Aprehendieron en Morelia al presunto homicida de cinco estudiantes
Teresa Gurza, corresponsal, Morelia, Mich., 24 de julio José Lara Alvarez, de 23 años y quien asesinó a cinco jóvenes el pasado domingo en la cascada Agua Zarca, confesó que ``sólo queríamos quitarles sus cosas; sólo íbamos a asaltarlos, pero los maté porque me agarraron los nervios cuando vi que me reconocieron''.
Lara, albañil y padre de tres niños menores de cuatro años, fue detenido sin oponer resistencia hoy por la tarde en su domicilio ubicado en El Durazno, colonia popular de Morelia cercana al lugar de lo sucesos del domingo. Fue presentado por el procurador estatal Jorge Eduardo García Torres, quien informó que su cómplice, José Carmen González, El Chacal, está prófugo.
El sujeto dijo estar arrepentido y que El Chacal es su peón; agregó que el sábado pasado ambos estuvieron bebiendo y ya en la mañana decidieron ir a la cascada a asaltar porque no tenían dinero y por ahí nunca va la policía; poco antes de llegar fumó un cigarro de mariguana, le pidió su pistola calibre 22 a su peón y se escondió el cabello que usaba largo en una gorra. González lo tenía más largo y se lo dejó visible, pero se tapó parte de la cara con un pañuelo.
Al llegar a la cascada vio a hombres y varias muchachas sentadas oyendo música. Les dijo que era un asalto y entregaran sus cosas, pero uno de ellos, Jaime Vieyra Guzmán, se le fue encima y le disparó un rifle de diábolos. En ese momento lo reconoció porque lo había visto varias veces en el poblado Jesús del Monte, a donde iba con frecuencia, por lo que le disparó.
Después vio que los demás muchachos a los que también conocía lo miraban, ``y como vi que me reconocían me agarré tirando por nervios''. Accionó la pistola en 10 ocasiones y mató a las muchachas; fue entonces que El Chacal le dijo: ``ya te fregaste'', después alcanzó a ver que otra joven corría, pero no la persiguieron porque querían salir de ahí cuanto antes.
Vagaron por el cerro varias horas para repartirse el botín y fueron a su domicilio, se cambió y le entregó su ropa al Chacal, quien le dijo que iba a quemarla.
No aguantó y confesó los crímenes a a su esposa y madre. Ambas lo regañaron; su madre lo cacheteó y le dijo que se entregara, mientras su pareja le pidió que se escondiera y le cortó el pelo.
Lara salió de su casa y al regresar fue detenido gracias a los datos que proporcionaron varios testigos y vecinos.
Aunque el multihomicida aseguró que es la primera vez que asalta, trascendió que fue identificado por otras personas a las que robó. El procurador y el coordinador de la Policía Judicial del estado, Juan Benítez Ayala, aseguraronn que en poco tiempo atraparán al Chacal.
Por la mañana, la subprocuradora a cargo de las investigaciones, Guadalupe Mora Fausto, realizó una inspección pericial en la cascada de Agua Zarca acompañada por agentes judiciales.
Al mediodía el gobernador Víctor Manuel Tinoco Rubí había manifestado que no se escatimarían recursos en la investigación para dar con los criminales; dijo que analizará la propuesta del alcalde panista de Morelia que pide municipalizar la policía de esta ciudad y anunció recursos federales por 180 millones de pesos para fortalecer la seguridad pública y capacitar a los cuerpos de seguridad.
Por otra parte, el Comité Ejecutivo General del Sindicato de Profesores de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, exigió una amplia investigación del caso en un documento dirigido a las autoridades de gobierno, de la universidad y a la opinión pública.
El sindicato advirtió que los asesinatos son una agresión más a la razón, la universidad, la sociedad y ``constituyen un aspecto dramático'' y doloroso de un ambiente de descomposición social''.