La Jornada 16 de julio de 1996

Ofrece López Obrador respeto al diálogo para la reforma electoral

Se mantendrá con el gobierno una relación respetuosa, basada en principios, señala Se reunieron Muñoz Ledo y los tres candidatos Reconoce Amalia García la tendencia favorable al tabasqueño; pide ``limpiar la elección'' Unidad, lo más importante, dice Heberto Castillo

Rosa Icela Rodríguez Respetar el diálogo para las iniciativas de la reforma electoral y mantener con el gobierno una relación respetuosa ``con base en una política de principios'' son dos compromisos que asumió ayer el virtual ganador de la dirigencia nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Andrés Manuel López Obrador, y llamó a los perredistas a la unidad para efectuar un tranquilo proceso de sucesión.


Heberto Castillo, Andrés Manuel López Obrador, Amalia
García y Porfirio Muñoz Ledo reunidos en un restaurante
de la Zona Rosa.
Foto: Frida Hartz

A un día de los comicios, ayer se vislumbraron las primeras señales de concordia interna, que alejan los barruntos de impugnaciones violentas o de un proceso de desgaste por parte de las tres planillas contendientes por la dirigencia de la tercera fuerza política del país.

En una comida se reunieron el dirigente nacional perredista, Porfirio Muñoz Ledo, y los candidatos Amalia García, Heberto Castillo y López Obrador, con el fin de tener un acercamiento que logre que la transición de la dirigencia perredista se haga de acuerdo con las necesidades actuales de ese organismo político.

Al conocer los primeros resultados de la elección que favorecían ampliamente a la planilla de López Obrador, Muñoz Ledo consideró que ``el futuro presidente, el futuro secretario general y el Consejo Nacional llegarán con una amplia legitimidad'', y confió en que tendrán todos el talento, la perseverancia y la convicción partidista que les permita reconstruir los consensos internos.

Temprano, la candidata Amalia García reconoció: ``La tendencia mayoritaria favorece al compañero Andrés Manuel López Obrador''; sin embargo, demandó que se limpiara la elección porque dijo que no permitirán que ninguna irregularidad la empañe.

Por la tarde, en un comunicado, la planilla de Heberto Castillo subrayó: ``La unidad es primordial para nosotros'', y advirtió: ``Ojalá por parte de las planillas uno y tres exista madurez y no revanchismos ni exclusiones''. Informó que había entregado el paquete de impugnaciones al Comité General del Servicio Electoral.

López Obrador: más de lo previsto ``Me saqué la rifa del tigre'', comentó a reporteros el candidato que hasta ayer llevaba la ventaja en la mayoría de las casillas, al ponderar la responsabilidad que podría significar el virtual arribo a la presidencia perredista. Y al mostrarle los primeras cifras oficiales con 76 por ciento de ventaja, señaló: ``Creo que el triunfo es contundente, pero sinceramente es más de lo que yo esperaba''.

Empezó por dar un reconocimiento a los candidatos contrarios ``por su comportamiento ejemplar'' y por su entusiasmo al participar en las campañas. Al preguntarle por las impugnaciones respondió: ``Amalia y Heberto son dos compañeros responsables. Vamos a tener un Comité Ejecutivo de unidad, no vamos a excluir a nadie''.

La primera tarea es esperar el resultado de las elecciones del comité electoral y seguir hablando con los compañeros candidatos para llegar a un acuerdo en caso de que se confirme el triunfo, y después hacer un plan de trabajo para recorrer la República: ``Voy a regresar a los 31 estados y a las 16 delegaciones del Distrito Federal''.

Después mencionó una propuesta de campaña: ``Si no puedo con el paquete de las elecciones de 1997, me voy de la presidencia, pero como quiero seguir, en tres años voy a fortalecerlo''.

Anunció que apoyará la reforma electoral, pero dijo que faltan cuestiones como el padrón electoral, espacios en radio y televisión y el control del presupuesto que beneficia al PRI.

También hizo hincapié ``en la etapa de austeridad republicana'', de la que explicó: ``No se van a autorizar viáticos para hoteles de cinco estrellas ni para restaurantes de gran lujo''.

No a revanchismos: planilla dos En un tono más sereno, al saberse que obtenía el segundo lugar según las cifras oficiales, la planilla de Heberto Castillo anunció una reunión nacional a final del mes, en la que se aprobarán tareas ``privilegiando la unidad del partido y la integración democratica y plural de los órganos de elección''.

En un comunicado, el diputado Ramón Sosamontes indicó que los miembros de la planilla dos seguirán contribuyendo con sus posiciones y puntos de vista en la vida del PRD, y participarán para enfrentar con éxito las próximas elecciones en Guerrero, Hidalgo, Coahuila y estado de México, además de prepararse para participar con energía y entusiasmo en las elecciones federales de 1997.

Enseguida hicieron votos para que los miembros del PRD trabajen como un solo hombre en el impulso a la reforma política electoral y la del Distrito Federal. ``Esperamos que prevalezca la madurez en las planillas uno y tres, que no existan revanchismos ni exclusiones dentro de nuestra organización'', señalaron.

También dijo que entregó las evidencias de irregularidades en donde se aprecia el acarreo y llamó al servicio electoral a ponderar las evidencias.

En la comida, ``camaradería'' Después de comer en un privado del restaurante La Calesa de Londres, Porfirio Muñoz Ledo explicó que la reunión se había realizado ``en un clima de cordialidad y camaradería''.

Trascendió que en el encuentro se analizaron las situaciones del partido y el proceso electoral en lo general, sin hacer puntualizaciones ``más que en la unidad''. También se supo que se hicieron valoraciones sobre la gran afluencia de votantes a pesar de los centros para tal efecto e incluso se hicieron bromas.

Ya en el café, Muñoz Ledo puso interés, aunque no lo manifestara directamente, en entregar un partido unido y en que a pesar de la juventud, el organismo electoral pudo manejar el proceso.

Acompañada de Ricardo Ruiz, Rosa María Cabrera, Alejandro Encinas, Ricardo Valero y Gilberto Rincón Gallardo, Amalia García se presentó ante la prensa. Reconoció la tendencia de la planilla tres, y enseguida anunció que impugnaría las irregularidades en 15 entidades ante el organismo electoral.

Pidió que los resultados dejen satisfechos a todos, por lo que solicitó la intervención del organismo electoral nacional y actuar con apego al reglamento en el proceso de cómputo.