita a los principales socios de Estados Unidos como Canadá, México y la Unión Europea que la consideran extraterritorial y violatoria de los acuerdos comerciales internacionales.
``Ellos no comparten la pasión estadunidense de más de 35 años de hostigar al represivo pero envejecido y solitario dictador cubano'', dijo el comentario del influyente periódico, que calificó de ``venenoso'' el título III que --consideró-- puede causar una ``explosión de litigios que llegarían a decenas o incluso cientos de miles de casos, un paraíso para abogados''.
El Post destaca que ese recurso ampara también a los cubanos que se nacionalizaron estadunidenses incluso después de 1959, y cuyas propiedades fueron confiscadas por el gobierno de Fidel Castro.
Para el diario, Clinton debería hacer caso omiso de la presión de la campaña electoral para competir con el republicano Bob Dole por ver ``quien es más anticastrista'', y actuar en cambio como un presidente ``al afirmar el interés nacional en un procedimiento justo de reclamaciones en un sistema de comercio abierto''.
De su lado, una coalición de iglesias y organizaciones humanitarias canadienses anunció que iniciarán el próximo otoño un boicot turístico contra el estado de Florida si Estados Unidos mantiene sus planes de aplicar la Helms-Burton.
Al anunciar la campaña, el vocero Mark Fried argumentó que la ley afecta programas de ayuda como el de construcción de viviendas en Cuba, patrocinado por sindicatos, iglesias y a agencias de desarrollo canadienses, que se encuentran paralizados por la falta de material luego que Cementos Mexicanos (Cemex) recibió una carta de amenaza por parte del Departamento de Estado estadunidense.
En otro orden, el oficial cubano que secuestró el pasado domingo un avión comercial para desviarlo a la base estadunidense de Guantánamo, José Fernández Pupo, había sido expulsado en febrero pasado del Ministerio del Interior bajo sospecha de robo, dijeron hoy fuentes oficiales cubanas