La Jornada 20 de julio de 1996

Acusa Felipe Calderón a la agencia publicitaria del Wonderbra de promover éste ``a costa del PAN''

El dirigente panista Felipe Calderón acusó a la agencia publicitaria de la firma Benetton, distribuidora del sostén Wonderbra, de hacer ``una campaña de doble filo'', a costa del prestigio del Partido Acción Nacional. En una carta dirigida ayer a los medios, Calderón Hinojosa explica ``cómo, a propósito de la política, la moral y los sostenes, una empresa puede hacer publicidad de su producto sin que le cueste un solo centavo''. También sostiene que ningún gobernante de su partido ha prohibido el uso de la minifalda en oficinas públicas o sugerido prohibir los comerciales que anuncian sostenes en municipios o estados gobernados por panistas. A continuación, el texto de la carta:

``En días pasados, algunas informaciones aparecidas en los medios de comunicación vincularon al PAN con la publicidad de ropa interior.

``Al respecto, quisiera hacer algunas precisiones para su conocimiento: ``1. Según la información con que contamos en el CEN, el ayuntamiento de Guadalajara no llevó a cabo ningún acto formal o de autoridad, respecto al controvertido anuncio. Sencillamente, un grupo de ciudadanos (ciertamente no `los tapatíos') se presentó con su inquietud, y un funcionario del ayuntamiento hizo llegar dicha correspondencia a la firma dueña del anuncio. Es decir, la sustitución del anuncio fue decisión del anunciante, no del ayuntamiento.

``2. No sólo no ha tomado acción alguna, sino que tampoco la han tomado otros ayuntamientos panistas; tampoco el PAN local ni el PAN estatal, ni mucho menos el CEN del PAN han hecho recomendación alguna, respecto al publicitado anuncio de ropa interior, ni nos interesa hacerlo.

``3. Suponemos, contrario modo, que al recibir la queja vehiculizada por el funcionario del ayuntamiento, la empresa vio la oportunidad de entroncar en una coyuntura publicitaria, consignada ya en las políticas publicitarias de vanguardia de firmas de prestigio como Benetton, y decidió desarrollar una campaña de doble filo, en la cual a horcajadas entre el sostén y la política la empresa propalase doble y triplemente su publicidad. Es curioso constatar que, sin mediar petición ciudadana alguna en otras partes de la República Mexicana, como es el caso del Distrito Federal, el anuncio que inicialmente dejaba ver el busto femenino, se empieza a cubrir de ropa por todo el país. ``Sirva esta carta de un ejemplo acerca de cómo, a propósito de la política, la moral y los sostenes, una empresa pueda hacer publicidad de su producto, sin que le cueste un solo centavo''. (José Ureña)